lunes, 27 de febrero de 2012

La economía mexicana crecerá a dos velocidades en el 2012

7 Febrero, 2012 - 20:18 Credito: Edgar Huérfano y Miguel Ángel Bravo / El Economista

La economía mexicana registrará un crecimiento a dos velocidades durante el 2012, siendo la primera mitad del año la más dinámica, apoyada por el incremento de la demanda interna, consideró el banco HSBC en México.

“Consideramos que la demanda interna mantendrá el dinamismo, con la ayuda del gasto relacionado con las elecciones presidenciales. Sin embargo, esperamos que el crecimiento sea moderado la segunda mitad del 2012”, aseguró Sergio Martín, economista en jefe de HSBC México en un análisis.

El especialista consideró que dentro de los factores que compensarán una menor demanda externa para este año se encuentra un tipo de cambio más débil, lo que mantendrá la competitividad de las exportaciones.

También una mayor participación del mercado importador de Estados Unidos y la diversificación de las exportaciones cada vez más fuerte hacia Latinoamérica, indicó el banco.
El banco inglés estimó que las exportaciones mexicanas continúen creciendo, ya que la expectativa de crecimiento de 3.3% para el sector industrial de Estados Unidos representa una base estable para las exportaciones mexicanas.

HSBC pronosticó que el PIB de México crecerá 3.4% en el 2012 y 3% el siguiente año, con un tipo de cambio al finalizar el 2012 de 13.2 pesos por dólar, mientras que la inflación será de 3.9 por ciento.

Además, HSBC previó un mayor crecimiento económico, una mayor inflación y la moneda mexicana se depreciará durante el primer semestre del 2012; sin embargo, para la segunda mitad del año este comportamiento sería opuesto al semestre previo.

LA FED ESTIMULÓ EL RIESGO
Asimismo, mencionó que a raíz del anuncio de la política monetaria para el 2014 por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos se provocó un incremento en el apetito por el riesgo; sin embargo, ahora el riesgo está en que Banxico extienda la pausa monetaria.
Además, en el documento, HSBC detalló que su postura referente a la política monetaria se mantiene estable para el 2012, destacando que el deterioro de las perspectivas inflacionarias continuarán mientras las condiciones en el entorno mundial sean desfavorables.
Refiriendo que la postura se debe al contexto de escenarios dispares en el año.
valores@eleconomista.com.mx

Leido en http://eleconomista.com.mx/finanzas-publicas/2012/02/07/economia-mexicana-crecera-dos-velocidades-2012

CON DEL REAL, MEDINA LES TAPÓ LA BOCA.

por: Carlos Marín.

Sin disminuir la trascendencia que, para mal, han tenido los desatinos del gobernador de Nuevo León en el nombramiento de secretarios de Seguridad Pública, sorprende el reincidente activismo político de una facción del empresariado neoleonés.
Por lo visto, ajeno al insolente “ultimátum” que una parte de su gremio dio a Rodrigo Medina tras la fuga de 29 y asesinato de 44 en el penal de Apodaca, Lorenzo Zambrano reprochó, sí, la “mediocridad” en el área de seguridad estatal pero, al preguntársele si también consideraba que el mandatario debía irse a su casa, el presidente y director de Cemex cortó de manera tajante: “Ya dije lo que pensaba…”.
A diferencia de sus coleguitas locales del Consejo Cívico de Instituciones, la Cámara de la Industria de la Transformación y la Confederación Patronal que, a través de Eugenio Clariond Rangel, advirtieron que le hacían “la última llamada al gobierno del estado…”, Zambrano más bien reconoció los esfuerzos realizados:
“Hemos avanzado en algunas partes; hay otras como la que acabamos de ver, que muestran que tenemos mucho que hacer todavía. Mientras no haya personas claramente capaces y responsables de las áreas de seguridad en Nuevo León, no vamos a avanzar con la rapidez que debiéramos. Hay áreas que han ido bien, como es la creación de la nueva Fuerza Civil, y otras que están avanzando razonablemente, pero yo diría que falta muchísimo en la capacidad de que haya consecuencias inmediatas a fallas, diría fallas menores; fallas que no se manifiestan con la brutalidad como se manifestó lo del Cereso” (la cárcel de Apodaca), declaró.
El prominente empresario ha de saber muy bien de lo que habla. No de otra manera se explica que, responsable y generosamente, haya privado en dos ocasiones a su corporativo de los servicios (en México y el mundo) del ingeniero Jorge Tello Peón, el irreprochable ex director general del Centro de Investigación y Seguridad Nacional, para permitirle incorporarse como secretario ejecutivo del Consejo Nacional de Seguridad Pública, y después, hasta la fecha, como asesor del gobernador en tan especializada materia.
La inquina del grupo empresarial que promueve la salida de Medina delata la cachaza con que sus voceros difunden, inclusive, imágenes de narcopancartas aparecidas en vialidades de Monterrey donde se afirma que el gobernador “obedece” a jefes de organizaciones criminales, en pago porque dizque le financiaron su campaña.
Son los mismos que soñaban con que el ex secretario de Gobierno de José Natividad González Parás, Rogelio Cerda, fuera gobernador, pero que cayó tanto por la descomposición del estado, como por una investigación ministerial sobre sus hermanos por supuestas implicaciones en el negocio de casinos.
El nombramiento como nuevo secretario de Seguridad Pública del divisionario Javier del Real Magallanes, ex comandante de la Cuarta Región Militar (que comprende otras entidades, pero tiene su sede en Nuevo León) y ex subsecretario de la SSP de Genaro García Luna, moja la pólvora de la “última llamada” de los golpistasregios.
cmarin@milenio.com




