Junto con ese gasto electoral millonario, realizado como campaña fuera de los tiempos electorales y fuera de la ley electoral, hubo otro gasto también de millones de pesos para promocionar la imagen del gobernador de Chiapas, Manuel Velasco que, con el pretexto de su segundo informe de gobierno, en el segundo estado más pobre del país, desplegó una campaña de publicidad y propaganda que lo equiparaba casi a un candidato presidencial, al tiempo que varios
diputados y senadores del PVEM, bajo la argucia de sus informes de labores, también hicieron campaña machacando el lema de que “el Verde sí Cumple”.
Todo indica que no. La estrategia para posicionar al Verde se diseñó mucho más arriba, en otro lugar verde. Desde Los Pinos y la Secretaría de Gobernación, se trazó la estrategia que buscaba posicionar al principal aliado del PRI y hacerlo crecer de manera inmediata en la intención del voto. La razón era un bien afinado cálculo político: si el PRI estaba cayendo en las preferencias de los electores, derivado de los escándalos de corrupción como la “casa blanca” de las
Lomas o de la agitación social producida por la masacre de Ayotzinapa, había que compensar esa caída y asegurar así la próxima mayoría, aunque sea simple pero mayoría, en la Cámara de Diputados.
Por eso no fue casual que cuando, otros partidos como el PRD y el PAN protestaron y pidieron al flamante INE investigar y sancionar al PVEM por “actos anticipados de campaña”, los consejeros del nuevo instituto, comandado por Lorenzo Córdova, le han dado hasta ahora largas a la queja y, en casi dos meses, lo único que han hecho es pedir a las cadenas de cine de Cinemex y Cinépolis retirar los anuncios del Verde, aunque las empresas no hicieron caso y se siguen
trasmitiendo.
Incluso, el caso llegó al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, donde sus magistrados concluyeron el 30 de diciembre de 2014 que “la campaña Verde sí cumple, constituyó una estrategia de ese partido para posicionarse rumbo a las elecciones del 2015 con recursos públicos” y cuestionó las campañas de promoción realizadas por diputados y senadores de ese partido, pero tampoco emitieron ninguna sanción contra el PVEM y lo único que hicieron fue
remitir el asunto a las Contralorías de la Cámara de Diputados y el Senado para que investigaran si la promoción fue ilegal.
Era imposible no voltear a las principales avenidas de las ciudades más importantes del país y no ver uno de tantos espectaculares con la leyenda “El Verde Sí cumple”, hablando de las bondades de leyes supuestamente aprobadas por los legisladores de ese partido en el Congreso. “Cadena perpetua para secuestradores (‘que se pudran en la cárcel’)”, “Prohibimos los circos con animales”, “El Verde ya nos quitó las cuotas escolares”, todos mensajes sumamente populares
y perfectamente diseñados que penetraron rápidamente entre la población. Aún hoy pueden verse profusamente los mensajes del Verde en el paisaje urbano o escucharse, en un bombardeo inmisericorde, lo mismo en las salas de Cine que en la radio y la televisión, algunas pagadas con tiempos oficiales pero otras (como la publicidad en cines) con publicidad privada. Nada de eso viola la ley, dijo el INE.
En Tuxtla Gutiérrez, lo mismo que en Comitán o en San Cristóbal de las Casas, la campaña ostentosa de Manuel Velasco es más que evidente, mientras el gobernador recorre el estado en su Cadillac Escalade negra (1 millón 341 mil pesos), de la que desciende para abrazar a niños pobres, a mujeres necesitadas, a campesinos que apenas sobreviven. Además de Anahí, su acompañante televisiva y futura esposa, a Velasco siempre le acompaña la música de Julión
Alvárez, otra estrella del Canal de las Estrellas donde su imagen se promociona. “Chiapas, nos une tu grandeza.”
NADA PARA AMLO. Cuando desde el Gobierno federal trazaron la estrategia para reposicionar al PVEM sabían muy bien su objetivo: si el PRI puede caer varios puntos en las preferencias electorales y perder hasta 100 distritos con sus diputaciones federales, por el desgaste del gobierno de Peña Nieto y la mala situación de la economía, esa pérdida no puede quedar toda en la oposición. El temor se centraba en dos actores: el primero el PAN, que es el que más ha
crecido en las encuestas, y el segundo, en que más preocupa por ser el enemigo político principal del presidente: Andrés Manuel López Obrador y Morena.
El temor a que creciera López Obrador y su nuevo partido, a partir de la caída esperada del PRI, es uno de los móviles principales en la estrategia de hacer crecer al Partido Verde, y para ello no se escatimaron recursos.
Hoy en las cúpulas del gobierno peñista y del PRI están, por eso, más que tranquilos. Calculan que lo que pierda el priismo en los próximos comicios –donde los escenarios más optimistas le conceden al partido gobernante unos 100 distritos de mayoría— se va a repartir entre varios actores, y que en ese reparto, después de sus 24 mil “spots” y su gasto millonario, el PVEM se llevará una buena parte, con lo que la estimación es que al final el escenario y la relación de
fuerzas en la Cámara de Diputados se mantenga casi igual que en la actual legislatura: una mayoría simple del PRI-PVEM formada por más de 200 diputados, una fracción del PAN que podría llegar a 150 diputados, una bancada del PRD disminuida con unos 70 legisladores, y una bancada de Morena que no rebase los 50 diputados.
NOTAS INDISCRETAS… El senador Ernesto Gándara se comunicó con esta columna. Confirmó que sí se reunió con Manuel Espino Barrientos en diciembre pasado a petición del dirigente panista. Pero se trató, dijo de una reunión de carácter informal y en la que nunca hubo una propuesta expresa para que fuera candidato a gobernador de Sonora por el Movimiento Ciudadano. Más bien fue Espino, dijo, quien deslizó esa posibilidad, pero de su parte, asegura el priista,
no hubo ninguna respuesta afirmativa ni siquiera condicionada a un aval del Gobierno federal… En PRI-DF las cosas no andan bien y no hay seriedad en los procesos internos para elegir candidatos. Al menos eso dicen varios aspirantes a jefe de legacional de Magdalena Contreras desde que vieron que se registró como aspirante el diputado Fernando Mercado Guaida. Resulta que Mercado es, al mismo tiempo que aspirante, presidente de la Comisión de Procesos
Internos del PRI-DF, y la pregunta que se hacen otros precandidatos es ¿cómo podrá ser imparcial a la hora de elegir si es juez y parte? Además de eso, a Fernando Mercado lo ubican totalmente como gente de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre, quien a pesar de averiguaciones e investigaciones penales en su contra sigue siendo quien manda en el PRI-DF. Que alguien le avise al señor Mauricio López porque él se presenta como “dirigente” formal del partido…
Leído en http://www.zocalo.com.mx/seccion/opinion-articulo/la-estrategia-verde-de-los-pinos-1423386039
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Por favor, sean civilizados.