jueves, 15 de diciembre de 2011

Tepozteco - Defendiendo a Peña Nieto.

En su primera colaboración, Tepozteco  defiende al pre-candidato priísta desde una perspectiva que involucra más elementos y no sólo a  las carencias o virtudes de los lectores de libros.

Una simple equivocación sobre el autor de un libro ha desatado una campaña, como pocas vistas, en las redes sociales y en estos foros, así como también, varios artículos, todos ellos en contra de Enrique Peña Nieto, expresando serias dudas, manifestadas de diferentes maneras, sobre su capacidad para gobernar, en el caso de que fuera el elegido para la Presidencia. 
Las descalificaciones y los calificativos despectivos en su contra, también  han proliferado en todos esos lugares, sin embargo, por ejemplo, en el caso de Ernesto Cordero, quien también se equivocó, aunque menos, según su opinión, pero de manera más censurable, al haber ya sucedido lo ocurrido a EPN y él haberlo criticado y tenido, además, toda la ventaja para prepararse con anticipación y lucirse con este tipo de preguntas, en ese caso, no se han generado ni críticas ni artículos poniendo en duda sus aptitudes para gobernar. 
Tampoco el error del ex Secretario de Salud, José Ángel Córdoba, lo ha merecido, dejando de manifiesto que no se ha criticado lo dicho por EPN por considerarse realmente transcendente, en la opinión de quienes se han ensañado en su contra sino, más bien, se ha aprovechado al máximo la ocasión para utilizarla electoralmente, disfrazándola de un reclamo justificado pero, todos estos actores, en su afán de descalificarlo, no se han dado cuenta de haber demostrado, ya sea, pertenecer al grupo de los polarizados electoralmente, o bien, si lo prefieren, tener un criterio muy pobre y total desconocimiento de los requisitos que debe reunir una persona para tener éxito en su actividad productiva, cualquiera que esta sea, incluyendo, desde luego, la presidencia de la Republica, yo los dejo en libertad de ubicarse en cualquiera de esas dos categorías. Siendo el principal objetivo de este escrito el justificar catalogarlos de esa manera, así como también, que de ese cúmulo de opiniones adversas exista, cuando menos, una  a favor de Enrique Peña Nieto.
Lo expresado a continuación no tiene nada de novedoso ni de extraño pues, se supone que es del conocimiento de cualquiera medianamente ilustrado, por consiguiente, es sorprendente como se han ignorado los antecedentes necesarios para desempeñar con éxito cualquier actividad. Entre las tonterías escritas con la finalidad de descalificar a EPN, el domingo pasado leí en Milenio un artículo titulado “Somos lo que leemos”, lo cual es un error, por decir lo menos. Todos tenemos un conjunto de cualidades, defectos y determinado grado de estudios, y no es precisamente lo que leemos lo que nos hace aptos para desempeñar algún puesto ni define nuestra personalidad  sino, para empezar, el tipo de libros que hayamos leído y el provecho obtenido de los mismos, variable según la persona, así como también,  la experiencia previa en algunas actividades y la capacidad intelectual. 
La experiencia representa un factor muy importante, con aportaciones  adicionales no obtenidas en los libros especializados, que proporcionan solo generalidades,  no aplicables exactamente en ninguna situación particular, solo la experiencia en enfrentarlas nos ayuda a encontrar la mejor manera de hacerlo. Dicha experiencia, si se tiene,  es todavía más importante para el candidato al gobierno de una localidad o país  pues, lógicamente, no existen libros sobre este tema. Cuando se solicita un trabajo, las características principales para definir la aptitud del solicitante son la escolaridad, la experiencia previa y el aprobar las pruebas psicológicas, en donde se mide, entre otras cosas, de una manera no muy precisa, la capacidad intelectual. La experiencia previa, si se tiene, es la que determina, en mayor medida, la aceptación del solicitante. No se incluyen preguntas sobre los libros leídos.  Se debe distinguir el tipo de lectura, si es el relacionado con el trabajo de la persona o de tipo cultural, en particular, de autores famosos, por ser el caso que estamos tratando. Salvo en algunas actividades, la literatura cultural no tiene ningún efecto en la especialidad escogida por una persona, por ejemplo, si nosotros o alguno de nuestros familiares requerimos una operación, tratamos de encontrar al médico más competente para hacerla, si ese facultativo ha leído o no libros culturales no hace ninguna diferencia en sus habilidades para operar, ni tampoco contribuyó o afectó en nada a sus estudios profesionales ni a su desarrollo como médico. 
Antes de seguir adelante con este razonamiento, quisiera preguntarles a  quienes hayan criticado el incidente de referencia, si alguno de ellos ha leído el libro titulado “La Silla del Águila”, de Carlos Fuentes; según mi pronóstico, las respuestas, si es que se obtienen, variarán entre muy pocos y ninguno, incluyéndome yo entre los que no lo han hecho. Ni pienso hacerlo pero, para no ser juzgado erróneamente, aclaro que, en mis años de vida he acumulado una biblioteca muy numerosa, de libros técnicos, principalmente los relacionados con mi carrera profesional, libros científicos,  algunos sobre salud, historia, economía, etc., y aunque también he leído unos pocos de autores famosos, ha sido exclusivamente como pasatiempo y en nada han contribuido a mi formación. En cambio, mi padre, por ejemplo, de quien heredé la afición a la lectura, tenía una gran biblioteca de libros culturales, por haber sido profesor. En consecuencia, el interés en los libros de tipo cultural depende de la ocupación de la persona y de sus gustos, en casos como el mío, preferimos leer de otros temas. Enrique Peña Nieto, tiene ya experiencia demostrada en saber gobernar bien, algo muy importante para presuponer su desempeño como posible presidente. Aunque ninguno de nosotros ha ocupado ese puesto, es lógico suponer que, para cualquier decisión de importancia  se hace primeramente un análisis exhaustivo del asunto, con la participación del equipo de trabajo. Mi segunda pregunta a los críticos sería si, en su opinión, en este tipo de decisiones, tendría alguna importancia si el presidente ha leído o no alguno de los libros de autores famosos. Sobre todo, ya sabiendo que hemos tenido presidentes muy cultos y esa cultura en nada les ha servido para su gestión. 
En conclusión, teniendo EPN a su favor, su experiencia para gobernar bien, además de otras cualidades que no  están consideradas en este análisis, sus críticos, en este caso particular, utilizan como único argumento para descalificarlo como posible presidente el haberse equivocado con el autor de un libro, y conociendo la verdadera transcendencia de las lecturas de tipo cultural en las actividades productivas, ¿No le parecería absurdo, a cualquiera no involucrado políticamente en este asunto, tan solo el utilizar dicho argumento en su contra? 
Un cordial saludo a todos los foristas.
   