NADIE ESTÁ PIDIENDO UN CALDERÓN CASTRADO.

por Ciro Gómez Leyva.


El presidente Calderón tuvo la oportunidad de corregir rápidamente sus excesos en el foro de consejeros de Banamex y, al menos de palabra, lo hizo.
El jueves, protagonizó el escándalo de la encuesta que ponía a Josefina Vázquez Mota en un virtual empate técnico con Enrique Peña Nieto. El viernes, se sirvió del discurso del Día de la Bandera para afirmar que entendía la “sensibilidad política de los participantes” y que, en adelante, haría lo necesario para “despejar cualquier suspicacia y evitar expresiones o acciones que puedan generar recelo o desconfianza entre los ciudadanos y los actores políticos”
Se comprometió, asimismo, a “actuar como demócrata”. Sin embargo, dejó abierta una especie de salida de emergencia al advertir que, aunque lo hará con especial cuidado y responsabilidad, no claudicará de sus “propias ideas y convicciones”.
Ojalá no reprima sus ideas y convicciones. Creo que nadie está pidiendo un Presidente castrado, sino uno que evite reproducir los abusos de Vicente Fox en la elección de 2006. Uno que se parezca menos a Fox y más a Ernesto Zedillo.
Y eso obliga a no expresar de aquí a julio frases sobre el riesgo de que regresen los “malos gobiernos del pasado”. A demandar un rigor de 100 en las eventuales averiguaciones judiciales a funcionarios y ex funcionarios del PRI y el PRD. A no voltear a ver a Josefina. A dejar de repartir dinero a manos llenas a los pobres en actos oficiales.
A conducirse, en fin, con el pudor de un jefe de Estado en una competencia que no es la suya. Con la grandeza de quien vivió el reciente capítulo de divisiones y odios y puede hacer mucho para que no se reedite.
No es mucho pedir.

PREMIO DE CONSOLACIÓN.



Desplazados de la candidatura presidencial los calderonistas del circulo más cercano del presidente se refugiaron en las listas del Senado y acapararon para ellos los lugares más seguros para garantizar un lugar en la Cámara alta. Comenzando por Ernesto Cordero, que canjeó lealtad y sumisión ante el triunfo de Vázquez Mota por el codiciado primer lugar de la lista plurinominal, siguiendo con la hermana presidencial, Luisa María Calderón que asegura fuero y con el secretario de Educación Alonso Lujambio.


De hecho, un vistazo a las listas del PAN no sólo deja en claro la predominancia del grupo de Calderón en las candidaturas al Senado, sino que muestra también que el partido gobernante está mandando a sus cuadros más fuertes y más experimentados a asegurar un escaño o una curul en el Congreso, en un intento de preparar bancadas de muy alto perfil, fuertes ante un escenario posible: que vuelvan a ser oposición en 2012.

