Reforma energética, las líneas del debate
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Dentro de los acuerdos establecidos en el Pacto por México, uno de los que generan más polémica es el tema de la reforma energética . Los tres principales partidos políticos en el país (PAN, PRD, PRI) han definido tiempos para la discusión del tema en la agenda pública.
Dentro de los acuerdos establecidos en el Pacto por México, uno de los que generan más polémica es el tema de la reforma energética[1]. Los tres principales partidos políticos en el país (PAN, PRD, PRI) han definido tiempos para la discusión del tema en la agenda pública.
El Partido de la Revolución Democrática (PRD) decidió realizar una consulta nacional del 25 de agosto al 01 de septiembre para definir su postura[2], mientras que Acción Nacional presentó el pasado 18 de julio siete líneas generales y objetivos qué debía incluir la misma[3], sin embargo, la propuesta oficial de dicho partido se realizará hasta el 18 de agosto[4], se espera que también en ese mes el Revolucionario Institucional dé a conocer su proyecto.
El debate de la reforma energética no es menor, las posturas de algunos actores políticos en el tema están claramente definidas, Jesús Zambrano, líder nacional del PRD, ha señalado en diversas intervenciones, que este partido aboga por la modernización de Pemex, sin apoyar la modificación de los artículos 25, 27 y 28 constitucional que hablan sobre el carácter jurídico de dicha empresa paraestatal[5], la cual cabe recordar fue expropiada en 1938[6].
Gustavo Madero, líder del Partido Acción Nacional se ha manifestado a favor de la inversión privada en algunas actividades en las que Pemex y la CFE no son competitivas ni eficientes[7], en tanto que el ejecutivo, de acuerdo con lo establecido en Pacto por México propone conservar Pemex como propiedad del Estado, pero con la posibilidad de que haya competencia, así de acuerdo con lo establecido en el documento del Pacto por México “se buscan las reformas necesarias para crear un entorno de competencia en los procesos económicos de refinación, petroquímica y transporte de hidrocarburos, sin privatizar las instalaciones de PEMEX”
En la esfera pública, el tema de la inversión privada en Pemex y en la industria eléctrica, se ha desarrollado en un ambiente donde las discusiones muestran tintes pasionales, ya sea por cuestiones históricas, ideológicas o por la afectación de intereses, la relación de la empresa con el estado mexicano representa un reto más en el debate, han existido otros intentos de modificación al estatus de estas empresas los cuales se quedaron sólo en la discusión de las iniciativas (2008).
Sin embargo, existen datos preocupantes sobre el estado fiscal de estas empresas del estado (Pemex, CFE), así como de su eficiencia, desempeño, competitividad y sustentabilidad. De acuerdo con cifras presentadas por el Maestro Carlos Huerta Durán, asesor externo de Pemex, Petróleos Mexicanos ha descendido cinco lugares en el ranking de posicionamiento de empresas petroleras a nivel internacional, pasando del sexto al onceavo lugar en un lapso de doce años (2000-2012), Huerta Durán indica además que el 70% de las ventas totales de esta empresa son absorbidas por la Secretaría de Hacienda[8], un elemento adicional es que se espera que dentro de 20 años Estados Unidos —nuestro principal socio comercial—sea autosuficiente hecho que tendría un impacto de gran escala en nuestra economía.
Distintos analistas coinciden en señalar que una reforma energética integral debe incluir modificaciones a Pemex, CFE, cuestiones fiscales que tocarían a la Secretaría de Hacienda, medidas ecológicas concernientes a la Secretaría de Medio Ambiente e incluso de seguridad[9]
Entre los mexicanos, el tema de ampliar la participación de capital en la industria eléctrica como en Pemex representa unissue, de acuerdo con la más reciente encuesta nacional en vivienda realizada por Parametría, 47% se manifestó en contra de ampliar la participación del capital privado en la industria eléctrica, mientras que 49% afirmó lo mismo en cuanto a la inversión privada en Pemex, sólo 18% y 16% respectivamente se manifestaron a favor de dicha inversión.
