jueves, 3 de noviembre de 2011

El relativismo Esteban Arce. COLUMNA PROPUESTA POR GERRY MARTÍNEZ

En la construcción del foro,  se acepta que los foristas propongan columnistas. Gerry Martínez nos propone una columna que reflexiona sobre la tolerancia, y el relativismo.

En estos tiempos que vivimos se encumbra por todos lados la llamada Dictadura del Relativismo, que no reconoce nada como definitivo y que deja sólo como medida última al propio yo y sus apetencias.

El relativismo es una actitud que está de moda y que la disfrazan como tolerancia, y esa misma actitud le está haciendo tremendo daño a la sociedad al grado de descomponerla en nivel alarmante.

La violencia que vivimos en nuestro país no es otra cosa mas que el resultado de décadas de relativismo puesto en práctica al saber la propia sociedad que la corrupción permitía el narcotráfico pero mientras fuera destinada la droga para Estados Unidos era relativo el daño que nos hacía, ahora veamos las consecuencias.

Las apologías a la violencia en canciones, ahora en series de televisión y ya en el cine que relativamente no afectan ya son un vehículo de difusión de modos de vida equivocados.

Todos los que observan como relativos los efectos del aborto no se dan cuenta que contribuyen a la destrucción de miles de vidas en nuestro país, tan valiosas como las que se pierden en la guerra contra el crimen organizado, pero relativamente no me afecta, el relativismo observado para entender lo que significa una familia es hoy confundido con relaciones muy distintas a las que desde que el mundo es mundo se formaron para preservar la especie.

Nuestros gobernantes han sido deshonestos pero a mí me va bien, así es que mientras no me afecte, que se lleven lo que quieran, esos mismos políticos son de un partido y luego los vemos en otro totalmente apartado a la filosofía del anterior pero relativamente piensan  “a mi qué más me da”.

Otro ejemplo de relativismo, el más significativo y preocupante porque se desarrolla en el interior de la persona es el de las propias creencias, al ver cómo una moda anglosajona relativamente inofensiva  llamada Halloween permea nuestra propia fe cristiana, una tradición en donde se celebra el mal  y a sus huestes y que se lleva hasta las propias casas, escuelas, negocios de familias declaradas católicas y que representan según el último censo más del 85% de nuestra población.

Son esas mismas personas que no adornan sus casas con motivos de sus supuestas creencias cristianas en ninguna fecha pero si lo hacen para poner a un demonio o a un vampiro, bruja, etc, para disfrazarse, para ver películas, para hacer fiestas, para supuestamente de una manera relativa divertirse contraponiéndose tajantemente a lo que supuestamente creen, es decir son relativamente católicas porque dicen creer en algo pero de manera relativa y si así lo son con lo que supuestamente creen imagínense con lo que no creen ya sea como ciudadanos, esposos, esposas, novios, novias, empleados, profesionistas, etc.

¿Somos o no somos? ¿creemos o no creemos? ¿aceptamos o no aceptamos? Si no es así, sólo imagine este ejercicio desarrollado en masa, trasladado a un país y luego no se moleste cuando observa cómo están nuestras instituciones, nuestros representantes, nuestros empresarios, nuestros líderes, no se moleste porque le dirán seguramente que son o están “relativamente correctos”.

La tolerancia es convivir con el que no es como uno, o no piensa como uno, tratar de entenderlo y que nos entienda, la relatividad una vez más se define como el no reconocer nada como definitivo y dejar sólo como medida última al propio yo y nuestras apetencias.