Ricardo Rocha - ¿Guerrero: Aguas Blancas II? (RECOMENDADO POR PERRO CALLEJERO)


El forista Perro Callejero nos sugiere leer esta columna del periodista Ricardo Rocha que compara la matanza de Aguas Blancas con los desafortunados incidentes de éstos días en Guerrero.                          


 En junio de 1995 fueron 16 los muertos. Ahora son dos, aunque podrían ser más.
Pero no es un asunto de estadísticas. Tan grave es una sola muerte injusta como
decenas de muertes injustas.


Son muchas las semejanzas. Ésta también fue una manifestación popular en demanda
de justicia. Igual había una exigencia de diálogo con la autoridad, en este caso
con el gobernador Ángel Heladio Aguirre, tan cercano a Rubén Figueroa. El que
presumía el sello de la casa: sólo a balazos se gobierna Guerrero.


En este caso hay una versión oficial que —como entonces— criminaliza a las
víctimas y exculpa a los agentes armados. Aquella vez se les colocaron armas a
los muertos y se dijo que ellos habían iniciado la agresión. Hoy se sabe que el
estudiante Gerardo Torres Pérez fue capturado, golpeado y torturado; llevado
luego a Zumpango, un baldío al norte de Chilpancingo, donde le dieron un fusil
AK-47 y lo obligaron a dispararlo para supuestamente probar que fueron los
manifestantes lo que iniciaron el fuego.


También ahora se intentó deformar la verdad de los hechos. En sus primeras
declaraciones el procurador estatal Alberto López Rosas aseguró que ninguno de
los elementos que participó en el operativo venía armado. Que el desalojo de
unos 300 estudiantes que se plantaron en la Autopista del Sol comenzó
pacíficamente y que fueron ellos los violentos que incendiaron una gasolinera.


El problema es que, como en aquella ocasión en que un video mostró el horror de
la verdad, ahora otro video y numerosas fotografías son evidencias explícitas:
decenas de comandos de la PFP que rodean a los normalistas con armas largas y
los golpean a patadas en la cara después de someterlos en el piso; luego llegan
refuerzos estatales municipales y ministeriales que disparan parapetados a la
cabeza de los manifestantes; Gabriel Echeverría y Jorge Alexis Herrera murieron
instantáneamente; uno de un balazo en la parte frontal del cráneo, el otro de un
disparo en el cuello. En suma, la barbarie lo mismo de los agentes federales que
de los estatales.


La gran diferencia con Aguas Blancas es que aquí Ángel Heladio Aguirre Rivero se
apresuró al control de daños con el descabezadero en su gobierno al destituir al
procurador López Rosas, así como a Ramón Almonte Borjas, secretario de Seguridad
Pública, y a Ramón Arreola, subsecretario de esa misma dependencia.


Por desgracia para él, no parece suficiente. Hay en Guerrero un montón de
preguntas todavía sin respuesta: ¿por qué el gobernador no recibió oportunamente
a los estudiantes de la Normal Rural de Ayotzinapa? ¿Por qué llegaron primero al
lugar de los hechos los agentes federales? ¿Por qué llevaban armas largas? ¿Por
qué la brutalidad con que los normalistas fueron reprimidos? ¿Por qué y de parte
de quién mintió el procurador? ¿Quién ordenó la golpiza, la tortura y luego la
farsa del AK-47 que obligaron a disparar a Gerardo Torres? ¿De qué sirve el
operativo Guerrero Seguro? ¿Es para combatir a los cárteles de la droga o para
reprimir movimientos sociales?


Es verdad que Guerrero es uno de los estados más bravos del país. Baste recordar
que ahí se nutrieron las guerrillas encabezadas por Genaro Vázquez Rojas y Lucio
Cabañas. Y que ahí se forjaron grupos armados como el Ejército Popular
Revolucionario y sus derivados. Pero también es cierto que Guerrero es el estado
más castigado por la miseria, los cacicazgos, la represión y la Guerra Sucia.
Ahora también por la violencia sanguinaria del crimen organizado.