Esa es la lógica que se asoma detrás de las listas panistas al Congreso donde figuran lo mismo ex secretarios de Estado que ex gobernadores, congresistas experimentados y, ante todo, políticos cercanos al presidente Felipe Calderón. Buena parte de la fuerza panista y de los activos mas importantes del partido estarían buscando refugio las Cámaras federales en lo que parece más una bancada que se prepara mas para ser oposición que para ser gobierno.

Las listas recién dadas a conocer traerán reacomodos. Por ejemplo, en la SEP se habla ya de la salida de Alonso Lujambio, convaleciente aún de su problema de insuficiencia renal y cáncer, y para sustituirlo se menciona a otro incondicional de Calderón: Rogelio Carvajal Tejada, quien fuera coordinador de la campaña de Ernesto Cordero y según se menciona futuro titular de la Secretaría de Educación. La pregunta es qué experiencia tiene en educación este joven abogado de 37 años, egresado de la Universidad Iberoamericana.

Otra cosa que llamó la atención en las listas del PAN fueron los espacios reservados por el CEN a figuras especiales, otra vez ligadas al calderonismo, y que fueron enviados como candidatos al Senado por estados que ni siquiera conocen. Es el caso de César Nava que será candidato a senador por Tabasco y recientemente en una conferencia, en un restaurante que está a orillas del Río Grijalva, y un reportero le preguntó si conocía el nombre del río sobre el que estaban, a lo que Nava no supo responder.

Aunque se entiende que se trata de candidaturas designadas por el CEN, la práctica de enviar como candidatos a políticos ajenos totalmente a los estados que representarán tiene un inevitable tufo de la era priista cuando las cuotas y las candidaturas se repartían desde el centro sin importar la oriundez o el arraigo de los candidatos en los estados. Hasta ahora las militancias estatales del PAN no han chistado por esas imposiciones.

NOTAS INDISCRETAS… El aniversario 83 del PRI se celebrará el próximo domingo con bombo y platillo, no sólo porque los priistas estén muy contentos por el cumpleaños de su octogenario instituto, sino porque en los tiempos de veda, el evento será aprovechando para que e luzca la figura de Enrique Peña Nieto que con un discurso cuidado y revisado por expertos electorales, para no violentar las limitantes del IFE, y fieles al estilo tricolor llenarán la explanada priista para enseñar el músculo… La semana empieza con una Escalera. Buen signo de los dados.

sgarciasoto@hotmail.com | @sgarciasoto



2012: BATALLA DE PERCEPCIONES.

Común en la cultura política mexicana, la forma oculta el fondo. Por eso, los amagos jurídicos contra el presidente Felipe Calderón por decir en una reunión privada que la contienda presidencial será reñida, olvidaron la semilla que deliberada o inopinadamente sembró: que la ventaja de Enrique Peña Nieto sobre Josefina Vázquez Mota es de sólo cuatro puntos. A golpe dado, ya se verá en las próximas semanas si la idea prende en la opinión pública, y empieza a cambiar la percepción de que la panista se encuentra muy por debajo del priista en la preferencia electoral.

El Presidente se basó en la encuesta de Mercaei, de Lauro Mercado, quien ha sido proveedor del PAN y de los gobiernos panistas en la última década, y que habían sido revelados dos semanas antes por el líder del partido, Gustavo Madero, sin que despertara mayor interés. La estrategia es cristalina: Vázquez Mota tiene que arrancar la campaña a finales de marzo con un imaginario colectivo diferente y en una posición de mayor fuerza ante Peña Nieto. Si es real o no, es secundario; la clave es la percepción.

La fórmula no es sólo panista. Días antes del polémico dicho presidencial, el equipo de propaganda de Andrés Manuel López Obrador dio a conocer la encuesta de Covarrubias y Asociados, que lleva más de seis años de colaborar con el tabasqueño y la izquierda, donde aseguraban que iba por delante de Vázquez Mota por casi tres puntos. Ambas encuestas podrían ser consideradas como orgánicas al responder a los intereses de sus clientes, por lo que no son químicamente puras al existir un probable sesgo en los cuestionarios, orden de las preguntas, reactivos y filtros.

