martes, 16 de febrero de 2016

Enrique Abasolo - El deber del ateo

“No caigamos en el convencionalismo de que por amabilidad no se discute sobre religión. La religión no está exenta del debate. La religión no está fuera de nuestro alcance”.

Lejos de ser las palabras arrogantes de cualquier ateo de café, pertenecen a Richard Dawkins, divulgador científico, Premio Nobel y una de las mentes más lúcidas de la Biología Evolutiva.

Rescato la cita anterior porque respalda mi postura frente a la fe: ¿Debo ser respetuoso y considerado con las creencias religiosas ajenas? Quizás, si lo que deseo es conservar ciertas amistades, pero lo cierto es que estimo un deber superior la búsqueda de la verdad sobre la cortesía. “Amicus Plato, sed magis amica verita”. (¡Caray! Esta locución está muy de moda hoy en día).








Ciro Gómez Leyva - ¿Quién mata a los periodistas en México?

Apenas se informó la noticia del hallazgo del cadáver de Anabel Flores Salazar, hace ocho días, comenzó a circular un boletín de prensa anónimo donde se presentaba un breve perfil de la mujer de 27 años.

Lo esencial estaba en los párrafos finales:

“Trascendió que el año pasado, Anabel se casó con un policía (se desconoce nombre) al parecer del municipio de Nogales, Veracruz, el cual se le relacionaba con la delincuencia organizada (…) En su perfil de Facebook tiene entre sus contactos a Víctor Osorio Santacruz, así como a elementos de policías municipales de la región (…) El 30 de agosto de 2014, alrededor de las 11:30 horas, en la localidad Sierra del Agua, municipio de Acultzingo, fue detenido Víctor Osorio Santacruz, alias “El Pantera”, presunto primer comandante de Maltrata, por elementos del Ejército Mexicano cuando se encontraba desayunando con un sujeto apodado “El Yiyo” y Anabel Flores Salazar, reportera de El Buen Tono, quien no fue detenida (…) Osorio Santacruz presuntamente se encargaba de vigilar los movimientos de las fuerzas federales en las vialidades próximas a la región (…)”








Pablo de Llano - El Papa no compra chales

Dos mujeres indígenas vendiendo afuera de la catedral de San Cristóbal. 

Una mujer indígena de unos sesenta años estaba sentada el domingo a las once de la noche en una esquina de la plaza de la catedral de San Cristóbal de las Casas, con sus tejidos artesanales a la venta, cubierta de pies a cabeza por una manta negra de lana de oveja. A cada rato, una niña pequeña, tal vez su nieta, iba y le ponía en la mano caramelos de colores. Ella no decía nada. Se los comía. Trece horas después, a mediodía del lunes, la plaza estaba llena de gente esperando la llegada del papa Francisco y entre toda esa gente, en la misma esquina, estaba la misma señora indígena en la misma posición, sentada, con su producto a la venta, pero sin el mantón encima y sin la niña que le entregaba puntualmente con máximo respeto caramelos de colores. Jorge Mario Bergoglio visitó una ciudad en la que los indígenas no piden fe. Piden, esperan con paciencia, que les compren algo.








Ricardo Alemán - Los muertos con sotana

Cuando el Papa “suplicó” a obispos mexicanos “no minusvalorar” el desafío del narcotráfico para la sociedad y la iglesia, Francisco sabía de lo que hablaba. Y es que desde el crimen del cardenal Posadas han sido asesinados una veintena de sacerdotes católicos, muchos a manos del narco.

Van 11 casos.

En 2013 fueron asesinados José Flores Preciado, 83 años, muerto a golpes el 5 de febrero en la iglesia de Cristo Rey, Colima. Ignacio Cortés Álvarez, 57 años, murió a golpes el 22 de julio en la parroquia María Auxiliadora en Ensenada, Baja California. Hipólito Villalobos Lima y Nicolás de la Cruz Martínez, de 45 y 31 años, muertos el 29 de noviembre en la parroquia de San Cristóbal, en Ixhuatlán de Madero, Veracruz. Joel Román Salazar, de Ciudad Altamirano, Guerrero, perdió la vida el 10 de diciembre cuando empujaron su automóvil –con él dentro–, a un barranco.






Dan T - Una cadena de oración

Aprovechando que está el Papa en México, hagamos todos, hermanas y hermanos, una cadena de oración para pedir por nuestra maltrecha Patria. Repitan conmigo:
San Jorge... quítale lo transa a Roberto Borge.
San Ignacio de Loyola... que ya nos cambien a Loret de Mola.
Santa Juana de Arco... que los políticos ya no pacten con el narco.
San Valentín... haz a Peña más listín.
Santa Rafaela... ya despierta Mancera.
San Simeón... no dejes que nos gobierne un cab...ezón.
San Benito... que Moreno Valle deje de preocuparse por ser bonito.
San Raúl... no le hagas el milagro al Cruz Azul.
Santa Isabel de Portugal... protege al peso de todo mal.
San Nereo... que el futuro ya no pinte tan feo. San Juan Climaco... quítale a los del América lo nacos. San Marco Evangelista… que el SAT me borre de la lista.
Santa Teresa de Calcuta... ampárame de las fotomultas.
San Alejo... no me dejes votar por el más pendejo.
San Arsenio... por favor que se acabe el sexenio.