El Chapo en Forbes, un caso puro de estupidez periodística Ciro Gómez Leyva


Detesto el discurso patriotero-llorón y me tienen sin cuidado los estereotipos racistas sobre los mexicanos. Pero lo de Forbes es un caso puro de miseria y estupidez periodística en aras de, supongo, la espectacularidad.
Me refiero a la recurrente inclusión de Joaquín El Chapo Guzmán en sus sagradas listas, ante las que medio mundo se hinca y persigna.
Según se difundió ayer, El Chapo brincó en el último año del lugar 60 al 55 en el ranking de los más poderosos del mundo. ¿Sobre qué criterios llega Forbes a esta ubicación? Sobre un par de lugares comunes:
*Muerto Osama bin Laden, El Chapo es el hombre más buscado en el planeta.
*El gobierno mexicano sigue siendo incapaz de someterlo, por lo que su “violencia desalmada” continúa.
Sobre una típica afirmación sin fuente precisa:
*Un funcionario de la DEA lo llama El Padrino del narcotráfico internacional.
Sobre una comparación imposible:
*Tiene más poder que el colombiano Pablo Escobar Gaviria en los años ochenta.
Y sobre un presunto dato duro:
*En 2011 fue detenido Víctor Manuel Félix, suegro de uno de los hijos de El Chapo, con medio millón de dólares en efectivo y media tonelada de cocaína.
Es todo. ¡Guau! Con esa misma vulgaridad metodológica, Forbes calcula que la fortuna del self made man de 54 años líder del Sinaloa Cartel ronda los mil millones de dólares, que lo colocan como el décimo más rico de México y el mil 140 en el mundo.
Eso sí, la espectacularidad funciona. Ayer por la tarde, El Chapo era el quinto personaje más popular en la página web de Forbes, con más de 10 mil visitas.
Creo que fue el gran Amos Oz quien dijo que tal vez el peor aspecto de la globalización sea la infantilización del género humano.
Vean, si no, este ejemplo editorial

Formar policías no es hacer salchichas Carlos Marín


Ayer, Héctor Aguilar Camín lamentó el desencuentro del Presidente con los mandatarios de las entidades federativas, quienes, a tres años de haberse comprometido, han sido incapaces de depurar sus policías.
“Acaso”, escribió, la Federación “paga así el pecado de origen de haber emprendido su batida contra el narcotráfico y las bandas delictivas como una batida paralela contra poderes locales que no parecían los aliados, sino los adversarios”.
O tal vez, cabe aventurar, ninguno de los gobernadores habidos desde mediados del zedillato se puso las pilas cuando, con visión de futuro, fue creada la Policía Federal Preventiva, simiente de la actual Policía Federal.
Históricamente, las policías locales han sido instituciones vergonzantes, con personal insuficiente y mal preparado; con raquítico equipamiento y salarios deplorables, asumidas con cierto asco y algo así como un “mal necesario”.
No se trata de fabricar salchichas. Formar a los más de… ¡400 mil efectivos! confiables y eficientes que hacen falta era, ni qué dudar, imposible en tres tristes años.

