Cuando los mexicanos nos percatamos, con meridiana claridad, de que
el presidente Trump, nos guste o no, amenazaba con imponer castigos
tarifarios a empresas norteamericanas que invirtieran en México, muy a
pesar de las probadas ventajas que nuestro país ofrece como generoso
receptor de los capitales extranjeros, y lo que es peor aún, cuando
dichas amenazas empezaron a surtir efectos nocivos en nuestra economía
ya antes de que el prepotente magnate tomara posesión como jefe de la
Casa Blanca, varias corporaciones estadounidenses decidieron cancelar o
diferir ambiciosos proyectos en el norte de México con sus lógicos
efectos en materia de captación de empleos y de generación de riqueza
recíproca para ambos países. De golpe entendí que el Tratado de Libre
Comercio, por la vía de los hechos, estaba siendo derogado.
Resulta evidente que si en México la mano de obra cuesta dos dólares
por hora y en Estados Unidos ésta se cotiza a 20, por lo menos, para que
Estados Unidos siga siendo competitivo en el mercado internacional
tendrá que subsidiar las diversas ventajas ofrecidas por México,
subsidios que deberá autorizar el congreso federal que, a pesar de estar
integrado mayoritariamente por republicanos, habrá de oponer las
debidas resistencias a que el contribuyente norteamericano pague con sus
impuestos estas medidas demagógicas reñidas con la más elemental de las
razones. Cuando la globalización ha demostrado, con sus debidos
bemoles, su eficiencia económica, constituye un verdadero suicidio
volver al amurallamiento de la primera potencia del mundo, cuyos
contribuyentes, tarde o temprano, habrán de pagar muy cara la decisión
tomada el 8 de noviembre pasado.
Los derechos de autor son propiedad de los columnistas y sus periódicos; las columnas de los foristas son responsabilidad de ellos mismo; los comentarios, mentadas de madre y albures en Disqus son, también, responsabilidad de los foristas. Este lugar no tiene fines de lucro Aquí no se censura ni se modera. CUANDO SE PUBLIQUEN DATOS PERSONALES, POR SEGURIDAD, LOS POSTS SERÁN BORRADOS. Contacto: lafaunademilenio@gmail.com