Existen cambios de opinión en el tema a lo largo del tiempo, en la serie histórica realizada por Parametría podemos observar que en 2002 cuando realizamos por primera vez la pregunta sobre la participación de capital privado en la industria eléctrica, el 60% de los encuestados se manifestó en contra, para 2013 ese porcentaje llegó al 47% —13 puntos por debajo de la cifra inicial —en 2005 fue el año donde menos personas estuvieron en contra de que privados pudieran invertir en la industria eléctrica el porcentaje llegó al 37%.
Las posturas que se definen en contra de la medida han oscilado de 60% a 37% a lo largo de once años y aquellas que se manifiestan a favor de ampliar el capital privado en la industria eléctrica han fluctuado de 30% a 18% en el mismo lapso de tiempo.
En el caso de Pemex, la postura que está en contra de ampliar el capital privado en la empresa es mayor, 49% así lo afirmó, sólo 16% se pronuncia a favor. Los porcentajes a favor de la medida han ido descendiendo desde 2008, año en el que un histórico 30% la apoyó.
Las opiniones que se posicionan en contra de ampliar la participación de capital privado en Petróleos Mexicanos han oscilado entre 55% y 37% a lo largo de diez años. Cabe mencionar que tanto en la industria eléctrica como en Pemex ha aumentado el porcentaje de personas que no están ni a favor ni en contra de que capital privado pueda invertir en estas empresas públicas.
Para los mexicanos el permitir que capital privado invierta en la industria petrolera significa que Pemex será privatizado, así lo refieren casi seis de cada diez entrevistados (59%), esta percepción ha ido en aumento desde 2007, ese año un 49% asociaba la inversión privada con la acción de privatizar, sólo 17% dijo que aun ampliando el número de agentes en la inversión Pemex seguiría siendo una empresa controlada por el estado.
Parte del rechazo que tienen los mexicanos acerca de permitir la inversión de capital privado en el ámbito de la electricidad puede ser explicada por los pocos beneficios que consideran les traería esta política, 53% dijo que sería perjudicado si se permite a privados invertir en la industria eléctrica, sólo 15% vio un beneficio en ello, los encuestados tampoco consideran que se beneficie al país permitiendo esta inversión, 38% considera que México sería perjudicado contra 24% que si espera un beneficio.
En contraste, las personas consideran que los empresarios (71%) y el gobierno (63%) si se beneficiarían al permitir que agentes privados inviertan en la industria eléctrica.
Existen tres diferentes ejercicios estadísticos que han preguntado a la opinión pública su postura en el tema (CIDE, Cesop, Parametría) en todos ellos quienes se manifiestan en desacuerdo con la posibilidad de que privados puedan invertir en Pemex ha sido mayor, parte de la explicación para entender estos datos puede venir de la percepción de lo que significa para los mexicanos la inversión privada, la cual está asociada fuertemente con la privatización de la empresa, es decir que el estado pierda el control de la misma.
Aunado a ello podemos observar que los entrevistados no consideran que abrir este sector a la inversión de terceros atraiga beneficios para ellos, estos elementos deben ser considerados por los actores que están impulsando una posible reforma energética, sobre todo una que toque temas fiscales, ambientales e institucionales.
Esta información también puede ser consultada en los espacios de Parametría en: Once Noticias, de Canal Once.
Derechos Reservados © Parametría, S.A. de C.V., Calle Benjamín Hill No. 185, Colonia Hipódromo Condesa, C.P. 06170, México D.F. 2012.
La información o resultados presentados a continuación pueden ser libremente publicados, citados y, en general, usados, siempre y cuando se cite la fuente de este estudio.
Fuentes:
PARAMETRÍA. Encuesta Nacional en vivienda. Representatividad: Nacional. Número de entrevistas: 800 cuestionarios hechos a personas de 18 años en adelante, con credencial para votar que residan en el lugar de interés al momento de la entrevista. Fecha de levantamiento: del 13 al 16 de julio de 2013. Nivel de confianza estadística: 95 %. Margen de error: (+/-) 3.5 % Diseño, muestreo, operativo de campo y análisis: Parametría SA de CV. Método de muestreo: Aleatorio sistemático con probabilidad proporcional al tamaño. Unidad de muestreo: Las secciones electorales reportadas por el IFE.
PACTO POR MÉXICO. Acuerdos para el crecimiento económico, el empleo y la competitividad
http://www.parametria.com.mx/DetalleEstudio.php?E=4560#.UfrSKbny7Ec.twitter
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