Esta norma ha sido desarrollada por un grupo de mexicanos encabezados por Carlos Gadsden Carrasco, el ex director general del Instituto Nacional para el Federalismo y Desarrollo Municipal (INAFED).
Recordemos qué es ISO y qué es una norma ISO.
ISO son las siglas en inglés de la Organización Internacional para la Estandarización (International Organization for Standarization), la cual en su página web www.iso.or se describe “como el desarrollador más grande del mundo de Estándares Internacionales voluntarios. Estos Estándares Internacionales proporcionan las especificaciones más adelantadas para productos, servicios y buenas prácticas, ayudando a que la industria sea más eficiente y atractiva. Desarrollados por medio del consenso internacional, ayudan a derribar las barreras al comercio internacional”.
Fundada en 1947, la ISO ha publicado desde entonces 19,500 Estándares Internacionales que abarcan casi todos los aspectos de la tecnología y los negocios. Desde la seguridad de los alimentos hasta computadoras y desde la agricultura a los cuidados de salud, los Estándares Internacionales ISO impactan nuestras vidas”.
Con oficinas centrales en Ginebra, Suiza, la ISO está constituida por una red de organizaciones de estándares nacionales. Estas organizaciones representan a la ISO en sus respectivos países. En México la organización es la Dirección General de Normas (DGN) de la Secretaría de Economía, que es “responsable de coordinar el sistema de normalización y evaluación de la conformidad para fomentar la competitividad de la industria y el comercio en el ámbito nacional e internacional”. Entre algunas de las funciones de la DGN está la de “formular, revisar, expedir, modificar, cancelar y difundir las normas oficiales mexicanas (NOM)”.
La ISO explica en qué consiste la ISO 18091:2014: “El objetivo de la ISO 18091:2014 es proporcionarle a los gobiernos locales las directrices para lograr resultados confiables por medio de la aplicación de la ISO 9001:2008 de manera integral. Todas las directrices indicadas en la ISO 18091:2014 son genéricas y aplicables a todos los gobiernos locales, sin importar su tipo, tamaño y productos/servicios que ofrece. El usuario puede aplicar las directrices contenidas en la ISO 18091:2014 en su totalidad o parcialmente, como sea necesario, para lograr los máximos beneficios”.
Más adelante, la ISO añade que “para que un gobierno local sea considerado confiable, debería asegurar las condiciones mínimas de fiabilidad de los procesos que son necesarios para proveer los servicios requeridos por los ciudadanos de manera consistente y confiable. Los procesos de todos los gobiernos locales, incluyendo los procesos administrativos, básicos, operacionales y de soporte deberían constituir un sistema de administración único, integral y de calidad. El carácter integral de este sistema es importante porque, de lo contrario, aunque un gobierno local sea confiable en algunas áreas de actividad puede ser no fiable en otros. Para que un gobierno sea considerado confiable, debería asegurar las condiciones mínimas de fiabilidad de todos los servicios y procesos clave. Para lograr esto, es recomendable que el gobierno local identifique claramente los procesos administrativos, básicos y de apoyo que, en conjunto, lo hacen confiable. El sistema proporciona una herramienta de diagnóstico para que los gobiernos locales evalúen el alcance y la madurez de sus procesos y servicios”.
Hoy, cuando la gente está harta de la ineficiencia crónica de sus gobiernos, los presidentes municipales, gobernadores y hasta el presidente de la república harían bien en analizar en qué consiste la norma ISO 18091:2014 y estudiar la manera en que ésta puede ayudarlos a realizar un mejor gobierno con la participación de los ciudadanos, factor muy importante que incluye dicha ISO.
Sobre este tema pronto daré más información.
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