Por ello, no se vale jugar con fuego en Guerrero. Ni el gobierno federal ni el
gobierno del estado pueden arriesgarse a un incendio de proporciones
impredecibles.


Este caso de represión irracional debe ser aclarado hasta sus últimas
consecuencias. Y ambas instancias de gobierno deben dar respuesta a las
preguntas indignadas que hoy todos planteamos.

Leído en  http://www.eluniversalmas.com.mx/editoriales/2011/12/56157.php

Salvador García - Militares en apuros

El periodista y conductor del espacio radiofónico La Chuleta, expone la situación en que Calderón puso a los militares a su mando al pedirles algo inexistente en las leyes actuales: la declinación del fuero.
En un afán de quedar bien con el tema de los derechos humanos, talón de Aquiles de su gobierno, el presidente Felipe Calderón ordenó el viernes pasado a la PGR y a las Fuerzas Armadas del país (Sedena y Marina) que “transfieran” o “declinen” los juicios militares que tengan en curso contra elementos castrenses que hayan cometido abusos contra población civil para que esos militares sean juzgados por jueces civiles.

El anuncio, aplaudido por los defensores y activistas, justo en el acto en Los Pinos donde entregó el Premio Nacional de Derecho Humanos 2011, cayó pesado como una bomba entre los sectores castrenses, a los que el presidente pidió públicamente declinar el fuero militar y permitir que sus integrantes sean juzgados por la justicia civil.

Calderón ordenó, de facto, a los propios militares y a la PGR la reforma que su gobierno no quiso o no pudo operar en el Congreso para modificar el llamado fuero militar o fuero de guerra, que se contenía en la iniciativa de Ley de Seguridad Nacional que se encuentra en la “congeladora” legislativa ante la falta de acuerdos entre las fracciones parlamentarias.

Amén de la molestia que el tema pudo causar en las Fuerzas Armadas, donde afirman que el fuero militar es la columna de su sistema de disciplina castrense, el presidente puso, literalmente, a parir chayotes a los abogados tanto de PGR como de Sedena y Marina, a los que pidió algo que legalmente parece imposible.

La figura de la “declinación” o la “transferencia” de la competencia de casos del fuero militar al fuero civil no es algo que pueda ordenar el presidente. Primero porque invade atribuciones del Poder Judicial, y segundo porque constitucional y jurídicamente no existe tal “declinación”.

Es decir que tal vez los abogados de la procuraduría, junto con los de Defensa y Marina se verán obligados a decirle al presidente que su ofrecimiento grandilocuente, que buscó congraciarse con los organismos de derechos humanos que tanto han cuestionado su guerra contra el crimen por los abusos y excesos, no es posible de realizar y que no puede llevarse a cabo


José Carreño C- El triunfo del terror: última carta de Calderón


Ex-funcionario salinista, y especializado en los medios, Carreño da una interesante lectura política donde Calderón prefiere reconocer el triunfo del crimen organizado que reconocer el triunfo del PRI

La crisis guerrerense de hoy recuerda que antes que dejar la vía libre al regreso del PRI en el Estado, el Presidente Calderón concertó con el PRD el retiro del candidato panista para dejar ganar al actual gobernador, pese a sus antecedentes en el acto de terror de Aguas Blancas.

Igual que hoy, antes que admitir una victoria del PRI en las presidenciales, el Mandatario opta por reconocer el triunfo del crimen organizado. Se trata de eliminar al que va adelante con el subterfugio de identificarlo con los criminales, a quienes ya proclamó victoriosos en Michoacán.

Y, antes que controlar a los cárteles, amaga con acusaciones judiciales de efecto electoral contra cabezas del antiguo partido dominante.

Ésta puede ser la última carta de Los Pinos y el PAN para cerrar la ventaja del puntero y conservar el poder. El costo a pagar es la aceptación del fracaso de la estrategia gubernamental empeñada en extirpar a las bandas de las estructuras políticas y de seguridad.

El veredicto pronarco

El Presidente pregona que fue vencido en su Estado por el narco, que a ello apuntan las elecciones presidenciales y que tiene pruebas que ya procesa el Ministerio Público. Pero si Calderón prueba que el narco decidió ya una elección y que va por la grande, estaría probando también, en el último año de su presidencia, que incumplió su oferta del primer año de salvar al país de esa amenaza.

Echaría por tierra, además, un mensaje clave de la estrategia de marketing gubernamental: que de no haber mediado la bravura del actual Presidente, su sucesor hubiera sido puesto en la silla por el crimen organizado. El problema es que en los últimos meses de su gobierno el Mandatario sugiere que esa amenaza está más viva que nunca.

Pero con ello también el Presidente está exhibiendo a las Fuerzas Armadas, presentadas semanas atrás como garantes de la exclusión de los criminales de las elecciones, sólo para exponerlas ahora como incapaces de impedir que las bandas del crimen decidan los resultados de las urnas.

Es el intento terminal, desesperado, de impedir otra vez la alternancia en el poder presidencial. Pero a cambio de colocar al lado del crimen al partido puntero en las intenciones de voto en la elección de dentro medio año, Calderón estaría admitiendo que no logró su cometido.

