REFUTANDO A RAMIRO PADILLA ATONDO APROVECHANDO SUS PALABRAS
Y SUS VIDEOS.
PRIMERA PARTE.
POR TEPOZTECO.
Tal y como lo anticipé en un comentario, aunque ya ha pasado
tiempo del mismo, le estoy muy agradecido al Sr. Padilla por los dos videos que
acompañan a su artículo (El efecto Dresser); no podía haberme proporcionado un
recurso mejor para desmentirlo,
adicionalmente, sus palabras nos reflejan perfectamente su personalidad tendenciosa
y radical al titular uno de los dos videos como: “Denise Dresser enojada frente
al primate David”. En donde, no solamente él exhibe su propia personalidad,
sino también la de Denise, al no tener ella ninguna justificación para enojarse
en un debate, en donde fue tratada por
su interlocutor con la consideración
requerida para una dama, aunque sí refutándole su punto de vista, a lo cual no
está acostumbrada, y ese es el problema pues, en sus artículos, ella critica
libremente a quien le place sin recibir, normalmente, ninguna respuesta.
Ramiro Padilla inicia su columna muy sorprendido de que a Denise Dresser le aticen por todos
lados y presupone la mano negra de algún personaje poderoso. Desde luego, no
especifica quienes le están “atizando”, ni que le dicen, ni quién sería el
misterioso personaje (aunque, lo podemos suponer). Yo lo único que yo he sabido
al respecto es sobre una carta que le envió a Denise el vocero
(Jesús Anaya) del coordinador de los diputados priistas (Manlio Flavio
Beltrones), el 1o de abril del presente
año, en la cual le atribuyó, según ella:
“animadversiones personales y amargura, como sustitutos de inteligencia,
argumentos y pruebas”, provocando que se sintiera “intimidada”.
Considero haber demostrado en un escrito anterior, que es
verdad lo señalado por el vocero delcoordinador: no existen pruebas, ni de su
parte, ni de la de los dos reporteros, autores del artículo mencionado en su
columna; tan solo sospechas que, al investigar un poco más sobre el asunto,
estuvieron apoyadas en falsedades. Sobre su animadversión personal hacia el
diputado Beltrones, no es necesaria mucha especulación, tan solo hay que leer
sus columnas, en las cuales, con frecuencia lo menciona para criticarlo y, sobre su inteligencia, se
podrá juzgar con más certeza después de analizar uno de los dos videos.
Entre paréntesis, en relación con el libro “No Accuser, nor
Crime, but You’re Guilty”, escrito por Keith Rosenblum, en donde se detallan
las falsedades incurridas por los dos reporteros en el artículo en donde acusan
a Beltrones de estar inmiscuido con los narcos, al estar ya agotado en Amazon y
no existir certeza de cuando lo volvieran a tener en existencia, decidí
investigar a su autor. Encontré que radica en Tucson y dirige una asociación de
negocios, en la cual, los miembros aportan su curriculum y obtienen y
proporcionan empleos. Como una de mis hijas es miembro de la misma, le pedí
dirigirse al autor para comprarle su libro.
Su contestación fue que lo enviaría gratis. Hace unos días lo recibí y
viene con una dedicatoria a mí, en español:
“Ernesto:
El afán que demuestra su hija en encontrar a este libro me
honra y sugiere que usted ha hecho un trabajo noble en regalarle al mundo una
investigación de primer nivel.”
Ese libro contiene una investigación muy completa sobre las supuestas “evidencias” de la vinculación
de Beltrones con el Chapo y una cantidad considerable de opiniones, de gente
muy importante, en su defensa. Sería muy largo reproducirlas todas pero, cuando menos una, en relación con su
visa e investigación al respecto, sí es conveniente transcribirla:
“I was
under enormous pressure to pull Gov. Beltrones’ visa if he was helping
traffickers. I put together a working group at the Embassy, consisting of DEA,
Customs and everyone else that might have information. We consulted everyone. I
read through to all the intelligence reports and they were full of holes. In
fact, we learned that the governor had been very helpful to us. As a lawyer,
you ask yourself: Would I feel comfortable presenting this evidence to a grand
jury? The answer was no. I didn’t have even the minimum amount of evidence. I
think it was stupid of the governor to file a lawsuit in Mexico (against the
NYT). You can only lose in a pissing match with The New York Times. But we went
back and analyzed everything very
carefully and there wasn’t the basis to do anything.
Jim Jones
Former Ambassador to Mexico”
Espero que, al leerla, el forista que insistió, en varias
ocasiones y, a pesar de las evidencias de lo contrario, que a Beltrones le
habían cancelado su visa y que no lo habían investigado nuestros poderosos
vecinos, quede, por fin, convencido de lo contrario.
Adicional a esta opinión, el libro cita 25 más de ex
embajadores, empleados de la DEA, directores de periódicos, etc. Se incluye también la petición del autor a los dos periodistas que escribieron el
artículo de referencia de contestar a
una lista de preguntas; lo cual aceptaron inicialmente pero, al recibir
la lista y consultar con los abogados del NYT, se negaron a hacerlo. Seguramente,
si Denise Dresser, leyera lo escrito en dicho libro y fuera honesta, se
disculparía públicamente de sus
“sospechas”.