Elba se pinta de rojo Francisco Garfias

No se hagan bolas. El voto de Elba Esther Gordillo está amarrado. La mítica maestra va con Enrique Peña Nieto en el 2012. Lo hemos sostenido durante meses. Es una cuestión de sobrevivencia. El priísta es puntero, por mucho, en las preferencias electorales. Voltear hacia otro lado le resultaría riesgoso.
Las posibilidades de Marcelo Ebrard, su “plan A”, son casi nulas. No las trae consigo, a pesar de que López Obrador le ha dejado cancha libre en estos últimos días. El jefe de gobierno podría quedar muy pronto fuera de la contienda por la candidatura presidencial única de la izquierda. Las encuestas que conocemos no le favorecen. Las que mandaron hacer para decidir quien va (Covarrubias y Nodos) darán sus resultados el 15 de noviembre.
Peor aún. Las cosas no andan bien con Felipe Calderón. Sabemos que el presidente de la República ya reprochó a la sindicalista su cercanía con el ex gobernador mexiquense. Pero ella hace alianzas por sexenio. No se compromete más allá. Y el plazo ya se cumplió.
En Nueva Alianza le quieren “tapar el ojo al macho”. El presidente de ornato que tiene el PANAL; Luis Castro, niega que ya este pactada una alianza con el PRI, a pesar de que Humberto Moreira cantó los “avances” que hay en la negociaciones. Por si quedara duda, la alianza del tricolor con el partido de Elba fue avalada no solo por Peña Nieto, sino por el mismísimo Manlio Fabio Beltrones, otrora su feroz adversario. ¿Aún tiene dudas?
* * *
A Ernesto Cordero le falta un Juan Camilo Mouriño. En su equipo de campaña no hay estratega que juegue un papel preponderante en la toma de decisiones, como en su tiempo lo hizo el fallecido campechano con Felipe Calderón.
Tres hombres mueven el pandero en esa campaña: Rogelio Carvajal, ex secretario general del PAN; Max Cortazar, otrora vocero de la presidencia de la República, y Moisés Calderón, ex diputado federal. Pero hasta ahora no hay grandes resultados.
Cordero no sube en las encuestas ni con todo el aparato de gobierno volcado a su favor. Consulta Mitofsky –la que más alto lo ubica de todas las que se han realizado en vivienda. Lo ubica con un 10 por ciento en las preferencias electorales. Pero hay una que se desfasa: GCE. Le otorga un 19 por ciento, pero es telefónica. Aún en esa, va en tercer lugar: 51 por ciento Josefina, y 21 por ciento Creel.
Por cierto que los corderistas respondieron raudos al apodo de El Chavo del Ocho que el vocero del PRI, David Penchyna le puso al ex secretario de Hacienda porque, según dijo no pasa del ocho por ciento en ninguna encuesta.
“Hay que mandarle (a Penchyna) la encuesta de Gabinete y Comunicación Estratégica. Trae a Ernesto con el 19 por ciento. Ya es el chavo del 19 y se va a convertir en el señor de los cuarentas”, nos dice uno de los panistas que firmaron la carta de apoyo a Ernesto.
* * *
A Santiago Creel, mejor ubicado en las encuestas que el delfin calderonista, le ha hecho daño la percepción de que nada tiene que hacer en la campaña interna del PAN. Su equipo no ha logrado encontrar el antídoto que neutralice la idea de que la final, en el proceso interno, es entre Josefina y Cordero.
El visible apoyo del presidente Calderón al ex secretario de Hacienda y la subida de Vázquez Mota en lo sondeos, alimentan esa percepción.
Pero el panorama para el senador con licencia no es tan malo como se dice. En dos de cuatro encuestas –realizadas por Excélsior, El Universal, Mitofsky e Isa—está a la cabeza. En el promedio de esas cuatro, sin embargo, Josefina esta arriba por cuatro puntos (39-35). “Muy estables las cuatro encuestas con Cordero y Creel, pero la variación sobre Josefina es mucha”, nos comentó Roy Campos, cabeza de Consulta Mitofsky.
* * *
Algunos profesionales de rumor echaron a andar la descabellada versión de que el EZLN está aliado con los Zetas. La versión se apoya en supuestos testimonios de integrantes de la organización cristiana “Ministerios Voz de los Mártires”, que trabajan con los desplazados en ese estado. La versión — ya desmentida– agrega que los zapatistas protegen y guían en la selva del estado a integrantes del violento cartel, a cambio de armas y dinero.
“Son versiones sin sustento, provocadoras. No hay nada que tenga que ver con una alianza de ese tipo. Las comunidades zapatistas están dedicadas a su trabajo en condiciones humildes, pero muy dignas”, nos dijo Jaime Martínez Veloz, representante del gobierno de Chiapas ante la famosa Cocopa.
* * *
Patricia Galeana recibe hoy la medalla al Mérito Ciudadano que otorga la ALDF. La historiadora será premiada “por su decidida participación en la promoción de los derechos humanos”.
Enhorabuena.