La victoria del miedo

Lo peor en este punto es la exaltación de la eficacia de la estrategia y de los logros de las bandas criminales en el cumplimiento de sus propios cometidos. Porque cuando el Presidente acusa que 50 postulantes a cargos de elección en Michoacán fueron “bajados” de sus aspiraciones por temor a los cárteles, está diciendo que aquéllos fueron vencidos por las victoriosas estrategias de terror de los criminales.

Así, la combinación de la estrategia fallida del Presidente y la estrategia exitosa de los criminales habría logrado no sólo extender el miedo y la parálisis a la mayoría de la población, como lo muestran todas las encuestas, sino, incluso, a la clase política de todos los partidos. Éste sería el caso de los 50 prospectos a cargos de elección que, según Calderón, optaron por la deserción ante el terror en su propio Estado.

Se ha llegado así al extremo de aceptar llanamente la ineficacia en las funciones del Gobierno a cambio de un dudoso imperativo de eficacia electoral. Y no se trata del derecho del gobernante a hacer campaña por su partido, sino de las disonancias que se producen entre discurso de gobierno y discurso de campaña.

Y hay aquí también algo peor para el Presidente que los efectos de poner su discurso y los recursos del Estado, incluyendo la procuración de justicia, al servicio de la eliminación del partido con más intenciones de voto. Y eso sería la pérdida total de credibilidad de ese discurso y de esas acciones del Estado, por su sospechoso paralelismo con la carrera por la presidencia. El Presidente quedaría en el peor de los mundos: a su reconocimiento de la ineficacia de Gobierno sobrevendría la evidencia de su ineficacia electoral.

Leído en http://opinion.informador.com.mx/Rotonda/2011/12/14/el-triunfo-del-terror-ultima-carta-de-calderon/

Presión a la baja en calificaciones para México: Moody's (RECOMENDADO POR RAMNR)


Ramnr nos recomienda esta nota que las graves implicaciones en que nos vamos a ver envueltos con las luchas de lodo...


Eduardo Jardón/El Financiero

México, 14 de diciembre.- El proceso electoral en México en 2012 propiciará
riesgos crediticios en algunos estados y municipios, lo que podría ejercer
presiones a la baja en las calificaciones de deuda.

Así lo advirtió la calificadora de riesgos Moody's en un reporte, en el que
señaló que en los periodos electorales y de cambio de gobierno se observan
aumentos en el gasto, que resultan en un deterioro financiero, seguido de
problemas de liquidez.

Esto, apuntó, hace necesario que se contrate deuda de corto plazo para financiar
el creciente gasto de los gobiernos, y además se observa un impacto negativo en
la voluntad de pago de las obligaciones contratadas en administraciones
anteriores.

Alejandro Olivo, responsable del equipo de análisis subsoberano de la
calificadora, dijo a EL FINANCIERO que estos riesgos son muy serios, por lo que
Moody's va a reaccionar si percibe la presencia de cualquiera de ellos.

"Nuestra reacción va a ser contundente para calificar o modificar a la baja las
perspectivas de aquellos estados o municipios, que en un contexto electoral
permitan un deterioro financiero o un incremento desmesurado en el gasto", dijo.

 El especialista apuntó que la firma va a actuar cuando observe indicios de un
rápido crecimiento en las obligaciones de corto plazo, o ante cualquier problema
en la voluntad de pago de las nuevas administraciones, y si se percibe que la
divulgación de la información financiera no es clara u oportuna.

Añadió que en algunos casos la acción podría resultar en bajas de calificación
en varios niveles.

Gasto electoral

 El especialista prevé que la deuda de los estados y municipios crecerá el
próximo año, pero señaló que la preocupación de la calificadora es que aumenten
los pasivos de corto plazo y los recursos se desvíen a destinos diferentes a la
inversión pública.

 "Me refiero a gasto corriente o a transferencias sociales y apoyos, que pueden
tener objetivos de tipo electoral", afirmó.

 La calificadora detalló que en los últimos 12 meses se han registrado
acontecimientos aislados relacionados con procesos electorales que han afectado
la percepción de riesgo crediticio de los estados y municipios.

 En su opinión, los acontecimientos políticos relacionados con las elecciones o
cambios de gobierno, tienden a exacerbar los riesgos que afectan el adecuado
manejo de las finanzas públicas y la buena gestión.

Estos factores de riesgo, dijo, se reflejan en el grado especulativo que tiene
la mayoría de las calificaciones de los gobiernos subnacionales.

 El 71% de los estados cuenta con calificaciones de grado especulativo, y en los
municipios la cifra es de 87%.

 "Lo que nos preocupa es que en un contexto electoral haya incentivos para
contratar deuda de corto plazo con fines electorales", destacó Olivo.

 A septiembre de este año, el saldo de las obligaciones financieras de estados y
municipios sumó 358,501 millones de pesos, lo que implicó un crecimiento de 124%
respecto a la cifra de 2006.

 Los estados que tendrán elecciones en 2012 y que son calificados por Moody's
son: Chiapas, Guanajuato, Morelos y Tabasco.

 Los municipios que tendrán comicios y que son evaluados por la calificadora
suman 31 y entre ellos se encuentran: Acapulco, Ecatepec, Guadalajara, León,
Mérida, Monterrey, Naucalpan, Toluca, Tlalnepantla y Valle de Chalco. (CMF)

Leído en http://www.elfinanciero.com.mx/index.php/finanzas/52739-presion-a-la-baja-en-calificaciones-para-mexico-moodys

Lorenzo Meyer - A confesión de parte.