Carlos Ramírez - Interna, la verdadera crisis de la iglesia católica

Percibida como un hipopótamo con dificultades para moverse, la iglesia católica enfrenta una gravísima crisis de existencia que los últimos cuatro papas no han podido atender: nacida para consolar al hombre y para mantener el evangelio de Cristo, derivó en una estructura de poder terrenal.

Con pocos datos puede decirse que el Papa Francisco entendió así la crisis de la iglesia católica mexicana --menos sacerdotes, abusos sexuales, disminución de creyentes y liberalización de dogmas-- cuando regañó a la jerarquía católica y la conminó a resolver sus diferencias “como hombres” y no como sacerdotes representantes de Dios en la tierra.

Inclusive, el propio Francisco se vio muy terrenal cuando dejó entrever que su enojo con el cardenal Norberto Rivera Carrera no era pastoral o de fe sino político porque el mexicano no había votado por él en el cónclave de marzo del 2013.






Raymundo Riva Palacio - Francisco: reivindicación insurgente

Reivindicar a los pueblos indígenas como hizo el papa Francisco en San Cristóbal de las Casas ¿es sólo un reconocimiento de lo que la jerarquía eclesiástica mexicana les negó durante siglos? Previamente Francisco ya había pedido perdón por tantos crímenes cometidos en su contra por la Iglesia Católica durante la era colonial, y este lunes se entregó el decreto para que las lenguas indígenas puedan ser usadas en misa, medio siglo después de que el Segundo Concilio Vaticano autorizó que la liturgia pudiera hacerse en lenguas vernáculas, no sólo en latín. Pero no acudió a Chiapas, el estado menos católico de México, sólo para este encuentro. Ahí oró ante la tumba Samuel Ruiz, a quien conoció en los 60, y quien llevó, inopinadamente o no, la causa indígena al extremo: la lucha armada.

No se puede interpretar ese momento como una autorización implícita de Francisco que en aquellos momentos donde se llega al límite, la opción de las armas sea el camino. Pero tampoco puede minimizarse el homenaje al obispo de San Cristóbal de las Casas, comprometido con una causa cuyo papel central aún es debatido y que corona el surgimiento del Ejército Zapatista de Liberación Nacional y su alzamiento el primero de enero de 1994. En una carta pastoral en agosto de 1993, el obispo Ruiz insistió en que las condiciones de vida “infrahumanas” que ya vivían las comunidades indígenas, se habían agravado por nuevas formas de opresión política y un modelo, el neoliberal, impuesto en aquellos años por el gobierno mexicano.







Sergio Sarmiento - Como hombres

"Qué bien nos haría a todos hacer un examen de conciencia y aprender a decir ¡Perdón!".

Papa Francisco

Este pasado 14 de febrero, en su trayecto hacia Campo Marte para volar a la misa que oficiaría en Ecatepec, el papa Francisco se detuvo en la calle de Río Mixcoac para conversar con un grupo de religiosas. El gesto es muy típico de este pontífice que con frecuencia abandona el protocolo para delicia del pueblo y pesadilla de su personal de seguridad.





Lea la columna completa aquí http://www.criteriohidalgo.com/a-criterio/como-hombres







Eduardo Ruiz Healy - Francisco, muy diferente de los políticos

El papa Francisco estuvo ayer en la tarde en esta ciudad...

... la capital chiapaneca, y antes en San Cristóbal de la Casas, que lo fue en tres ocasiones distintas durante el siglo antepasado.

En el estadio Victor Manuel Reyna, la casa del equipo de futbol Jaguares, Francisco encabezó un Encuentro con Familias en el que participaron decenas de miles de hombres, mujeres y niños que bajo un sol ardiente esperaron durante unas cuatro horas y media su llegada. Y tuvieron que esperarlo, virtualmente encerradas en el recinto, porque los responsables de la seguridad del obispo de Roma aparentemente olvidaron que los seres humanos de vez en cuando deben ir al baño, y más después de tomar litros de agua para saciar la sed que causa el estar durante horas bajo un despejado cielo chiapaneco.







Roberto Arlt - Los hombres fieras

Roberto Arlt  ( 1900 - 1942 )
Los hombres fieras

El sacerdote negro apoyó los pies en un travesaño de bambú del barandal de su bungalow, y mirando un elefante que se dirigía hacia su establo cruzando las calles de Monrovia, le dijo al joven juez Denis, un negro americano llegado hacía poco de Harlem a la Costa de Marfil:

-En mi carácter de sacerdote católico de la Iglesia de Liberia debía aconsejarle a usted que no hiciera ahorcar al niño Tul; pero antes de permitirme interceder por el pequeño antropófago, le recordaré a usted lo que le sucedió a un juez que tuvimos hace algunos años, el doctor Traitering.

"El doctor Traitering era americano como usted. Fue un hombre recto, aunque no se distinguió nunca por su asiduidad a la Sagrada Mesa. No. Sin embargo, trató de eliminar muchas de las bestiales costumbres de nuestros hermanos inferiores, y únicamente el señor presidente de la República y yo conocemos el misterio de su muerte. Y ahora lo conocerá usted."

El doctor Denis se inclinó ceremonioso. Era un negro que estaba dispuesto a hacer carrera. El sacerdote encendió su pipa, llenó el vaso del juez con un transparente aguardiente de palma, y prosiguió: