martes, 25 de junio de 2013

Rafael Loret de Mola - Sálvese quien pueda

Ningún partido está a salvo en plena guerra de acusaciones, por cierto paralela a la que llevan a cabo las fuerzas públicas, se supone, en contra de las asociaciones delincuenciales, sobre todo los narcotraficantes y terroristas camuflados. A decir verdad, y aunque no lo acepte el Gobierno de la República, los llamados “grupos de autodefensa” o “policías comunitarias” han resultado bastante más efectivas que las comandadas por la Secretaría de Seguridad Pública, la Defensa y la Armada con funciones extraterritoriales jamás aprobadas por el Congreso. ¿Acaso éste nada puede hacer cuando la consigna presidencial va en paralelo con quienes tienen poder de fuego?¿Es ésta la democracia por la que pugnamos todos?

(Por cierto, a este columnista decir estas cosas, sobre los mandos de la Marina, ya le costó un espacio periodístico, el de Novedades de Tabasco, dirigido por un antiguo Almirante para quien todo México es parte del océano como si se tratara de la Atlántida perdida. Discutiendo con él sobre este punto, en Villahermosa, fue imposible ponernos de acuerdo; poco después, cesé en ese diario para beneplácito de mi libertad).


Gil Gámes - El sucio dinero

El pleito en el PAN no disminuye, escala día con día la cima de la injuria. Las patadas, los escupitajos, las bofetadas, los insultos se han convertido en moneda corriente de los panistas. A Gil no le asusta el zafarrancho, después de 12 años en el poder y una estrepitosa derrota en las presidenciales del 2012, lo menos que podría pasar es lo que vemos que ocurre en las filas del PAN: un pleitazo. La derrota es huérfana y siempre busca un padre.

Corral le dio un caballazo a Zavala; Zavala reaccionó con la cubeta, luego entró Madero y le mandó un navío cargado de mala leche, en fon. ¿Y por qué se pelean en los partidos y en las empresas privadas y en la organización familiar?: por el dinero. Cierto, los dineros públicos le dan otra dimensión al asunto, pero el centro de la bronca persiste: el sucio e interesante dinero. La extinta madre de Gil decía esto: las parejas sólo se pelean seriamente por dos cosas: sexo o dinero. Los políticos, de izquierda o de derecha, añade Gilga, se pelean sólo por dos cosas: poder y dinero, en el caso de que no sean la misma cosa.



Rubén Cortés - Ajá: las plumitas lámpara de AMLO

AMLO tiene que haber recordado ayer la escena del 14 de agosto, que terminó por abaratar su vehemente campaña al denunciar la “compra de votos” por parte del ganador en las pasadas elecciones presidenciales:
El notario 128 del DF, Sergio Navarrete, enumeraba las “pruebas” en voz alta y con un tic en la boca que ponía nervioso a AMLO: “Me presenta el solicitante AMLO un chivo anda por ahí, que según dicho de personas que los recibieron, fueron a cambio del voto”. Y fue registrando:

—“En Guerrero, se recibieron dos guajolotes; en Campeche, dos patos; en Zacatecas, una gallina; en Veracruz, un cerdo.



Federico Reyes Heroles - Muérdago Para Alejandra Kawage que sí siente

Una de las lecturas más crudas de una cultura es la vinculación con el medio ambiente. Ahí donde el ser humano alcanza estadios superiores de sensibilidad, por lo general el respeto a la vida se convierte en un termómetro obligado. Y la vida tiene múltiples expresiones, para comenzar la del propio ser humano que siempre es puesto en el centro. Ahí radica buena parte del problema, el eje son las necesidades presentes de la humanidad y por lo tanto el calentamiento global, la merma en las pescaderías, la deforestación, la destrucción del entorno, son observadas en función de esa óptica inmediatista. En el largo plazo es suicida, pero la destrucción no se detiene.



¿Privatizar?- Sergio Sarmiento

JAQUE MATE
25 Jun. 13

"Privatizar. 1. tr. Transferir una empresa o actividad pública al sector privado".

Diccionario de la Real Academia



¿Quieren privatizar Pemex?