El Dr. Meyer infiere que, en palabras de Calderón, el poder del narcotráfico es mayor que cuando inició la lucha vs los narcos.


Mala noticia

En su discurso del 4 de diciembre y luego al rendir homenaje a miembros de su partido que perdieron la vida en accidentes o atentados recientes, Felipe Calderón –el hombre en posesión de los datos más completos sobre el estado que guarda el Estado– dio información que no puede más que apesadumbrar a los ciudadanos mexicanos: el poder e influencia del narcotráfico es hoy mayor que cuando su Administración le declaró informalmente la guerra, hace cinco años. Es verdad que Calderón no dio la información en esos términos, pero se infiere de lo dicho.

El proyecto

Simplificando, se puede decir que desde el inicio el combate armado a las organizaciones de narcotraficantes fue el corazón del proyecto político de Los Pinos. Posiblemente se le concibió tras la elección de julio del 2006 y se anunció apenas 10 días después de la peculiar toma de posesión. La prensa reportó entonces: "El gobierno se declara en 'guerra' contra el hampa; inicia acciones en Michoacán" (La Jornada, 12, diciembre, 2006). Se trataba de la Operación Conjunta Michoacán, un ofensiva sin fecha de término y para la cual se movilizaron 6 mil 714 efectivos del Ejército, la Armada y la Policía (AFI y PFP) apoyados con aviones, helicópteros, barcos, vehículos y hasta perros, pues se proponía sellar las costas y las carreteras del Estado, construir puestos de control, ejecutar órdenes de aprehensión (300), acabar con los plantíos de enervantes y con los puntos de venta de las drogas. No se dijo que Michoacán había sido elegido para este espectacular inicio de sexenio por estar gobernado por el PRD, sino por lo violento: 543 ejecuciones en un año. Al dar a conocer la operación, el Secretario de Gobernación reveló que las primeras acciones se habían iniciado el 1 de diciembre mismo, que la nueva Administración no había perdido ni un día en ponerse a limpiar de narcotraficantes no sólo el estado natal de Calderón, sino al País. Y prueba de ello era que con apenas 11 días de existencia, el nuevo Gobierno ya había decomisado un cargamento de pseudoefedrina –el mayor en la historia–, desmantelado un laboratorio para metanfetaminas (ambos en Michoacán) y capturado un barco con 2.3 toneladas de cocaína en Chiapas.

El informe

"Llegando y haciendo lumbre" parecía ser la consigna calderonista. La idea era empezar el ataque para mostrar decisión, liderazgo y ganar así un apoyo más amplio que el 35.89 por ciento que había votado por el PAN. El poner antes a punto los instrumentos para llevar con éxito esta política –las Fuerzas Armadas, las policías, las estructuras judiciales, los servicios de inteligencia– no se consideró necesario; eso se haría sobre la marcha lo mismo que el diseño de la parte económica, elemento central de este conflicto, cuyas causas primeras y últimas siempre han sido económicas: un negocio donde las cantidades obtenidas llegan a sumar entre 19 mil y 29 mil millones de dólares anuales.

Cinco años más tarde

El Secretario de Gobernación, Francisco Ramírez Acuña, dijo entonces que lo que se había iniciado "será una batalla que nos llevará tiempo". Sin embargo, cinco años después la batalla ya ha consumido más tiempo que la Primera Guerra Mundial y no ve el final del túnel.

El reciente discurso donde Calderón da cuenta del quinto año de su Gobierno puede verse como un parte de guerra: tantos delincuentes "inhabilitados" o extraditados, tantos operativos, decomisos, erradicaciones de plantíos de mariguana y amapola y aseguramientos de armas y dinero, etc. Sin embargo, está el otro lado de la moneda que no apareció en ese informe: el crecimiento sistemático de muertes provocadas por la lucha entre y contra los narcotraficantes o el hecho de que, pese a todo, el mercado nacional e internacional de drogas no registra falta de suministro. Sin embargo, lo más significativo de lo dicho en estos días por Calderón sobre el tema es la admisión de que el narcotráfico ya es capaz de intervenir en los procesos políticos, en las elecciones, y el caso más claro, según el discurso oficial, es Michoacán, justamente el estado donde se puso en marcha la acción armada contra los cárteles de la droga hace cinco años.

Al recordar el 6 de diciembre al Alcalde asesinado de La Piedad, Calderón aceptó como algo inédito en México "y probablemente en el mundo" que los narcotraficantes obligaran a un periódico local a publicar un desplegado donde pedían no votar por el PAN bajo pena de muerte.

Antes, dijo el jefe del Ejecutivo, en los procesos electorales se había llegado a amenazar al votante con quitarle apoyos si no sufragaba de tal o cual manera, pero ahora había un salto cualitativo: se amenazaba con quitarle la vida si votaba de manera contraria a lo ordenado por el narcotráfico.

Calderón hizo referencia a esa amenaza insólita para exigir su condena enérgica por parte de toda la sociedad, demanda absolutamente justa. Sin embargo, en ese discurso desde la cúspide de la estructura formal del poder político está implícita la admisión de que a pesar de que la Federación ha intervenido militar y políticamente en Michoacán –recuérdese la redada de políticos perredistas locales a los que vanamente se intentó procesar por supuestas ligas con el narcotráfico– la situación está peor.