Paradójicamente, como se vio notablemente en el caso de la crítica al Presidente, el manejo propagandístico de los datos no es lo que está sujeto a cuestionamiento. Los opositores atacan al mensajero no al mensaje. No es que el mensajero sea irrelevante -particularmente en el caso del Presidente, por el peso de su palabra-, sino que al enfrentar al primero y soslayar el mensaje, se permite que la propaganda tome carta de identidad, pase a ser considerada como información por el elector, y juegue comocontrapeso a los resultados de las encuestas de las empresas desvinculadas de las nóminas de los partidos. O sea, el proceso se tergiversa por los partidos, los candidatos, y los actores políticos y medios, al aceptar estos últimos nuevas reglas del juego.

Dicho de otra manera, si se quisiera ver cuál es exactamente la fotografía actual de los candidatos presidenciales, las encuestas de febrero de Mercaei y Covarrubias, por extremas, tendrían que ser eliminadas estadísticamente para hacer un promedio, porque al estar fuera de rango distorsionan el resultado. No quiere decir que esos datos no puedan darse en el futuro; sólo significa que, en el ponderado de las demás encuestas, ni Vázquez Mota está a cuatro puntos de Peña Nieto, ni López Obrador por encima de ella.

Si se toman las encuestas con preferencias efectivas de tres casas encuestadoras que no se realizaron para ningún partido, el dato es muy distinto: GEA-Issa, en su última encuesta de enero, le dio 52 puntos a Peña Nieto, 27 a Vázquez Mota y 21 a López Obrador. Consulta Mitofsky, en febrero, registró respectivamente 49, 30 y 21%, mientras que Parametría, también en febrero, dio 49, 27 y 22%. ¿De dónde sacaron entonces Mercaei y Covarrubias sus datos? O más claro, ¿por qué panistas y lópezobradoristas los dieron a conocer?

Son estrategias claras de campaña electoral. Lo negarán y refutarán la afirmación, pero en ambos casos necesitan cambiar la percepción de que Peña Nieto es inalcanzable. López Obrador no puede atacar al priista, y tendrá que ir primero contra Vázquez Mota para posicionarse en un segundo lugar. Vázquez Mota ignora a López Obrador, porque su preocupación es Peña Nieto. Los priistas no parecen entender muy bien de que se trata este juego, pues sus primeras defensas fueron muy débiles. Ya empezaron losrounds serán de sombra, pero los golpes, como está visto, son de verdad.

raymundo.rivapalacio@24-horas.mx | @rivapa





METIÓ LA PATA Y... ¿SACÓ LA PATA?.




-El crimen le apuesta a la ingobernabilidad en Nuevo León.
El PRI abandona Guanajuato; parece que ya lo dejó perder.