Leído en http://www.elarsenal.net/2011/11/03/elba-se-pinta-de-rojo/

Michoacán: la vida o la muerte de Moreira


El próximo domingo 13, en Michoacán, se juega mucho más que la renovación del gobierno estatal de caricatura; más que el cambio de edil en sus violentos 113 municipios y mucho más que el relevo de su debilitado Congreso.
En Michoacán también se ensaya buena parte de la estrategia para la elección presidencial de 2012, sobre todo la polarización político-electoral entre el PAN y el PRI, y su jugada maestra de mandar al tercer lugar al PRD, además de que se practica la impensable tesis de vencer al partido amarillo en su bastión histórico y fundacional. De conseguir ese objetivo,  la estratagema se podría replicar en el Distrito Federal.
Pero, sobre todo, en Michoacán se practica la hipótesis de que la familia Calderón Hinojosa es una marca política ganadora; que contra lo que muchos suponen y otros tantos desean, no todos los electores quieren la muerte política de los Calderón Hinojosa, a pesar de la costosa guerra contra el crimen organizado.
No es novedad que, en Michoacán, el PAN y el presidente Calderón se juegan una carta decisiva para julio de 2012; que la violencia y el crimen se conviertan en el centro de la contienda electoral y que, una vez conseguido ese objetivo y que los azules ganen el gobierno michoacano, los electores premien al gobierno de Calderón en la contienda presidencial.
Por todo lo anterior, para el PAN y su verdadero jefe, Felipe Calderón, la victoria electoral en Michoacán sería lo más parecido a la legitimación del sexenio y de su lucha fundamental: la guerra contra el crimen organizado y las bandas del narcotráfico. Sin embargo, la eventual victoria del PAN y de los Calderón Hinojosa en Michoacán también podría significar la caída del jefe nacional del PRI, Humberto Moreira. ¿A qué nos referimos?
Elemental, que si el PRI pierde Michoacán y al mismo tiempo el PAN se convierte en el gran ganador —lo que cobra carta de naturalización, ya que todos los partidos, incluido el PRD, dan por derrotado a Silvano Aureoles—, asistiríamos a la confirmación de que Humberto Moreira es un lastre para el PRI, no sólo por el escándalo de los cochupos financieros en su gestión como gobernador de Coahuila, sino también en el terreno político-electoral.
Y es que apenas hace dos meses era un hecho que Michoacán sería del PRI, con un candidato ganador como Fausto Vallejo, alcalde de Morelia en cuatro ocasiones. Sin embargo, algo hizo mal o muy mal el PRI de Humberto Moreira para que, en los últimos 30 días, su candidato, Fausto Vallejo, prácticamente se estancara entre las preferencias de los potenciales votantes. ¿Qué pasó? ¿Por qué de manera inexplicable dejó de fluir apoyo y dinero para la campaña de Vallejo?
Y mientras que el PRI no encuentra la “cuadratura del círculo”, la candidata del PAN, Luisa María Calderón, empezó a subir de manera considerable en la preferencia de los electores, al capturar los votos que —al mismo tiempo— empezó a perder el candidato del PRD, Silvano Aureoles, quien sigue a pique.
Todo eso sin contar con la formidable confusión que se ha generado en por lo menos 30 municipios, en donde los candidatos a puestos de elección popular —de los tres partidos— se han retirado, han dejado de hacer campaña o, de plano, aventaron la toalla. ¿La razón? Que las bandas criminales que se adueñaron de buena parte de Michoacán están haciendo su propia elección.
Es decir que, por la vía de la amenaza y el miedo, las bandas criminales han llegado al extremo de quitar candidatos y ordenan el sentido del voto. ¿A favor de qué partido y cuál candidato, en qué municipio, intervienen las bandas criminales? Esa es la gran confusión.
Por lo pronto, tanto el PRI como la dinastía de los Cárdenas —y en general el PRD— hacen todo lo posible por impedir que el candidato Silvano Aureoles pierda más votos. ¿Por qué? Porque los votos que pierde Silvano Aureoles no van al PRI, sino al PAN. Y de continuar esa tendencia en los próximos días, diez —la elección en Michoacán se llevará a cabo el domingo 13 de noviembre—, el golpe de imagen y percepción contra el PRI y el PRD sería demoledor. ¿Por qué?
Porque en la última elección estatal antes de la presidencial, el PAN se alzaría con un triunfo espectacular, para la imagen y la percepción social. Y, claro, una derrota electoral como ésa —además de la persecución judicial por las transas de su gobierno— significaría la muerte política de Humberto Moreira. Al tiempo.
EN EL CAMINO
Casi un mes después, el IFE saca el spot de El Tata a favor de AMLO. Árbitro ejemplar. ¿O no?

Leído en http://www.excelsior.com.mx/index.php?m=nota&id_nota=779583

Moreira, ¿hasta febrero?