Es la admisión sobreentendida de que pese a la eliminación o arresto de capos y sicarios y decomisos de droga y dinero, los señores de la droga pueden incrementar su grado de desafío. Entonces, tras una gran inversión de energía política, de recursos materiales y humanos y de vidas perdidas, ¿estamos mejor o peor que al inicio?

Otro crimen, otro indicador

El asesinato en Michoacán de Trinidad de la Cruz Crisóstomo, miembro del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD) y defensor de los derechos de la comunidad de Xayakalan en Santa María Ostula, puede verse como otro indicador tan puntual como trágico del terreno ganado por el crimen organizado, de la impotencia de la autoridad y del reto criminal a la sociedad mexicana.

El homicidio del líder campesino a manos de cuatro sicarios ocurrió el mismo día en que Felipe Calderón dio el discurso en "la casa del PAN" admitiendo lo inédito del reto de la criminalidad organizada. Las circunstancias en que ocurrió el sacrificio de don Trinidad subrayan la magnitud creciente del terreno perdido por el Gobierno federal y por los mexicanos pacíficos en su afán por llegar a vivir en un Estado de Derecho.

Para poder reintegrarse a su comunidad, de donde había tenido que salir por amenazas y agresión directa de paramilitares, De la Cruz Crisóstomo se hizo acompañar desde la Ciudad de México por varios miembros del MPJD, todos supuestamente escoltados por la Policía Federal. El líder defensor de los derechos de su comunidad se creyó protegido por la fuerza del Estado, pero no fue así. La Policía Federal, ésa en la que se han invertido cuantiosos recursos públicos para su capacitación y armamento, decidió ser muy prudente y retirarse a un sitio seguro justo cuando su presencia era más necesaria: cuando el grupo de activistas estaba por arribar a Santa María Ostula. Y es que, según lo afirman los acompañantes de don Trinidad, en esa zona de Michoacán ni el Ejército ni la Marina tienen ya presencia y, por lo visto, la Policía Federal tampoco consideró sensato intentar tenerla y dejó sin protección al amenazado y a sus acompañantes civiles, una decisión totalmente impropia de una autoridad responsable, máxime cuando desde julio de 2010 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos había pedido al Estado mexicano que protegiera a todos los miembros de la comunidad por estar bajo asedio de paramilitares (La Jornada, 12 de diciembre).

El atentado de naturaleza política que Calderón justamente lamenta y del que fue víctima el Alcalde de La Piedad fue inesperado, pero el atentado también político en contra del líder comunitario de Santa María Ostula no lo fue y en ese sentido es peor, pues mostró que la autoridad federal es negligente cuando debe defender a ciudadanos de a pie o que tras varias matanzas de federales en Michoacán, éstos, entre cumplir a cabalidad o pecar de prudentes, optaron por lo segundo. Obviamente, el instrumento contra los narcos no es el adecuado.

Finalmente

El Gobierno de Calderón va a concluir sin haber cerrado el capítulo que abrió hace un lustro a tambor batiente y banderas desplegadas. Quién tenga que guiar a México en su siguiente etapa política va a heredar la batalla contra una criminalidad engallada y, a la vez, deberá enfrentar una compleja problemática económica y social cuya solución ni siquiera se ha empezado a intentar.



Leído en http://www.elnorte.com/editoriales/nacional/665/1328061/



Jorge Medellín - Seguridad Nacional y Fuero de Guerra


El especialista en temas militares nos comenta sobre los puntos oscuros de la Ley  de Seguridad Nacional que está por aprobarse en la Cámara de Diputados y sobre la desesperación del gobierno panista para justificar su desastre.

Circula en las redes sociales una intensa campaña con la que se intenta concientizar a alguna porción de la ciudadanía sobre los peligros de que la minuta de la Ley de Seguridad Nacional (LSN), modificada por legisladores federales a partir de percepciones marcadas por la incontrolable actividad criminal, sea aprobada en cualquier momento en una suerte de ofensiva dirigida desde Los Pinos.

La avalancha de sucesos que en los últimos días ha sellado la urgencia y el desasosiego que se vive en torno el presidente Felipe Calderón, cuyo gabinete se disuelve conforme se termina el penúltimo año de su mandato, es el común denominador que envuelve la intentona de aprobar una ley que en sus detalles finos (y no tanto) implicará un recrudecimiento de la violencia oficial hacia la sociedad civil.

Al asesinato de dos jóvenes normalistas de Ayotzinapa, Guerrero, se suman nuevas ejecuciones de ciudadanos, atentados contra mandos policiacos de distintos niveles en el norte del país, reiteradas acusaciones provenientes del extranjero señalando la ineficacia de gobierno panista de Calderón para frenar la delincuencia en cualquiera de sus formas y la insistencia para que mecanismos como el Fuero de Guerra sea urgentemente modificado para evitar más abusos.

La lista de advertencias en las redes sociales es prolija en escenarios de riesgo para la población en caso de que la LSN se apruebe como está en la Cámara de Diputados.