Ricardo Alemán.
Algunos especialistas en temas electorales sostienen que ya no importa saber si fue deliberado, o no, el acto proselitista —o campaña adelantada—, que Felipe Calderón llevó a cabo en favor de Josefina Vázquez Mota —el pasado jueves—, ante consejeros de una institución bancaria.
El argumento que esgrimen es que, horas después de la “metida de pata” del Presidente, el propio Felipe Calderón corrigió y prometió que —ahora sí—, ya no metería ni “la pata” ni “la nariz” y que tampoco habría “mano negra” en el proceso electoral federal en el que los ciudadanos elegirán al sucesor o sucesora de Calderón.
Sin embargo, vale recordar que la intromisión de la figura presidencial —con todo lo que significa y representa—, en la contienda por la sucesión, está muy lejos de ser un mero acto de fe.
Y si se quiere, está en dirección contraria a la confianza ciega y/o sorda que pudieran tener los ciudadanos y potenciales electores, en la palabra del presidente Calderón.
Lo cierto es que el tema de fondo se localiza en la obligación que tienen todos los ciudadanos —desde el Presidente, hasta el más humilde mexicano—, con el cumplimiento de la ley.
Y es que, por mandato de ley, el presidente de todos los mexicanos, el jefe de las instituciones, el primer mandatario —o como se le quiera llamar—, no puede meter ni la punta de un dedo en la elección de su sucesor.
Más aún, en su calidad de primer mandatario de los mexicanos —porque vale recordar que los mandantes son los ciudadanos y que, por eso, el Presidente es el depositario del mandato general—, Felipe Calderóntiene una responsabilidad política y ética fundamentales con la credibilidad, confianza, imparcialidad, equidad y legalidad del proceso electoral.
Y es que una de las responsabilidades primeras —y fundamentales—, de todo Presidente mexicano, es la de “respetar y hacer valer” los principios de la Constitución; doctrina que norma al Estado mexicano.
Pero además, Felipe Caderón tiene una responsabilidad que vincula la historia de su partido con la democracia mexicana.
Y es que a lo largo del último medio siglo, el PAN denunció prácticas antidemocráticas en el PRI y reclamó mínimos de congruencia democrática a los gobiernos de ese partido, sobre todo en los procesos electorales.
Además, el PAN siempre denunció la grosera intromisión de los presidentes priistas en turno, en las elecciones presidenciales.
Por eso, hoy Acción Nacional y su segundo presidente —o acaso el primero, luego del asalto al PAN que significó el mandato de Vicente Fox—, no pueden aparecer, alegremente, como copias vulgares del PRI al que siempre cuestionaron.
Pero acaso por esa razón, porque entendió el amaño del error,Calderón reculó horas después y —en una suerte de mea culpa—, se comprometió con la legalidad, transparencia, equidad, certeza y credibilidad de la elección presidencial. Pero obliga la pregunta. ¿Podemos creer en la palabra del presidente Calderón?
¿Desliz o trampa?
Lo primero que se debe analizar sobre el “oso” de Calderón en torno al proceso electoral, es que son muchas las evidencias de que no fue un desliz, como han sugerido especialistas, sino que se trató del eslabón de toda una estrategia integral diseñada por la casa presidencial para favorecer —de manera ilegal—, a la candidata del PAN, Josefina Vázquez Mota.
¿Y cuales son esas evidencias?
1.- Si a Felipe Calderón se le habría chispoteado el comentario sobre el resultado de la encuesta pagada por la casa presidencial, el asunto no habría quedado más que en una mera declaración, un chistorete o una ocurrencia, como las que suele hacer el Presidente.
Pero no, se trató de un diseño que llegó al extremo de mostrar una presentación en power point, en donde aparecen los resultados de la citada encuesta.
2.- El hecho de que el Presidente refiera una encuesta sobre la intención del voto de los candidatos presidenciales, deja ver que en Los Pinos se trabaja, activamente, en la campaña presidencial del candidato de la casa; la señora Vázquez Mota. Se entiende que el Presidente en turno tenga en su escritorio la información sobre la forma en que evolucionan los procesos electorales.
Esa información pudiera, incluso, ser parte de los procesos de inteligencia. Pero no se entiende que esa información que cuesta a todos los ciudadanos, sea utilizada para beneficiar a un candidato, el del Presidente.
3.- La noche del mismo jueves, la casa presidencial trató de calmar el escándalo, mediante un boletín que no desmentía que mediante una encuesta el Presidente trató de incidir en el ánimo electoral de los banqueros, pero que dejaba clara la huella de que se trataba de engañar a la opinión pública. Eso sin tomar en cuenta que, al mismo tiempo, el PAN confirmaba la existencia de una encuesta, que en la casa presidencial pretendían negar. Es decir, que se les hizo bolas el engrudo y las huellas del engaño aparecieron por todas partes. Y.
4.- Que fue tal el escándalo, que el Presidente debió rectificar a menos de 24 horas, en tanto que puede venir una sanción del IFE.
Pero más allá de las evidencias de que en Los Pinos se intenta una elección de Estado, lo cierto es que lo menos que podemos reclamar los ciudadanos, a políticos y gobernantes, es un mínimo de respeto a la ley. Y es que sin confianza en las autoridades, la gobernabilidad está ante un grave riesgo.
Nuevo León, en manos Zetas
Y precisamente las bandas criminales, como el grupo de Los Zetas, le apuestan a la desconfianza social de los gobiernos, como fórmula para minar la gobernabilidad. Todos saben que Nuevo León, y su capital, Monterrey, viven una escalada violenta como no se había conocido.
También todos saben que el gobierno del priista Rodrigo Medina se ha visto rebasado por los elevados niveles de corrupción en su administración y que, incluso, el poderoso sector empresarial regio, le planteó un ultimátum.
Y en abono a la ingobernabilidad galopante, el grupo mafioso de Los Zetas reveló —con pelos y señales—, haber financiado al mandatario priista, por lo que reclama la hegemonía de la plaza, de todo Nuevo León. Pero hay más. Como nunca, esa banda criminal reta al Estado mexicano y promete derrotarlo, claro, a cambio de pactar una tregua, sea con el gobierno federal saliente, sea con el entrante. ¿Cierto o falso que las bandas criminales estarán en la elección presidencial? Al tiempo.
En el camino
En Guanajuato, dicen, el PRI se pasmó. ¿Será cierto que el quinto productor de votos no le importa a Peña Nieto? ¿O será que dejarán morir al PRI, con la candidatura de Torres Landa?
2012-02-26 03:02:00Leído en: http://www.excelsior.com.mx/index.php?m=nota&seccion=opinion&cat=11&id_nota=813635