En el sentido estricto del término, esto es vender la paraestatal a empresarios privados, sería muy difícil. En contraste con el resto de las petroleras del mundo, que ganan y tienen mucho dinero, Pemex registró al cierre de 2012 un patrimonio negativo de 271,066 millones de pesos. Habría que pagar para que alguien se la quedara.

¿Es Pemex una empresa competitiva?

No, no lo es. La paraestatal es excesivamente burocrática y tiene cuando menos el triple del personal que necesita. Exxon Mobil, que registró ventas por 467 mil millones de dólares en 2012, cuenta con 76,900 trabajadores. Pemex vendió 1.6 billones de pesos, o 126 mil millones de dólares, en 2012, pero tiene más de 150 mil empleados (la empresa no da cifras exactas). Pese a este exceso, la paraestatal prefiere subcontratar a empresas y personal externo, lo que le resulta más barato y le ofrece servicios de mejor calidad, aun cuando tenga que pagar desplazamiento al sindicato.

¿Pierde dinero Pemex?

Con las peleas sale la mugre y peligra la democracia- Leo Zuckermann



Hoy sabemos de los abusos que cometieron los senadores del grupo calderonista con el dinero público, por el pleito que traen con los maderistas.
 


Con las peleas sale la mugre y peligra la democraciaRecibo un correo de un amigo que a menudo se queja de los políticos en México. Le indigna la corrupción. Le da rabia la gran vida que se dan los gobernantes mientras que él trabaja de sol a sol para sacar adelante a su familia. En esta ocasión está enojado con los panistas, a quienes califica de que muy mochos, pero bien corruptos. Y es que se ha enterado que siendo Ernesto Cordero el coordinador de los senadores del PAN, pagó una serie de artículos que, por donde se vea, no se justifica que hayan sido sufragados con una partida de dinero de los contribuyentes. “Hasta las boleadas de zapatos y champú para la caída del pelo”, se queja mi amigo, y remata: “ya ni la joden”.
¿Qué le puedo decir? ¿Acaso no tiene la razón?

Jorge Volpi - Los persas

Según cuenta Heródoto en sus Historias, en el año 480 antes de nuestra era el cuarto emperador de los persas, Xerxes el Grande, reunió uno de los ejércitos más numerosos de que se tuviera noticia y se dispuso a conquistar Grecia en represalia por el apoyo proporcionado por espartanos y atenienses a la rebelión de las ciudades jonias. Tras la batalla de las Termópilas -estilizada en el cómic 300 de Frank Miller y retomada en la burda película de Zach Snyder-, en la cual un pequeño grupo de heroicos soldados comandado por Leónidas, rey de Esparta, resistió el avance enemigo antes de ser aniquilado, los persas parecían encontrarse en una situación idónea para acabar definitivamente con sus rivales.

Víctima de la hubris -al menos según la versión de Esquilo en Los persas- Xerxes no tuvo empacho en incendiar Atenas y prosiguió su avance por mar y por tierra, indiferente al odio que concitaba entre sus nuevos súbditos. En contra de todas las predicciones, su enorme flota fue destruida por las naves de Temístocles en la batalla de Salamina, y posteriormente su armada volvió a sufrir estrepitosas derrotas en Platea y Micale. Aunque los griegos se preciaban de haber terminado con la amenaza persa de esta forma, los historiadores modernos juzgan que en realidad las hostilidades terminaron de manera negociada con la llamada Paz de Calias.


Giovanni Papini - Las obras maestras de la literatura

Giovanni Papini
1881 - 1956

Las obras maestras de la literatura 

 Cuba,  7 noviembre

Tenía necesidad, para ciertos propósitos míos, de conocer lo que los profesores de los colléges llaman las «obras maestras de la literatura». Di a un laureado bibliotecario, que me aseguraron que era un conocedor perfecto de ellas, la orden de prepararme una lista, lo más restringida posible, de obras, y de procurármelas en las mejores condiciones. Apenas me hallé en posesión de estos tesoros, no permití la entrada a nadie, y ya no me levanté de la cama.