El listado señala lo siguiente en caso de que la LSN se apruebe en estos días:

1. Perderás tus derechos más básicos, como el derecho a la vida y a la privacidad; y podrás ser molestado por la autoridad sin orden para ello.
2. El Ejército y las corporaciones policíacas podrán intervenir tu teléfono o ingresar a tu casa sin orden judicial.
3. Toda la información que tienes en sitios como Facebook, Twitter, Gmail, Hotmail y Yahoo, podrá ser utilizada por las fuerzas de seguridad en tu contra.
4. El Ejército podrá llevar a cabo detenciones arbitrarias, revisiones de personas, autos, teléfonos, sin ningún tipo de orden judicial.
5. Una vez detenid@ (aún si no hiciste nada), será legal que te torturen “para obtener información”.
6. Una llamada anónima podrá ser razón suficiente para que el Ejército, la Marina o la Policía ingresen a tu casa.
7. Se eliminará en los hechos la separación de poderes ya que el presidente, sin consultar a nadie, podrá usar al Ejército en contra de la población cuando lo considere necesario.
8. Los movimientos sociales (como los estudiantiles, laborales o electorales) podrán ser considerados como“obstáculos” para la seguridad nacional, y por lo mismo, podrán ser reprimidos por el Ejército.
9. No podrás denunciar el abuso de las autoridades ya que entonces estarías “impidiendo” actuar a las autoridades, y por ese sólo hecho se te podría considerar una amenaza para la seguridad nacional.

Lo cierto es que muchos de estos puntos ocurren regularmente en varios estados del país. Los abusos y crímenes de militares y policías federales, estatales y municipales han sido la moneda de cambio en la guerra calderonista contra el narco.

El asesinato de civiles inocentes en retenes militares o durante operaciones contra cárteles ha dado pie a la intervención de instancias nacionales y extranjeras demandando el esclarecimiento de estos casos y penas carcelarias para los responsables uniformados de estos actos y para sus jefes en la escala de mando.

La modificación el Fuer de Guerra ordenada por Calderón comienza a dar frutos, pero esto ha sido posible gracias a la presión nacional y sobre todo internacional para que en México se dé el pleno respeto a los derechos humanos, sobre todo en el contexto de la cruenta lucha antidrogas que ha cobrado decenas de miles de muertos.

No ha habido abierta voluntad del gobierno federal ni de las instituciones involucradas para llevar estos cambios sustanciales adelante. En tanto, la posible aprobación de la LSN se convierte más en una sombra, una amenaza que oficializaría los abusos y daría manga ancha a una acción desesperada del panismo en el poder para justificar en alguna medida el desastre en el que se convirtió un mandato que prometió miles de empleos y a cambio ha dejado muertos, baja calidad educativa, amento en el consumo de drogas, miles de jóvenes desocupados, más de 30 mil millones de dólares lavados por el narco en México e incertidumbre como moneda de cambio.

Carlos Marín - Vega libró una ridícula insidia.


El Director General de Milenio, hace una defensa del ex-secretario de la Función Publica que buscará ser Senador por el PAN
Salvador Vega Casillas deja la Secretaría federal de la Función Pública para buscar una senaduría por el PAN.
Entrega buenas cuentas en investigaciones, inhabilitaciones y encarcelamientos (casi dos mil 800 denuncias penales contra ex funcionarios corruptos de instituciones tradicionalmente intocadas: Pemex, CFE, PGR…), diez veces más que en anteriores gestiones.
Para desconsuelo de quienes alentaron una miserable campaña en su contra, no se va por el perverso exhorto diputadil al presidente Felipe Calderón para que lo separara del cargo.
Tampoco prosperó la insidiosa versión de que su esposa (la abogada Gladis López Blanco) “extorsionaba” a propietarios de gasolineras (y atesoraba el supuesto botín en una cuenta mancomunada con su marido) cuando fue (durante menos de 14 meses) subprocuradora federal del Consumidor.
Lo más patético del caso es que una mayoría de diputados federales le haya creído al verde Pablo Escudero, ignorante supino de que los probables delitos de que habló fueron cometidos ¡dos años después! de que la señora dejó de servir en la Profeco.

Ciro Gómez - Javier Sicilia es el personaje del año.


El conductor del noticiero del prime time en Milenio Tv afirma que Sicilia es el personaje del año.
El 2011 fue rico en personajes. Figura del año podría ser el presidente Calderón: por sus decisiones, discurso, tenacidad y repunte en la aceptación ciudadana.
El regreso, y la forma en que lo hizo, perfilaría también a Andrés Manuel López Obrador. La manera en que declinó a la candidatura presidencial, más su exitosa gestión en el DF harían lo propio con Marcelo Ebrard. Josefina Vázquez Mota podría levantar la mano. Ni qué decir de Enrique Peña Nieto.
Pero el personaje del año es Javier Sicilia: el hombre que tuvo la virtud de levantarse rápidamente de una tragedia íntima para darle voz y rostro a miles de víctimas de los tiempos de la guerra. Y el talento para transitar de un estéril “estamos hasta la madre”, a un prometedor esfuerzo de
reconciliación.
A Javier se le deberá, en buena medida, la fiscalía de la PGR para atender a las víctimas y el prodigio de que mexicanos enfrentados cambiaran las descalificaciones por abrazos y besos. Así fueran fugaces.
Supo narrar el dolor y la atrocidad, y explotar contra las instituciones podridas. No claudicó ni abarató una idea. Chocó con el poder las veces necesarias, pero lo hizo con espíritu renovador y visión de futuro.
Enseñó, además, que la derrota de una lucha que encarna el sufrimiento de miles era salir con las manos vacías por causa de supersticiones políticas, ideológicas. Él y los suyos no se extraviaron en las típicas altercaciones justicieras. Creo que si no lo hicieron, es porque el néctar de este movimiento parido por la muerte es la vida.
Desde su desgracia, Javier Sicilia hizo ver que mexicanos de buena fe no pueden estar en guerra con otros mexicanos de buena fe.
Es el personaje del 2012.

