martes, 13 de enero de 2015

Leo Zuckermann - La corrupción les vale un pepino a los mexicanos

México es el país más corrupto de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Su sector público es el que se percibe como el menos honesto de todos. En el último estudio de esta organización, publicado la semana pasada, aparece una gráfica de pena ajena. La fuente es Transparencia Internacional y reporta el Índice de Percepción de la Corrupción, que clasifica a los países con base en el grado de corrupción con el que se percibe a su sector público. De las 46 naciones que aparecen en la gráfica, México está en el lugar número 43. Sólo Rusia, Paraguay y Venezuela se perciben como más corruptos. Los otros 33 estados pertenecientes a la OCDE están mejor que nosotros.

 También otros países que no son de la OCDE pero se encuentran en nuestra región Latinoamericana: Brasil, Colombia, Argentina y Bolivia.
La corrupción en México es un horror. Está enquistada en la relación del gobierno con la ciudadanía.








Salvador García Soto - Otra vez el dilema: ¿AMLO o Ebrad?


A estas alturas y con las condiciones del país, con una economía
estancada, un ambiente social agitado y un gobierno, el de Enrique Peña
Nieto, desgastado y tocado apenas en su segundo año, nadie duda que una
de las fuerzas políticas que irrumpirán en el escenario electoral en los
comicios federales y locales de julio será Morena y su caudillo Andrés
Manuel López Obrador.


Denise Maerker - En Michoacán, un ejército desempleado.


¿Qué hubiera sido necesario para que en un año el conflicto en
Michoacán se hubiera, si no solucionado, sí encauzado a una pacificación
duradera? Es la pregunta que hoy nos tenemos que hacer cuando vemos que
nuevamente hay gente armada en los caminos de Michoacán y grupos que
están resolviendo a balazos sus diferencias.




Carlos Marín - La patraña contra el ejército

Las agresiones en Guerrero contra militares responden al cuentazo de un par de pillastres que propalan la “hipótesis científica” (dos últimos domingos en La Jornada) de que los normalistas de Ayotzinapa pudieron haber sido “incinerados en crematorios modernos del Ejército, o de empresas privadas, con instalaciones suficientemente grandes y con morgue…”.

Pese a que las evidencias periciales criminalísticas y criminológicas apuntan hacia sanguinarios narcotraficantes, el embuste lo atiza también un ex militar que fue procesado por defraudar al Ejército, pero que medra con la patraña de haber sido “preso político”: José Francisco Gallardo.






Jairo Calixto Albarrán - Justin Bieber o la ¡Pornovenganza!

Y no, no se trata del tsunami de spots con el que los partidos políticos nos van a hacer pagar el sobreprecio de la democracia, ni de las imágenes de Justin Bieber sin photoshop, donde se le ve francamente ñengo, enjuto y pachichi para el anuncio de Calvin Klein, sino de un tipo de comportamiento en boga en México, que consiste en que ex parejas se la cobran gachas fundamentalmente a las mujeres subiendo a la red sus videos íntimos onda Paris Hilton.

Un tipo de comportamiento perverso que ni los gringos practican con regularidad. Ellos cuando mucho hacen cosas como meter ex góbers a la cárcel, algo que un país tan civilizado y moreirista como el nuestro casi ni ocurre porque no nos gusta la barbarie. Creemos que es un exceso del fundamentalismo de la austeridad republicana condenar a la cárcel a un ex gobernador corrupto, en este caso el de Virginia, Bob McDonell, solo por aceptar ropa y Rolex para él y para su esposa.
Esa no es manera de luchar contra la corrupción, sobre todo si ese republicano mucho habrá sacrificado por cultivar el que según Gordon Gekko en la película Wall Street, es el motor del capitalismo, la avaricia, el favorito de sus pecados.






Rymundo Riva Palacio - El primero y 10 de la CNTE

La Reforma Educativa, la primera gran transformación anunciada por Enrique Peña Nieto en su primer discurso como presidente, llegó a su fin. Esta conclusión no es buena sino ominosa. Por decisión política, las premisas de la Reforma Educativa para la capital de la cuenca del descontento, Oaxaca, quedaron truncas. Le ley en ese estado no se aplicará. Seguirán las concesiones y las prebendas. ¡Viva la disidencia magisterial! Que los ciudadanos acepten la realidad que en el momento menos esperado cerrarán aeropuertos, carreteras, realizarán plantones y estrangularán el comercio. La paz social que buscó el gobierno de Peña Nieto mediante la entrega de una parte de poder a los maestros opositores al régimen, es una quimera.

