miércoles, 28 de noviembre de 2012

Eutanasia : Legalizarla en NL ? Parte III. Cuestionario.

Por Juan José Contreras Flores.



Al diseñar la primera encuesta tenia los siguientes planteamientos:

  • La primera pregunta es la base de todo este trabajo, ya que pregunta por la postura del encuestado acerca del tema;
  • la segunda pregunta nos sirve para conocer el motivo de la respuesta anterior y se tabulara de acuerdo a las respuestas más comunes, igualmente las preguntas 4 y 5;
  • la tercera sirve para saber si el entrevistado ha tenido alguna experiencia con padecimientos graves, coma o enfermedades terminales; Estas  encuestas son las más importantes, por la obvia razón de que nadie conoce mejor este padecimiento más que los han sufrido.
  • lo que la cuarta pregunta confirma que tan seguro esta el entrevistado sobre su posición en este tema, o bajo qué circunstancias cambiaria de opinión;
  • la quinta pregunta, tiene como fin, enriquecer el proyecto de ley;
  •  los datos del entrevistado ayudaran a clasificar a la población que participó en la encuesta.

Eutanasia : Legalizarla en NL ? Parte IV, Recomendaciones.

Por Jose Juan Contreras Flores.

Recomendaciones:
  • Usar otra definición más completa y fácil de entender. Se va a definir como: “Cualquier acción u omisión del médico que accede a terminar con la vida de un paciente en estado terminal, coma, o lisiado permanentemente para acortar su sufrimiento físico y/o emocional; bajo cualquier forma de petición de él o de una persona de su confianza”.
  • Explicar al encuestado cual es la eutanasia activa y preguntarle su postura al respecto, y hacer igualmente con la eutanasia pasiva.
  • Preguntar por separado 3 cosas: 1) ¿Quién es el paciente? El entrevistado, o el ser querido del entrevistado, o ambos; 2) una vez identificado el afectado hay que saber si estuvo alguna vez en coma y por cuánto tiempo; y 3) preguntar si hay o hubo enfermos terminales, de ser así, ¿Qué enfermedad padece o padeció?
  • Se puede hacer una lista de casos aplicables al tema, y que el entrevistado marque en qué casos está de acuerdo o en contra con la aplicación de la eutanasia.
  • Incluir instrucciones sobre la forma de contestar las preguntas.

Sergio Aguayo - ¿Quién es EPN?


Para entender a Enrique Peña Nieto hay que recordar al Grupo Sonora y al Grupo Atlacomulco.

Mi hilo conductor es la forma como Peña Nieto conceptualiza el poder. Su tesis para obtener el grado de licenciado en derecho, El presidencialismo mexicano y Álvaro Obregón (1991), ofrece claves útiles. En México, dice, "el presidente [...] es pilar del sistema político". Esa descripción la transforma en prescripción cuando expresa, una y otra vez, su profunda admiración por Álvaro Obregón a quien concede el mérito de ser el "gestor del presidencialismo moderno", de ser uno de los "estadistas más audaces e inteligentes" y de quien admira la eficacia: "Su solo nombre -concluye EPN- es garantía de [...] éxito". Entonces resulta lógico que EPN tenga tanta admiración por Carlos Salinas de Gortari, otro Presidente exitoso en su momento.




Ricardo Alemán - Un aplauso

Si bien apenas se encuentra en etapa de buenas intenciones –porque las pláticas para un gran acuerdo nacional apenas empiezan--, ya es digna de un sonoro aplauso la posibilidad de que las tres fuerzas políticas más relevantes del país –PRI, PAN y PRD--, pacten, acuerden y negocien lo necesario, a favor de los mandantes, de sus patrones, que son –somos--, los ciudadanos.

Y es que precisamente esa, la de negociar, pactar, acordar, convenir y ver por el bien de las mayorías, es la diferencia entre una clase política de buenos para nada –como han sido la mayoría de los políticos en la última década--, y una clase política eficaz, de profesionales capaces de empujar las grandes transformaciones y que se asuman como parte del Estado mexicano, antes que pertenecer a las groseras mafias de las tribus, los partidistas y los caudillos que vemos todos los días.

Y parece que luego de 12 años de divorcio entre los partidos y la política, luego de años de odio y fractura irracional entre el bien común y la política, existen nuevas condiciones para utilizar las armas de la política en la lucha contra los grandes problemas nacionales. Y las armas son todas esas, el diálogo, la negociación, el acuerdo, el consenso, el pacto, entre todas o las más importantes fuerzas políticas, para empujar al país fuera del alcance de los grandes flagelos.