El tema de la deuda pública de Coahuila sigue escalando y ya no sólo Javier Villareal, el ex secretario de Finanzas del estado, acusado de haber falsificado (¿a quién se le ocurre?) documentos oficiales para contratar deuda ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, está encausado, sino que se comienzan a sumar otros funcionarios y la PGR acaba de abrir otras dos investigaciones, en buena medida para evitar que el caso sea llevado sólo por la justicia local. Y si bien la PGR no ha llegado a ese nivel, resulta evidente que el objetivo está puesto en Humberto Moreira, el ex gobernador y ahora presidente nacional del PRI.
El propio Moreira ha dicho que el agraviado por los malos manejos de su ex colaborador es él mismo. Puede ser, no vamos a prejuzgar, pero lo cierto es que el tema seguirá creciendo porque no tiene respuesta, y tanto ha crecido que en los hechos prácticamente ha paralizado al presidente nacional del PRI en un momento clave para su intento de consolidar el regreso de ese partido al poder. Moreira llegó al liderazgo priista porque era, en muchos sentidos, el adecuado para el momento y la circunstancia. Tenía el apoyo de Enrique Peña Nieto, había hecho un gobierno en el que prácticamente había desaparecido al PAN del escenario electoral del estado, era un mandatario popular y no tenía detrás una historia que pudiera ocasionarle costos. Paralelamente, era un instrumento más que idóneo para transitar la alianza que la corriente de Peña Nieto quería (y quiere) sacar con Nueva Alianza, el partido de Elba Esther Gordillo. Tan idóneo parecía Moreira para el momento, que incluso un político con tanto peso y experiencia como Emilio Gamboa Patrón decidió dar un paso al costado en la búsqueda de la presidencia nacional del PRI para que se quedara con ella el coahuilense.
Moreira comenzó con mucha fuerza su gestión, pero también exhibiendo una rudeza innecesaria contra sus rivales políticos: para un partido que aspira a regresar al poder y tiene ventaja en las encuestas no creo que hacer bromas con los apellidos de sus rivales, ponerles sobrenombres o minimizarlos sea una buena receta.
El hecho es que, en ese esquema de polarización personal (que el PRI no ha tenido en otros ámbitos y especialmente no lo han mostrado ni Peña Nieto ni Manlio Fabio Beltrones), Moreira salía perdiendo y, cuando se destapó el tema de la deuda de Coahuila, no sólo pasaron varias semanas sin respuesta del ex mandatario, sino que las denuncias continuaron escalando y la imagen que hay es que Moreira se ha quedado solo en la dirigencia priista e incluso se ha convertido en un peso para quien fue su impulsor, Peña Nieto, quien no ha salido ni en una ocasión, pública y abiertamente, en su defensa.
Hace unos días, Moreira dijo algo que no fue bien leído por los medios. Sostuvo que él se queda en la presidencia del PRI, que fue lo que todos destacaron, pero agregó que se queda hasta la designación del candidato priista. Moreira reconoció que, en caso de que el próximo candidato presidencial se lo pida, podría abandonar su cargo como dirigente nacional en febrero de 2012. “Cuando hay candidato, en el partido se toman las decisiones de qué hay que hacer en el Comité Nacional, y esa es mi posición, no es de aferrarme y quedarme hasta 2015”, dijo. Pues esa no era la idea original: cuando llegó Moreira al PRI se quería tener un dirigente de cuatro años, que llevara la elección y se quedara en ese cargo en el primer tramo del gobierno. Cuando se abre públicamente la posibilidad de dejar el puesto en febrero, se quiere decir que las cosas han cambiado y que ya no se tiene la plena certidumbre de que se cuenta con la confianza de quien será el candidato.
Dicen algunos en el PRI que, en ese mes, febrero, en cuanto termine el proceso de selección del candidato priista, estarán dadas las condiciones para que Moreira pueda ser parte de la lista de aspirantes al Senado, al tiempo que la presidencia del PRI podría quedar para un Emilio Gamboa Patrón, que se ha convertido en el principal pivote entre Peña Nieto y Beltrones, o incluso para Manlio, si dan los acuerdos internos para ello (en ese sentido será importante ver qué se resuelve, en los próximos días, en el PRI y en Nueva Alianza, respecto a las coaliciones electorales). Y entonces la gestión de cuatro años de Moreira concluiría exactamente cuando comience la campaña electoral.
Claro, todas son especulaciones pero, en política y en una campaña presidencial, los liderazgos partidarios no pueden ser una carga para un candidato que se siente ganador.