¿SIRVE DE ALGO NUESTRO VOTO?

por Román Revueltas Retes.

Si el ejercicio de elegir a nuestros gobernantes no garantiza, siquiera, que se tramite una ley de seguridad, entonces hay algo que no está funcionando en la democracia. Se dice que el último recurso de los inconformes está en la calle, en las protestas, sin embargo los espacios públicos están en manos de todos aquellos que quieren tramitar ahí la satisfacción de sus intereses...
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Los ciudadanos estamos absolutamente distanciados de nuestra clase política: nos resulta ajena, extraña, distante y, sobre todo, repudiable en tanto que no atiende nuestros provechos sino que procura, de la manera más cínica y desvergonzada, sus propias conveniencias. Esa gente, más allá de servirse con la cuchara grande, tiene la mirada puesta en las próximas elecciones y nada más. Y como el propósito de vencer a sus adversarios es el fin último de todos sus designios, entonces no les importa que, en el camino, sean sacrificados los intereses más apremiantes de la nación.


Ha sido así como, por no dar gusto al partido gobernante ni contribuir en manera alguna a que pueda cosechar logros debidos a una negociación entre las partes, la oposición ha seguido una estrategia de pernicioso obstruccionismo y es así, en consecuencia, que no se han acordado las reformas estructurales que le urgen a este país. Está también la cuestión de unos principios, dogmas e ideologías que, faltaría más, les vienen como anillo al dedo para justificar su intransigencia: los panistas de rosario y crucifijo simplemente no digieren que un Estado laico pueda asegurar los mismos derechos a todos sus ciudadanos (incluidos, por si hiciera falta expresar esto de manera más explícita, los homosexuales y las lesbianas) y, por lo visto, prefieren la feroz impiedad de las condenas a la compasión de la doctrina cristiana; los priistas, entrampados en los credos del nacionalismo revolucionario, se aferran empecinadamente a la entelequia de que “el petróleo es de todos los mexicanos” y se oponen así —y esto, con el ejemplo en las narices de un Brasil que ha permitido la participación de capitales privados en la industria petrolera nacional propiciando, de tal manera, un extraordinario crecimiento económico— a que Pemex se capitalice, a que emprenda exploraciones de nuevos yacimientos y a que se vuelva un instrumento para crear riqueza y repartirla; los perredistas, por último, son los más hábiles administradores del descontento social y del rencor y se oponen, por principio, a todo.


La democracia es un asunto de contrapesos, desde luego, y es una buena cosa que alguien pueda, por ejemplo, marcarles un alto a los conservadores blanquiazules y recordarles que doña Iglesia no manda en los temas civiles. Pero una cosa es poner en su lugar a la derecha cerril y otra muy diferente es consagrar, por así decirlo, un sistema sustentado en la inmovilidad, la inacción y el obstruccionismo a ultranza. Cuando hablamos de la “generación del no” estamos, precisamente, haciendo referencia a una casta de politicastros que, en el Congreso, ha saboteado pura y simplemente las iniciativas para que México se trasforme. El daño a la nación es inconmensurable.