Raymundo Riva Palacio - Amores perros


Emilio Chuayffet a la Secretaría de Educación? ¿De verdad? Chuayffet tiene una característica, la de unir enemigos que son mutuamente enemigos. Si Enrique Peña Nieto lo confirma como su próximo secretario de Educación, allanará el camino para una colisión frontal con el líder del PRI en la Cámara de Diputados, Manlio Fabio Beltrones, con quien tiene un diferendo desde hace más de una década, revivido en los dos últimos años, al ser un ariete en contra de sus aspiraciones presidenciales. Pero sobretodo, su nombramiento sería una declaratoria de guerra en contra de Elba Esther Gordillo.

Gordillo y Chuayffet tiene un pleito irreversible desde 2003, cuando la maestra, en ese entonces líder de la bancada del PRI en San Lázaro, animada por el ex presidente Carlos Salinas, acordó con el presidente Vicente Fox un incremento al IVA. El apoyo a Fox se acordó en la casa de Salinas, junto con el presidente del PRI, Roberto Madrazo, quien tan pronto terminó la reunión, comenzó a sabotear la alianza.


Salvador García Soto - ¿Otra mujer a la SEP?


La designación del secretario de Educación Pública es el único nombramiento del gabinete de Enrique Peña Nieto que se está complicando y en el que el presidente electo terminará negociando su decisión en busca del aval del SNTE y de su dirigente Elba Esther Gordillo. El nombre de Emilio Chuayffet, enviado como una especie de escrutinio, no transitó con el poderoso sindicato y ahora se barajan nuevos nombres para esa posición estratégica en el próximo gabinete presidencial.

Entre los nombres que el presidente electo podría negociar en las próximas horas con la dirigencia magisterial está el de una mujer, Yoloxóchitl Bustamante Díez, la actual directora del Instituto Politécnico Nacional y quien tiene toda la experiencia docente, fue subsecretaria de Educación y ha ocupado diversos cargos en el área educativa, además de su posición actual. Su nombre se escucha en el equipo de transición como una de las sorpresas que podrían tomar forma este 1 de diciembre, si es que Elba Esther Gordillo y el SNTE le dan el visto bueno.


Jorge Zepeda Patterson - Lo que usted no verá con Peña Nieto

No sé ustedes, pero yo ya terminé con este sexenio. Y me doy de santos que el sexenio no haya terminado conmigo (aunque sí lo hizo con más de 70 mil mexicanos). 

Tendría que haber hecho un balance del sexenio de Felipe Calderón, como oportunamente lo están haciendo la mayoría de mis colegas, pero francamente, qué flojera. Tras varios centenares de textos dedicados a su presidencia estos seis años, mis neuronas se niegan escribir una más. La mediocridad de su equipo y la mezquindad del personaje no son precisamente fuente de inspiración, ni siquiera para ser denostados. 

Mientras seguimos en espera de conocer el gabinete con el que se estrenará Peña Nieto, primer indicador real de lo que podríamos esperar de su sexenio, me permito adelantar algunas de las situaciones que seguramente no veremos en la próxima administración. A falta de mayor información sobre lo que se nos viene, podríamos comenzar a descartar lo que no se nos viene. 




Santiago Dabove - Ser polvo

Santiago Dabove
1889 - 1951

Ser polvo

¡Inexorable severidad de las circunstancias! Los médicos que me atendían tuvieron que darme, a mis pedidos insistentes, a mis ruegos desesperados, varias inyecciones de morfina y otras sustancias para poner como un guante suave a la garra con que habitualmente me torturaba la implacable enfermedad: una atroz neuralgia del trigémino.

Yo, por mi parte, tomaba más venenos que Mitrídates. El caso era poner una sordina a esa especie de pila voltaica o bobina que atormentaba mi trigémino con su corriente de viva pulsación dolorosa. Pero nunca se diga: he agotado el padecimiento, este dolor no puede ser superado. Pues siempre habrá más sufrimiento, más dolor, más lágrimas que tragar. Y no se vea en las quejas y expresión de amargura presentes otra cosa que una de las variaciones sobre este texto único de terrible dureza: "¡no hay esperanza para el corazón del hombre!". Me despedí de los médicos y llevaba la jeringa para inyecciones hipodérmicas, las píldoras de opio y todo el arsenal de mi farmacopea habitual.