Leído en http://www.excelsior.com.mx/index.php?m=nota&id_nota=779578

Moreira, pero qué necesidad Joaquín López-Dóriga


Los aeropuertos son como los
hospitales: siempre hay gente llorando.
Florestán
El procurador fiscal de la Federación, Javier Laynez Potisek, es considerado como un fiscal de hierro en el monitoreo de las finanzas públicas, lo que le permite ser tan claro y directo como ayer en Radio Fórmula, cuando dio a conocer la existencia de un modus operandi durante el gobierno de Humberto Moreira, en Coahuila (2006-10), para hacerse de garantías federales en la obtención de créditos bancarios por 5 mil 300 millones de pesos a cargo de sus participaciones federales, pero con documentación apócrifa.
El procedimiento era escandalosamente sencillo: falsificar decretos del Congreso local para presentarlos a Hacienda como autorización de endeudamiento.
En el primer caso se falseó un decreto para designar al contralor del Instituto Estatal Electoral por una autorización para un crédito de mil mdp con el Banbajío. El segundo fue para dos créditos: uno por mil 100 millones y otro por mil millones, ambos con Santander. El tercero fue una falsificación para otros dos créditos de Bancomer, por mil 650 millones de pesos, uno, y por 550 millones, el otro, lo que da los 5 mil 300 mdp.
Del crédito por mil 650 millones de pesos de Bancomer, firmado a siete meses, se presentó a Hacienda una copia falsa con un plazo de 15 años.
De estos cinco créditos, cuatro fueron en tiempo de Moreira y uno en el de su sucesor, Jorge Torres López, todos llevados a cabo por su operador, Javier Villarreal, sujeto a proceso en Coahuila y bajo investigación de la PGR que podría atraer el caso.
Lo que me pregunto es, si Moreira tenía mayoría en el Congreso y las partidas federales autorizadas, ¿para qué falsificar esas autorizaciones?
Es una pregunta que no ha tenido respuesta, y que tiene un motivo aún por descubrir.
En todo esto falta una explicación seria, documentada, de Humberto Moreira, no un exabrupto o una ocurrencia.
Retales
1. PLAZOS. El día 17 vence el plazo para que los partidos registren sus alianzas. Sólo están definidas la del PRI-Verde y la del PT-Convergencia, quedando pendiente la del PRD, si va con Andrés Manuel López Obrador. El PAN irá solo;
2. CONSEJEROS. No hay modo de cumplir el mandato constitucional de contar con los nueve consejeros del IFE, pendiente desde hace más de un año en la Cámara de Diputados. Ayer se perdió lo que pudo haber sido la última oportunidad, cuando cinco magistrados del Tribunal Electoral batearon una propuesta que emplazaba a los diputados a designarlos, y
3. SALUD. Preocupación por el estado de salud de Alonso Lujambio. Afectado por una insuficiencia renal severa, lleva diez días en el hospital, donde permanecerá. Que se recupere pronto. Menos mal que ya se había bajado de la lucha por la candidatura presidencial del PAN.
Nos vemos mañana, pero en privado.

Detenidos y reclusos Héctor Aguilar Camín


Hace una semana pregunté aquí dónde estaban los más de 94 mil detenidos en los años de gobierno del presidente Calderón, cuando, cotejados con las cifras de su 5 Informe de gobierno, había sólo un aumento de 14 mil presos en las cárceles.
Ayudado por precisiones que hizo Otto Granados, dije que había tres explicaciones posibles de la discrepancia de las cifras. O los números estaban mal, o no se incluían en las cifras los presos federales que están en prisiones estatales o los detenidos habían sido liberados antes de entrar a prisión.
Leo en el diario Crónica una explicación del abogado Humberto Castillejos, planteando una “cuarta opción”, que es la siguiente:
Se reporta como “detenidos por delitos contra la salud” a todos los relacionados con posesión de narcóticos, incluso los que los llevan para su estricto consumo personal, lo cual está permitido por la ley.
Los así detenidos son puestos en libertad más o menos automáticamente, decisión legalmente incuestionable que, sin embargo, en la estadística así pasa a los informes oficiales, los cuales se esgrimen luego como indicadores de eficacia en la aplicación de la ley.
En un “gran número”, escribe el abogado Castillejos, los detenidos son sólo adictos o narcomenudistasacusados mal, poco sólidamente, por quienes los detienen. En el mismo anexo correspondiente del 5 Informe presidencial, dice Castillejos, está la respuesta:
“Estos datos”, dice el anexo, “difieren de los consignados en el concepto de Detenidos del cuadro Esfuerzo Nacional en la Lucha contra el Narcotráfico, debido a que en la mayor parte de las legislaciones de los estados y municipios, los detenidos por narcomenudeo se consideran básicamente adictos, pero no narcotraficantes”.
Precisa el abogado Castillejos que “quien redactó el pie de página desconoce el derecho mexicano porque los delitos contra la salud están en leyes federales y no ‘estatales o municipales’”.
La pregunta entonces, termina Castillejos, es qué estamos haciendo con los liberados que son adictos o que poseen drogas con fines de consumo.
No hay respuesta para eso, al parecer, pero al menos queda aclarado el enigma de los muchos detenidos y los pocos presos. La otra pregunta es quiénes están presos. Entiendo que un alto porcentaje es de gente que está sujeta a proceso, es decir, no sentenciada, no declarada culpable todavía, pero ya purgando la pena