Peña Nieto en Palacio Nacional.
Foto: Xinhua / Pedro Mera
Foto: Xinhua / Pedro Mera
La presidencia de la República convocó hoy a un acto en el que se publicitaría el cumplimiento de la declaración patrimonial, que es una obligación de todo servidor público.
Con fecha de 15 de enero, la declaración subida a la plataforma Declaranet, establece que Peña Nieto cuenta con cuatro casas, cuatro terrenos, un departamento, obras de arte, joyas, además de poseer monedas y metales, así como cuentas bancarias y fondos de inversión.
La página electrónica de la Presidencia de la República colocó hoy mismo el documento que aparece en Declaranet y donde se establece que el mandatario gana 193 mil 478 pesos mensuales.
Sin embargo, las propiedades y joyas, monedas, cuentas bancarias e inversiones, no son explícitos; es decir, se puede saber que tiene esas posesiones, pero se desconoce, por ejemplo, cuántas joyas y obras de arte tiene, así como cuánto cuestan; no se sabe cuánto tiene en ahorros ni en fondos de inversión ni acciones.
Según la declaración patrimonial del presidente, la mayoría de sus posesiones fueron hechas por donación o por herencia. Por ejemplo, en el caso de los bienes raíces, sólo dos fueron compradas, que corresponden a una casa adquirida de contado en 1982 y otra en 2005. En este caso, llama la atención la propiedad comprada en octubre de 1982, pues la habría adquirido de contado cuando apenas tenía 16 años de edad.
Ésta última es un terreno de 560 metros cuadrados y 492 metros cuadrados de construcción, adquirida de contado el 25 de octubre de 1982. La otra casa fue comprada de contado el 27 de diciembre de 2005.
El resto de casas y terrenos fueron adquiridos por donación, principalmente entre 2009 y 2011, excepto el departamento, heredado en 2001 y dos terrenos, que recibió en donación en 1988 y 1989 que en conjunto suman unas 2.5 hectáreas.
A pesar de las dificultades para poder estimar la fortuna del presidente, en su mensaje de hoy recordó que el pasado 30 de marzo, en su primer acto de campaña, firmó el compromiso de hacer pública su declaración patrimonial cada año, lo mismo que el resto de su gabinete.
“Cumplo así, no sólo con un mandato legal, también con una obligación ética que normará los actos de quienes somos parte de este equipo de trabajo en la presidencia de la República, que tiene que ver con la rendición de cuentas”.
Leído en http://www.proceso.com.mx/?p=330806
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