Leo Zuckermann - Los spots que estarían al aire (y no están)

El analista critica la ley electoral actual que impide las campañas negativas y se imagina algunos spots de ese tipo.

En nuestra democracia está prohibido que partidos, candidatos, organizaciones y/o ciudadanos compren spots de radio y televisión para hablar de política. Además, están prohibidas las campañas negativas. Muchos creen que estas medidas son adecuadas para tener una democracia equitativa. Yo, en cambio, pienso que son una aberración ya que limitan una verdadera competencia electoral.

Imaginemos, por ejemplo, que dichas restricciones no existieran. En este mismo momento habría spots sobre el dislate que tuvo Peña Nieto en la FIL de Guadalajara. No soy un “creativo” (como llaman en una agencia de publicidad a los que diseñan spots) pero tampoco hay que serlo para imaginar el tipo de anuncio que estaría hoy al aire. Sólo habría que poner las imágenes y el audio de Peña cuando le preguntaron sobre los tres libros que lo han marcado en su vida. Una respuesta lamentable llena de olvidos, confusiones y tartamudeos. Un enredo de pena ajena. Al final de esta escena, en letras grandes aparecería: “¿Este es el tipo de Presidente que queremos? ¿Alguien que nunca ha leído un libro?”

Porque las campañas negativas suelen ser rudas. A lo mejor Peña sí ha leído libros en su vida. Pero su error nos lleva a pensar que no y esto, naturalmente, tendría que ser aprovechado por sus adversarios. El problema es que en México, debido a nuestra ley electoral, nunca vamos a poder ver ese spot.

Se me ocurre otro más. A cuadro sale una gráfica de cómo creció la deuda de Coahuila durante la gestión de Humberto Moreira como gobernador de ese estado. Se intercala con declaraciones burlonas del ex presidente del PRI. Se informa cómo se firmaron documentos falsos para endeudar a los coahuilenses. Más declaraciones chuscas de Moreira. Y el remate: “Este es el PRI que quiere regresar al poder: el viejo PRI, el de las deudas, las trampas y las burlas”. Pero, una vez más, debido a la legislación electoral vigente, no vamos a ver este spot.

Un tercero. Se oyen las respuestas de Peña que no sabe cuánto cuestan ciertos artículos de la canasta básica y su declaración acerca del precio de la tortilla: “No soy la señora de la casa”. A continuación una voz en off informa que así ve el candidato del PRI a las mujeres de México: como “señoras de la casa”. Saldría, luego, una destacada mujer diciendo que eso le preocupa en caso de que gane Peña: que las mujeres regresen a las épocas donde se esperaba que fueran amas de casa. Y el remate: “El PRI de Peña es el viejo PRI, el de los hombres que desgobernaron a México de manera autoritaria”. Efectivamente: no lo vamos a ver gracias a la ley electoral vigente.

Más en http://www.excelsior.com.mx/index.php?m=nota&seccion=opinion&cat=11&id_nota=795100

Pablo Hiriart - Bajar a Josefina

El Director del diario La Razón, cree que en el PAN la elección interna comienza a parecerse a las del PRD y defiende a Vázquez Mota.

Si a Josefina la quieren bajar a pedradas, en el pecado llevarán la penitencia.

Las encuestas la señalan como la amplia favorita de los militantes del PAN, de los adherentes y de los ciudadanos sin partido.

Se trata de una ventaja mayúscula e irreversible (por las buenas) la que muestra la encuesta de Reforma.

En población abierta tiene 62 por ciento de simpatía, contra 15 por ciento de Ernesto Cordero y 14 por ciento de Santiago Creel. Entre miembros activos es 66 contra 16 y diez. Y entre adherentes gana 58 contra 14 y 20, respectivamente.

Entonces, ¿para qué el desgaste?

Es un asunto entre panistas, es cierto. Pero desde afuera se ve con más claridad y menos pasión: quieren llevar la elección hasta febrero para ver si la pueden bajar a golpes.

La rijosidad de grupos al interior de Acción Nacional contra su aspirante estrella, los hace parecerse más al PRD que a su propia historia.

Acción Nacional ganó en 2000 porque la población estaba cansada del PRI y se buscaba el cambio. Un cambio con rumbo, sin pleitos ni fracturas en la sociedad. Esa alternativa era el PAN.

Ahora que el PAN gobierna quiere imponer un sello de confrontación, belicoso y polarizador. Ese camino los va a llevar a la derrota.

Es altamente llamativo que en el partido que se define como generoso y humanista, se haya desatado un canibalismo que de seguro envidiarán en las tribus de la ultra izquierda.

Vázquez Mota desata pasiones al interior del PAN y del gobierno.

¿Qué les hizo? ¿Cuál es el agravio?

Sería bueno que lo aclararan, porque es algo que los ajenos a ese partido desconocemos. Pero debe ser un asunto muy serio para que la traten como la han tratado.

Más en http://www.razon.com.mx/spip.php?page=columnista&id_article=102945