Como bien dice uno de lo que comentan este caso: “el
mencionar un nombre en un artículo puede dañar permanentemente la reputación de
una persona”. Como hemos visto, Beltrones ha quedado marcado, hasta la fecha,
no importando su inocencia en lo que le atribuyen.
Denise Dresser muestra una gran sensibilidad en lo referente
a su persona y falta de ella sobre las reacciones recibidas, por ejemplo, por
dos destacadas periodistas de investigación (ambas galardonadas, en su
oportunidad, con el Premio Nacional de Periodismo de México), cuando se
“atrevieron” a sacarle sus “trapitos al sol” a las altas esferas del poder político de los dos sexenios anteriores,
según se detalla en el contenido de varios de sus libros, en donde describían ampliamente sus
corruptelas.
A una de las
periodistas, Anabel Hernández García, un
comando le allanó su domicilio y según unos vecinos, se identificaron como del
cártel de los Zetas, según otros, como
parte de la Policía Judicial Ministerial. En esa ocasión, afortunadamente, ella
no estaba en su casa. Posteriormente, el 3 de mayo del 2011, Anabel manifestó
públicamente, en el Canal del Congreso: “Yo quiero denunciar desde esta tribuna
que el Secretario de Seguridad Pública Federal, Genaro García Luna y su equipo
siguen con la orden dada de matarme”. Ana Lilia Pérez, la otra periodista, se vio obligada a salir de México a raíz de
amenazas y persecuciones judiciales insólitas.
Esas sí fueron
reacciones violentas y amenazadoras de parte de un gobierno en funciones, no
una simple carta, sin embargo, según recuerdo,
no merecieron ninguna queja de Denise en su momento.
De cualquier manera, lo alarmante e indignante no son tanto
los acosos, ni las amenazas a los periodistas, lo realmente grave son los
asesinatos de los mismos y, cuando menos en este tema, Denise Dresser no
debería distorsionar la realidad para fortalecer sus críticas a los gobiernos
priistas. Según escribe, en otra de sus columnas: “La violencia contra la
prensa aumentó en el 2013. Hubo 330 agresiones contra periodistas, de las
cuales cuatro fueron asesinatos en tanto que un reportero permanece
desaparecido”
Si nos preocupáramos por investigar un poco, aparte de que
fueron tres y no cuatro los periodistas asesinados en el 2013, obtendríamos lo
siguiente:
En los dos sexenios panistas ocurrieron 110 asesinatos de
periodistas, de los cuales 28 fueron en el sexenio de Fox y ¡82! en el de
Calderón. Adicionalmente, 14 periodistas estaban desaparecidos hasta el 12 de
junio del 2012. Por lo que seguramente el gobierno de Calderón, según afirma
Leandro Rodríguez Medina, profesor de tiempo de completo de la Universidad de
las Américas Puebla, será recordado como “uno de los gobiernos más ineficaces
en la protección de periodistas, lo que en gran parte ha puesto a México entre
los países más riesgosos del mundo para ejercer la profesión”.
Si quisiéramos conocer una comparación con respecto a los
gobiernos anteriores, el semanario Zeta en su versión digital, durante 32 años
ha documentado uno por uno, todos los homicidios cometidos contra periodistas.
De acuerdo con su investigación, sólo tres homicidios contra periodistas fueron
cometidos durante la administración de Gustavo Díaz Ordaz; seis, en la gestión
de Luis Echeverría; doce, en tiempos de López Portillo; 33, en el sexenio de
Miguel de la Madrid Hurtado; 46, en el mandato de Salinas de Gortari; 24 cuando
gobernó Ernesto Zedillo, 28 en el sexenio de Vicente Fox y 82 en el de
Calderón.
Continúa Ramiro:
“Basados en los usos y costumbres del sistema priista la respuesta desmedida a
las preguntas de Dresser no significa otra cosa que la reacción de un ego
herido”. Afortunadamente, las reacciones de los “usos y costumbres del sistema
priista” no se comparan, como hemos visto, con las de sus antecesores en los
dos sexenios previos. Adicionalmente, no se trata de “un ego herido”, sino de
un legislador calumniado.
Sin embargo, Denise logra su objetivo, al convencer a sus
lectores que la situación ha empeorado con el nuevo gobierno priista, basta
leer el comentario de uno de los participantes de estos foros, a su artículo
“No disentir en silencio”, en el cual, entre muchas otras violaciones que
relata (consciente de que solo tiene que escribir una lista, tan larga
como se le ocurra, sin necesidad de
demostrar nada), acusa al Gobierno actual de estar “acallando al periodismo de
investigación”, desde luego, sin morderse la lengua.
