Desde que yo recuerdo, una de las más importantes lacras de este país ha sido la corrupción. El PRI gobernó casi en solitario durante décadas, sin contrapeso de la prensa o de una oposición fuerte, y aún así se sabía, porque permeaba, que los políticos saqueaban la Nación y que estábamos en manos de bandidos. Cuando Miguel de la Madrid lanzó su programa “moralizador” (Renovación Moral) después de una serie de escándalos que sacudieron al país, entre ellos el de Arturo Durazo Moreno, era porque de plano nos ahogábamos en porquería y no porque
Televisa o los diarios de Mario Vázquez Raña (los medios poderosos entonces) lo dijeran. No había indicadores internacionales, no había Internet, no había canales alternos, pero se fue revelando que el jefe de policía de la Ciudad de México –nombrado por José López Portillo– había institucionalizado las cuotas de corrupción; que estaba detrás del asesinato a machetazos del matrimonio Flores-Izquierdo y de la aparición de 12 cuerpos decapitados y con signos de tortura en el Río de Tula.
Este contenido ha sido publicado originalmente por SINEMBARGO.MX en la siguiente dirección: http://www.sinembargo.mx/opinion/09-06-2014/24557. Si está pensando en usarlo, debe considerar que está protegido por la Ley. Si lo cita, diga la fuente y haga un enlace hacia la nota original de donde usted ha tomado este contenido. SINEMBARGO.MX
Leído en http://www.sinembargo.mx/opinion/21-04-2014/23298
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Por favor, sean civilizados.