 En el gobierno de Peña Nieto debería haber aprendido que la CNTE es insaciable. Para utilizar una metáfora del futbol americano, siempre juegan al primero y 10. Es decir, en las negociaciones con la disidencia magisterial no hay avances de una yarda, ni retrocesos. Siempre que tienen el balón, los maestros avanzan 10 yardas para tener no cuatro oportunidades más para volver a tener esa posición de campo –como sucede en el juego-, sino para recorrer en automático la distancia y exigir otras 10 yardas. Ellos nunca pierden. Quienes pierde es el gobierno y los mexicanos.







SERGIO SARMIENTO - DEJAR DE GOBERNAR

DEJAR DE GOBERNAR

LEA LA COLUMNA EN ESTE LINK

http://criteriohidalgo.com/notas.asp?id=287033 

PERIÓDICO CRITERIO, LA VERDAD IMPRESA

Eduardo Ruiz Healy - La dimensión del problema

El yihadismo es un neologismo occidental utilizado para denominar a las ramas más violentas y radicales dentro del islam político, caracterizadas por la frecuente y brutal utilización del terrorismo, en nombre de una supuesta yihad, a la cual sus seguidores llaman una ‘guerra santa’ en el nombre de Alá”. Así define la edición española de Wikipedia lo que también se conoce generalmente como terrorismo islámico o islamista, un movimiento que igual actúa contra el mundo no musulmán como contra los musulmanes que los islamistas consideran herejes por no seguir al pie de la letra su muy estricta interpretación de la ley coránica. Existen algunos grupos que buscan la obliteración de Israel y le han declarado la “guerra santa” a este país y a los que percibe como sus aliados.
Dentro de la edición inglesa de la misma enciclopedia en línea se identifican las organizaciones yihadistas que han sido detectados alrededor del mundo. Su número es considerable y la cantidad de miembros de cada una es difícil de precisar, aunque se tienen estimados. Algunas han desaparecido o se han adherido a otros grupos yihadistas.







Octavio Paz - Máscaras mexicanas

Octavio Paz (1914 - 1998)

Máscaras mexicanas

Corazón apasionado
disimula tu tristeza.
Canción popular

Viejo o adolescente, criollo o mestizo, general, obrero o licenciado, el mexicano se me aparece como un ser que se encierra y se preserva: máscara el rostro, máscara la sonrisa. Plantado en su arisca soledad, espinoso y cortés a un tiempo, todo le sirve para defenderse: el silencio y la palabra, la cortesía y el desprecio, la ironía y la resignación. Tan celoso de su intimidad como de la ajena, ni siquiera se atreve a rozar con los ojos al vecino: una mirada puede desencadenar la cólera de esas almas cargadas de electricidad. Atraviesa la vida como desollado; todo puede herirle, palabras y sospecha de palabras. Su lenguaje está lleno de reticencias, de figuras y alusiones, de puntos suspensivos; en su silencio hay repliegues, matices, nubarrones, arco iris súbitos, amenazas indescifrables. Aun en la disputa prefiere la expresión velada a la injuria: “al buen entendedor pocas palabras”. En suma, entre la realidad y su persona se establece una muralla, no por invisible menos infranqueable, de impasibilidad y lejanía. El mexicano siempre está lejos, lejos del mundo y de los demás. Lejos, también, de sí mismo.


El lenguaje popular refleja hasta qué punto nos defendemos del exterior: el ideal de la “hombría” consiste en no “rajarse” nunca. Los que se “abren” son cobardes. Para nosotros, contrariamente a lo que ocurre con otros pueblos, abrirse es una debilidad o una traición. El mexicano puede doblarse, humillarse, “agacharse”, pero no “rajarse”, esto es, permitir que el mundo exterior penetre en su intimidad. El “rajado” es de poco fiar, un traidor o un hombre de dudosa fidelidad, que cuenta los secretos y es incapaz de afrontar los peligros como se debe. Las mujeres son seres inferiores porque, al entregarse, se abren. Su inferioridad es constitucional y radica en su sexo, en su “rajada”, herida que jamás cicatriza.


El hermetismo es un recurso de nuestro recelo y desconfianza. Muestra que instintivamente consideramos peligroso al medio que nos rodea. Esta reacción se justifica si se piensa en lo que ha sido nuestra historia y en el carácter de la sociedad que hemos creado. La dureza y la hostilidad del ambiente -y esa amenaza, escondida e indefinible, que siempre flota en el aire- nos obligan a cerrarnos al exterior, como esas plantas de la meseta que acumulan sus jugos tras una cáscara espinosa. Pero esta conducta, legítima en su origen, se ha convertido en un mecanismo que funciona solo, automáticamente. Ante la simpatía y la dulzura nuestra respuesta es la reserva, pues no sabemos si esos sentimientos son verdaderos o simulados. Y además, nuestra integridad masculina corre tanto peligro ante la benevolencia como ante la hostilidad. Toda abertura de nuestro ser entraña una disminución de nuestra hombría.