miércoles, 11 de marzo de 2015

Cartones de hoy y siempre...




Carlos Loret de Mola - "Aquí no pasa naaada”

Reunión del gabinete de Seguridad del presidente Peña Nieto. Uno de los presentes imita el agudo tono de voz del gobernador de Veracruz. Todos se carcajean.

No es sólo mofa. La crítica es de fondo: caricaturizan que cada vez que se comunican con el priista Javier Duarte para preguntarle sobre un hecho delictivo, la respuesta es la misma: “aquí no pasa naaada”.

El problema es que sí pasa. Y lo saben en las más altas esferas del poder en México:

Es el cuarto estado más violento del país, el sexto con más secuestros y encabeza la lista de entidades donde más matan periodistas. Son datos oficiales. Se siguen registrando balaceras, secuestros y cobros de derecho de piso. No pocos afectados han optado por irse a vivir a Puebla, Mérida o de plano Estados Unidos, claro, cuando tienen recursos para mudarse.






Salvador García Soto - El precio de la toga de Medina

Qué tanto le costó al PRI la complicada aprobación de Eduardo Medina Mora como ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación? Todo indica que mucho. Entre las condiciones que pidieron los panistas y que aceptaron el PRI y el gobierno de Peña Nieto estarían la impunidad para el gobernador de Sonora, Guillermo Padrés, acusado de corrupción, y el triunfo del PAN en los comicios por la gubernatura sonorense de junio próximo.

La versión sale directa del Senado y la confirman senadores tanto del PRI como del PAN que pidieron el anonimato: que en las intensas negociaciones políticas que se llevaron a cabo entre las dos bancadas para sacar la polémica aprobación de Medina Mora, el tema de Sonora salió a relucir, justo cuando el día que el diario ‘The Wall Street Journal’ divulgó una nota de su corresponsal en México, José Córdoba, en la que afirmaba que “el gobierno mexicano abrió una investigación” contra el gobernador Padrés y su hermano Miguel Padrés “por supuestamente recibir millones de dólares de un empresario ligado a compañías que ganaron contratos del gobierno”, según documentos revisados por el diario.





Raymundo Riva Palacio - El ministro del presidente

El voto del Senado para designar al ministro de la Suprema Corte que llenará la silla dejada por Sergio Valls al morir en diciembre, era totalmente irrelevante en el caso de Eduardo Medina Mora. Si lo elegían o no, quedaría lastimado irreversiblemente porque el cuestionamiento sobre sus méritos para llegar al máximo tribunal mexicano, fue masivo, intenso y demoledor. No se puede hablar de una campaña en su contra, porque sugeriría una conspiración, por lo demás, inexistente. Se debe entender como un repudio generalizado por su pasado en órganos de inteligencia, seguridad y procuración de justicia, y por la forma como, por una decisión del presidente Enrique Peña Nieto, su nombre fue incorporado a una terna para la Corte acompañado de nominados de bajo perfil. La designación a modo, tuvo sus consecuencias.

Medina Mora pensaba en la Suprema Corte de Justicia para dentro de tres años, como epílogo de su vida pública, no ahora. Pero el presidente lo llamó y le dijo que lo iba a nominar. El embajador en Washington tenía, además de su proyecto profesional, una razón personal para no aceptar. En diciembre le detectaron un cáncer muy agresivo a su esposa y en febrero comenzó el tratamiento en una de las dos mejores instituciones en el mundo para atenderlo. La silla de Valls estaba fuera de su imaginario. Intentó decirle no al presidente, pero lo ignoró. Peña Nieto tenía otras posibilidades, como Raúl Cervantes, que pidió licencia en el Senado para prepararse para la Corte, pero mantuvo su plan de presentarlo en diciembre próximo, cuando otros dos lugares quedarán vacantes.




Ciro Gómez Leyva - Con todo respeto para Ricardo Alemán, no fue cosas de amigos

Ayer tuve el privilegio de dialogar en público con mi compañero de páginas Ricardo Alemán. Hablamos de la eventual llegada de Eduardo Medina Mora a la Suprema Corte de Justicia.

Tal como escribió el lunes, Ricardo criticó que el presidente Peña Nieto incluyera en la terna al embajador de México en Estados Unidos y exprocurador general de la República. Su argumento es, a grandes rasgos, que el Presidente estaba promoviendo a un amigo.

Y que eso era una falta de recato y pudor, independientemente de la legalidad y el desenlace que tuviera la promoción de Medina Mora (que, como se propuso aquí el lunes, prosperó con el respaldo del PAN: 83 votos contra 35).






Antonio Tabucchi - Sueño del doctor Sigmund Freud, intérprete de los sueños ajenos

Antonio Tabucchi  (1943 - 2012)
  
Sueño del doctor Sigmund Freud, intérprete de los sueños ajenos

La noche del veintidós de septiembre de 1939, el día antes de morir, el doctor Sigmund Freud, intérprete de los sueños ajenos, tuvo un sueño.

Soñó que se había convertido en Dora y que estaba cruzando una Viena bombardeada. La ciudad estaba destruida, y de las ruinas de los edificios se alzaba una nube de polvo y de humo.

¿Cómo es posible que esta ciudad haya sido destruida?, se preguntaba el doctor Freud, e intentaba sujetarse los senos, que eran postizos. Pero en aquel momento se cruzó, en la Rathausstrasse, con Frau Marta, que avanzaba con el Neue Frei Presse abierto ante sí. Oh, querida Dora, dijo Frau Marta, acabo de leer precisamente ahora que el doctor Freud ha vuelto a Viena desde París y vive justo aquí, en el número siete de la Rathausstrasse, quizá le sentaría bien que lo visitara. Y mientras lo decía, apartó con el pie el cadáver de un soldado.

El doctor Freud sintió una gran vergüenza y se bajó el velo del sombrero. No sé por qué, dijo tímidamente.

Porque tiene usted muchos problemas, querida Dora, dijo Frau Marta, tiene usted muchos problemas, como todos nosotros, necesita confiarse a alguien, y, créame, nadie mejor que el doctor Freud para las confidencias, él lo comprende todo acerca de las mujeres, a veces parece incluso una mujer, de tanto como se ensimisma en su papel.