Ahora bien, los ciudadanos de este país afrontamos una extrañísima paradoja: somos nosotros, a través de nuestros votos, quienes delegamos, en ellos, la facultad de llevar los asuntos públicos. Uno podría pensar, por lo tanto, que poseemos una colosal prerrogativa: la de dejar de suministrarles lo que más les importa: el poder. Pues no. Procuran afanosamente nuestros sufragios pero cuando se hacen de un cargo público o se apoltronan en un dormilona de la Cámara (muy) Baja se olvidan del bien común y se dedican de tiempo completo a atender sus asuntos. Luego, nuestro posible voto de castigo debiera significarles una amenaza lo suficientemente seria como para que se pusieran las pilas e hicieran los deberes. Pues, tampoco. No sirve casi de nada: esté quien esté, gobierne quien gobierne, le toque a quien le toque resulta que todo sigue igual, es decir, que el país no se mueve y que los temas dificultosos no se atienden. Pareciera, entonces, que el mecanismo de representación está completamente averiado.

¿Qué podemos hacer, en estas circunstancias? Si el ejercicio de un derecho fundamental, el de elegir a nuestros gobernantes, no garantiza siquiera, por ejemplo, que se tramite una ley de seguridad nacional en el Congreso —siendo, encima, que una de las principalísimas preocupaciones de los mexicanos es ésa, la de la seguridad, que hay empresas extranjeras que están desmantelando sus plantas en la frontera norte y que ha disminuido el turismo del exterior por la imagen de violencia que ofrece el país— entonces hay algo que no está funcionando en la democracia mexicana. Se dice que, a falta ya de otras posibilidades y mecanismos, el último recurso de los ciudadanos inconformes está en la calle: en las protestas populares y en las manifestaciones. En México, sin embargo, los espacios públicos no están en manos de la gente común y corriente sino de los grupos adscritos al corporativismo, es decir, de todos aquellos que quieren tramitar ahí, bloqueando carreteras y desquiciando el tráfico en las ciudades, la permanente satisfacción de sus muy particulares intereses (canonjías, reparaciones, prebendas, etcétera) de cuerpo.


Un primer paso, tal vez, sería poder definir una agenda común (un asunto difícil porque estamos también muy divididos). En una segunda etapa sí deberíamos salir a la calle. Pero no como meros agitadores, chantajistas y acarreados sino como la avasalladora fuerza social que reclama el más elevado de los fines: que México cambie de verdad.


Leído en: http://www.milenio.com/cdb/doc/impreso/9119332


¿DÓNDE ESTÁ EL DÉCIMO HOMBRE?.



Eran diez amigos. Todos ellos eran muy ignorantes. Decidieron ponerse de acuerdo para hacer una excursión.
Querían divertirse un poco y pasar un buen día en el campo. Prepararon algunos alimentos, se reunieron a la salida del pueblo al amanecer y emprendieron la excursión. Iban caminando alegremente por los campos charlando sin cesar entre grandes carcajadas. Llegaron frente a un río y, para cruzarlo, cogieron una barcaza que había atada a un árbol. Se sentían muy contentos, bromeando y chapoteando en las aguas. Llegaron a la orilla opuesta y descendieron de la barcaza.
¡Estaba siendo un día estupendo! Ya en tierra, se contaron y descubrieron que solamente eran nueve. Pero, ¿dónde estaba el décimo de ellos? Empezaron a buscar al décimo hombre. No lo encontraban. Comenzaron a preocuparse y a lamentar su pérdida. ¿Se habrá ahogado? ¿Qué habrá sido de él? Trataron de serenarse y volvieron a contarse. Sólo contaban nueve. La situación era angustiosa. Uno de ellos se había extraviado definitivamente.
Comenzaron a gimotear y a quejarse.
Entonces pasó por allí un vagabundo.
Vio a los hombres que otra vez se estaban contando. El vagabundo descubrió enseguida lo que estaba pasando.
Resulta que cada hombre olvidaba contarse a sí mismo. Entonces les fue propinando una bofetada a cada uno de ellos y les instó a que se contaran de nuevo. Fue en ese instante cuando contaron diez y se sintieron muy satisfechos y alegres.
*El Maestro dice: El décimo hombre no era una nueva adquisición. Siempre estuvo allí, como el Ser que reside dentro del ser humano. Nunca ha estado ausente. En cuanto se disipe la ofuscación de la mente será percibido.
Tomado de “Cuentos Clásicos de la India” recopilados por Ramiro Calle.