Las primeras se me antojaron malas y me pareció increíble que tales humbugs fuesen verdaderamente los productos de primera calidad del espíritu humano. Aquello que no comprendía me parecía inútil; lo que comprendía no me gustaba o me ofendía. Género absurdo, aburrido; tal vez insignificante o nauseabundo. Relatos que si eran verdaderos me parecían inverosímiles, y si inventados, insulsos. Escribí a un profesor célebre de la Universidad de W. para preguntarle si aquella lista estaba bien hecha. Me contestó que sí y me dio algunas indicaciones. Tuve valor para leer aquellos libros, todos, menos tres o cuatro que no pude soportar desde las primeras páginas.

Huestes de hombres, llamados héroes, que se despanzurraban durante diez años seguidos bajo las murallas de una pequeña ciudad, por culpa de una vieja seducida; el viaje de un vivo en el embudo de los muertos como pretexto para hablar mal de los muertos y de los vivos; un loco hético y un loco gordo que van por el mundo en busca de palizas; un guerrero que pierde la razón por una mujer y se divierte en desbarbar las encinas de las selvas; un villano cuyo padre ha sido asesinado y que, para vengarle, hace morir a una muchacha que le ama y a otros variados personajes; un diablo cojo que levanta los tejados de todas las casas para exhibir sus vergüenzas; las aventuras de un hombre de mediana estatura que hace el gigante entre los pigmeos y el enano entre los gigantes, siempre de un modo inoportuno y ridículo; la odisea de un idiota que a través de una serie de bufas desventuras sostiene que este mundo es el mejor de los mundos posibles; las peripecias de un profesor demoníaco servido por un demonio profesional; la aburrida historia de una adúltera provinciana que se fastidia y, al fin, se envenena; las salidas locuaces e incomprensibles de un profeta acompañado de un águila y de una serpiente; un joven pobre y febril que asesina a una vieja, y luego, imbécil, no sabe siquiera aprovecharse de la coartada y acaba cayendo en manos de la Policía.

Me pareció comprender, con mi cabeza virgen, que esa literatura tan alabada se hallaba apenas en la edad de la piedra, lo que me dejó desesperadamente desilusionado. Escribí a un especialista en poesía, el cual intentó confundirme diciéndome que aquellas obras valían por el estilo, la forma, el lenguaje, las imágenes y los pensamientos y que un espíritu educado podía experimentar con ellas grandísimas satisfacciones. Le contestó que, por mi parte, obligado a leer casi todos aquellos libros en traducciones, la forma importaba poco, y que el contenido me parecía, como es, anticuado, insensato, estúpido y extravagante. Gasté cien dólares en esta consulta, sin ningún fruto.

Por fortuna conocí más tarde a algunos escritores jóvenes que confirmaron mi juicio sobre aquellas viejas obras y me hicieron leer sus libros, donde encontré, entre muchas cosas turbias, un alimento más adecuado a mis gustos. Me ha quedado, sin embargo, la duda de que la literatura sea tal vez incapaz de perfeccionamientos decisivos. Es muy probable que nadie, dentro de un siglo, se dedique a una industria tan atrasada y poco remuneradora.

Tomado de Gog


Ciudadanos ejemplares: Jack Unterweger, el estrangulador de Viena.

Jack Unterweger nació en la pobreza y cuando lo encarcelaron por su primer asesinato tenía 24 años y era analfabeto. Sin embargo, su gran inteligencia innata hizo que aprendiera a leer y escribir en prisión, saliendo en 1990 tras publicar una autobiografía que fue bestseller. Ya libre, un Jack se dedicó a escribir, y otro Jack a matar…
Un pasado marcado por el crimen y la ignorancia
Jack Unterweger nació en Austria un 16 de agosto de 1952. Su madre fue una prostituta (en Austria la prostitución era y aún es legal) y su padre un soldado norteamericano que combatió en la Segunda Guerra Mundial. Jack fue el único hijo de ambos y supuestamente fue engendrado en una relación cliente-prostituta, por lo que desde el inicio su padre estuvo ausente.