Quien suponga que con la promulgación de la reforma energética el tema está concluido, se equivoca rotundamente. Revertir esta privatización de nuestros recursos energéticos representa una causa común y motivo de unidad de las fuerzas progresistas y de izquierda. Con ley reglamentaria o sin ésta, existe la disposición para convocar a una consulta, de acuerdo a lo dispuesto por el artículo 35, fracción VIII, de nuestra Constitución.
Un nuevo año inicia y con él una lista de asuntos pendientes, procesos en curso y nuevas tareas para el Estado mexicano, sus instituciones, poderes y clase política. Que lo urgente no impida atender lo importante.
La lista de pendientes es larga, pero dos temas concentran la atención y la preocupación de la mayoría de la sociedad: la inseguridad y la situación económica, particularmente la falta de empleo y el aumento de los precios en los productos básicos.