Escribe el forista:
“Estamos sabiendo lo que teníamos, HOY, HOY, HOY que ya lo
perdimos. A pesar de los vómitos de los
“dolidos” ante la candidez, güeva, conchudez y belicosidad del valiente, en los
pasados 12 años del cambio, no se recuerdan “desapariciones” y ejecuciones de
trabajadores de los medios…”. Desde luego, también se requiere ignorancia de
parte el lector pero, desgraciadamente, es algo muy común, por consiguiente,
Denise siembra en tierra fértil sus falsedades.
Denise omite informar de uno de los problemas todavía más
dramáticos: la desaparición de personas en el sexenio de Felipe Calderón
Hinojosa. Según Amnistía Internacional, entre el 2006 y 2012, se registraron en
México más de 26 mil personas como desaparecidas o no localizadas. No fue
posible determinar la cifra exacta porque el Gobierno anterior no fue capaz, ni
siquiera, de llevar un registro confiable sobre la cantidad de desaparecidos.
Lo considero más dramático porque, muchos de ellos, pueden haber sido
asesinados.
Por más ineficaz que pueda ser el Gobierno actual, no podrá,
ni lejanamente acercarse a las dramáticas cifras de periodistas muertos y personas desaparecidas durante el gobierno de
Calderón.
No considero necesario rebatir todo lo escrito por el Sr.
Ramiro pero, en alguna de sus partes se divierte mucho y yo también: “Es
divertidísimo cuando el senador dice que estudien la reforma energética de
Calderón (para que la comparen con la de EPN) ¿Quién chingados la va a
estudiar? Ni ellos han estudiado la de EPN. Solo levantan el dedo”.
En parte, Ramiro tiene razón, las dos reformas energéticas
no las estudian los ciudadanos comunes y corrientes y, para juzgarlas
correctamente, se requiere no únicamente conocerlas bien sino, además, entender
todo lo relacionado con las mismas y sus posibles repercusiones económicas. De
ninguna manera su conocimiento está fuera del alcance de cualquier ciudadano,
si es que se propusiera dedicarle el tiempo necesario para su comprensión y
consultara las fuentes de información requeridas; sin embargo, difícilmente habrá quien tenga
suficiente interés para hacerlo y eso es, precisamente, lo absurdo de la
pretensión del PRD: decidir mediante una Consulta Popular, a puro sentimiento, lo
que debe hacerse en relación al petróleo.
Pero Ramiro no se
debería divertir tanto, se supone que Denise no es un ciudadano común y
corriente, sino una analizadora profesional de la problemática de nuestro país,
por consiguiente, si se refiere a las reformas energéticas debiera conocerlas,
para poder opinar sobre ellas.
Por otro lado, el senador David Penchyna es el presidente de
la Comisión de Energía y ha estudiado a fondo las dos propuestas de reforma;
estando tan seguro de conocerlas suficientemente bien que, cuando Marcelo
Ebrard, tratando de ganar reflectores, retó al Presidente a debatir sobre la
Reforma Energética, él aceptó su reto, dejando a su elección el lugar, el día y
la hora, recibiendo como única respuesta un sepulcral silencio.
Según Ramiro, estamos ante dos tradiciones encontradas: la
intelectual y la política y, a diferencia de los políticos, Denise sí se gana
su dinero de una manera decente. Si entre los políticos incluye a los miembros
del Congreso, al estarse refiriendo al senador Penchyna, en mi opinión, también
se ganan su sueldo decentemente, aunque no estemos muy satisfechos actualmente
con su trabajo. Es verdad que, desde hace años, nuestros legisladores no tienen
entre sus atributos el ser intelectuales pero, esa no es una regla; si nos
pusiéramos a repasar nuestra historia, sí han existido legisladores con
cualidades excepcionales en algunos de los congresos anteriores; el mejor
ejemplo lo tuvimos en el Congreso Constituyente de 1856 (que elaboró la
Constitución de 1857),considerado hasta la fecha como el mejor; integrado por varios legisladores muy
destacados, entre ellos: Ponciano Arriaga,
José María Mata, Guillermo Prieto, Valentín Gómez Farías, Santos
Degollado y algunos otros .
Varios de ellos reunían los atributos de: políticos, intelectuales y patriotas (cualidad ya muy escasa). De cualquier manera la labor del Poder Legislativo es indispensable para promulgar las leyes que se adapten a nuestro desarrollo, y sí podemos estar orgullosos de algunos de sus miembros anteriores
Varios de ellos reunían los atributos de: políticos, intelectuales y patriotas (cualidad ya muy escasa). De cualquier manera la labor del Poder Legislativo es indispensable para promulgar las leyes que se adapten a nuestro desarrollo, y sí podemos estar orgullosos de algunos de sus miembros anteriores
El libro recomendado por Denise: Why nations fail?, efectivamente, debe ser muy bueno pues, también lo
recomiendan quienes lo han leído y es muy barato, en Amazon cuesta 9.60 dólares, más gastos de envío. Pienso
adquirirlo pero, no el libro escrito por
Denise, sinceramente, no creo que obtendría
ningún provecho.
Dejaré para una segunda parte el análisis de los dos videos
y quedo en espera de sus comentarios, al ser mi principal intensión el
promoverlos en este foro.