CUANDO el tabasqueño era jefe de Gobierno anunció con bombo y platillo el congelamiento de la burocracia capitalina: por decreto, ni un empleado más entraría a la nómina.
LA DECISIÓN fue entonces muy aplaudida, pero en los hechos provocó que durante el resto de ese sexenio, el siguiente y lo que va del actual, las dependencias colgaran de sus nóminas a miles de trabajadores eventuales y por honorarios.
ES DECIR, la nómina sí siguió creciendo, pero "por fuera", con el agravante de que los empleados carecían de las más mínimas prestaciones.
AHORA habrá que ver si Mancera aprovecha para deshacerse de aviadores y vivales, pues no vaya a ser que terminen colándose bajo el tibio manto de la burocracia que se paga con el dinero de los mexicanos.
¡QUÉ EXTRAÑO! En estos días que anda celebrando los 75 años del PAN, Gustavo Madero se ha aventado no menos de cinco discursos en dos días, pero no le ha dedicado una palabra a la emergencia en Baja California Sur.
Y ESO que aquella entidad golpeada por el huracán "Odile" es gobernada por un panista.
PARA MUCHOS albiazules resulta un misterio el silencio de su dirigente. Sin embargo, hay otros que aventuran una hipótesis descabellada: que Madero no quiere ni mencionar a Marcos Covarrubias porque en la elección interna éste apoyó a Ernesto Cordero.
¿SERÁ CIERTA tanta animadversión? Es pregunta que se pone azul de la impresión.
EL QUE seguramente se llevará el premio al "Detective Más Rápido del Mundo" es Rubén Moreira.
APENAS se estaba dando a conocer que Javier Villarreal, el ex tesorero de Coahuila, había confesado que lavó en Estados Unidos millones de dólares robados al erario coahuilense, cuando el gobierno estatal ya tenía su propia investigación, dictamen y sentencia.
SEGÚN la administración de Moreira, no hay indicios ni registros contables de que el operador del "moreirazo" haya defraudado al gobierno anterior... que encabezaba su hermano Humberto Moreira.
ASÍ, mientras Estados Unidos escarba y se queda con los dineros mal habidos de Villarreal, en Coahuila la instrucción es no rascarle al caso.
RESULTA CURIOSA la elección que hizo Barack Obama de María Echaveste como nueva embajadora en México.
DE ENTRADA porque no se entiende que remueva a Anthony Wayne, quien apenas llegó en 2011, sobre todo porque le estuvo echando los kilos a mejorar la relación con el gobierno mexicano, tras el desaguisado entre Felipe Calderón y Carlos Pascual.
DA LA IMPRESIÓN que la nominación de Echaveste parece más enfocada a atender los amarres de Obama con los demócratas y no a las necesidades de la relación bilateral.
Leído en http://www.am.com.mx/opinion/leon/templo-mayor-11951.html
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