Simón Vargas I 10/07/2013 ,12:00 am
Ayer fue presentada la edición 2013 del Barómetro Global de la Corrupción, ejercicio estadístico que desde el 2003 analiza las causas y las variables que posibilitan la medición de los avances en materia de combate a la corrupción a nivel global. Más de 114 mil personas en 107 países contribuyeron con sus opiniones y experiencias relativas al soborno y respecto de la situación actual de la corrupción en su nación.
Transparencia Internacional señala que la corrupción afecta a millones de personas desde su nacimiento hasta su muerte, y esta constituye una amenaza real, principalmente para aquellas que sobreviven con menos de 2 dólares diarios y para las madres, ya que el costo que representa el soborno puede ponerlos en la encrucijada de tener que elegir entre tener salud y mitigar el hambre, o pagar colegiaturas y comprar zapatos.
Asimismo, destaca que las personas además de pagar el costo de la corrupción directamente, ven afectada su calidad de vida. Y es que “cuando los grupos de poder ejercen influencia sobre las decisiones de gobierno, o cuando los fondos públicos se desvían a las arcas de la élite política, la gente común sufre”.
En este sentido, el reporte indica que a nivel global al menos 27 por ciento de los encuestados reportó haber pagado algún soborno en el último año, al interactuar con instituciones públicas. En tanto, alrededor de 31 por ciento pagó sobornos a la policía, y 24 por ciento al poder judicial, mientras que el 54 por ciento cree que los gobiernos están integrados en su mayoría por grupos que actúan a favor de sus propios intereses y no por el beneficio de los ciudadanos.
Al unificar el universo de resultados en lo que respecta a las instituciones más afectadas por la corrupción, los partidos políticos ocuparon la primera posición, al obtener sólo 3.8 puntos de 5 posibles en la escala –donde 1 significa “nada corrupto”, y 5 “muy corrupto”–, seguidos de la policía (3.7 puntos), y del Congreso, el Poder Judicial y Funcionarios públicos (3.6 puntos) empatados en la tercera posición. Cabe señalar que en el extremo opuesto se encuentran las Entidades religiosas (2.6), las ONG’s (2.7), y el Ejército (2.8).
En el caso de nuestro país, 52 por ciento de los mexicanos consideró que en los últimos dos años el nivel de corrupción se ha incrementado mucho; 21 por ciento estimó que se mantuvo igual; y 19 por ciento que seincrementó un poco. Paralelamente, un 79 por ciento de los encuestados cree que la corrupción es un problema serio en el sector público, cifra superior a la respuesta del 14 y 5 por ciento que aceptaron que ésta representa unproblema y un pequeño problema, respectivamente.
Por otra parte, 62 por ciento indicó que “el gobierno está integrado por instituciones que actúan en favor de sus propios intereses”, al combinar las respuestas en su totalidad y en gran medida; y llama la atención que 79 por ciento estima que las acciones del gobierno contra la corrupción son muy ineficaces o ineficaces, y que sólo 11 por ciento considera que éstas son eficaces o muy eficaces.
En lo que respecta a las instituciones más afectadas por la corrupción en México, los datos son contundentes: 91 por ciento cree que son los Partidos políticos; 90 por ciento que lo es la Policía; 87 por ciento, los Servidores públicos; 83 por ciento, el Congreso; y 80 por ciento, el Poder Judicial. Mientras que para los mexicanos, el Ejércitoy el Sistema de Salud (42 por ciento), así como el Sistema Educativo, las Entidades Religiosas, y las ONG’s (43 por ciento), son las menos afectadas.
En materia de sobornos, 61 por ciento aceptó haber pagado sobornos a la policía, 55 por ciento al Poder Judicial, 31 a autoridades encargadas de expedir permisos de construcción o agilizar trámites relativos a la tenencia de la tierra. Finalmente, el 81 por ciento manifestó estar de acuerdo en que el ciudadano común puede marcar la diferencia en la lucha contra la corrupción, y sólo 19 por ciento indicó estar en desacuerdo.
Ante este panorama, es imprescindible fortalecer y garantizar el estado de derecho, así como replantear la estrategia de la lucha contra la corrupción a través de la promoción de nuevas iniciativas de ley que endurezcan las penas, y posibiliten la prevención, detección e investigación de actos de corrupción. En este contexto, como lo indicó la presidenta de Transparencia Internacional, Huguette Labelle, “los gobiernos deben considerar seriamente el repudio a la corrupción por parte de la ciudadanía y responder con medidas concretas para reforzar la transparencia y la rendición de cuentas”.
Simón Vargas Aguilar
Presidente de Educación y Formación con Valores AC, y Analista en temas de Seguridad, Educación y Justicia
simon.9@prodigy.net.mx
@simonvargasa
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http://www.ejecentral.com.mx/barometro-global-de-la-corrupcion-2013/
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