LA HISTORIA EN BREVECiro Gómez Leyva
2013-01-29 •
El reporte dado a conocer ayer por la Unidad de Fiscalización del IFE, que determina que el único candidato presidencial que rebasó los topes de campaña fue Andrés Manuel López Obrador, es inverosímil. No porque López Obrador no haya gastado 400 millones de pesos, sino porque el ganador, Enrique Peña Nieto, ni siquiera habría llegado al tope de 336 millones.
Para quienes recorrieron el país y constataron cómo los dos (y también Josefina Vázquez Mota) estaban en miles de paredes, espectaculares, productos, panfletos, etcétera, las cantidades sonarán a tomadura de pelo. Para quienes tienen idea del costo de mercado de esa propaganda, debe ser una burla.
En todo caso, el PRI de Peña Nieto contrató un mejor equipo contable que la alianza de López Obrador a la hora de desplegar las inagotables cuentas de microperforados, costos unitarios, relaciones detalladas, contratos de prestación de servicios, medidas exactas de bardas y demás documentos que conforman el file de gastos de campaña.
Por ese mal trabajo contable, el PRD, PT y Movimiento Ciudadano tendrán, por lo pronto, que prorratear una multa de 130 millones de pesos. Protestarán, seguramente apelarán. Y todo este capítulo, para qué, si vemos que 13 años después del Pemexgate y los Amigos de Fox, la calidad del dinero en las campañas sigue siendo un tema truculento.
¿No será hora de comenzar a liberar las formas de financiamiento y gasto en vez de persistir con los ineficaces mecanismos de restricción? Porque eso de que solo a López Obrador se le pasó la mano, no se los va a comprar ni Dios Padre.
Leído en http://www.milenio.com/cdb/doc/impreso/9170936
Leído en http://www.milenio.com/cdb/doc/impreso/9170936
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Por favor, sean civilizados.