Vísperas del Año Nuevo y no hay reposo que serene en Oaxaca.
En la Vieja Antequera, la capital del estado que gobierna Gabino Cué, nuevamente corren noticias preocupantes sobre un brote de influenza AH1N1; en Los Loxichas, el asalto sufrido por el exdiputado Zenén Bravo Castellanos, también exsecretario general de la Sección 22 del SNTE, pone en alerta máxima a la APPO y en la región serrana un grupo de indígenas reclama en las calles la presencia del aspirante presidencial del PAN a la Presidencia de la República, Ernesto Cordero Arroyo.
Los golpes bajos entre los panistas emergen como la nota discordante en esta entidad, donde la conflictiva social es una constante. El exsecretario de Hacienda viajó a la región mixteca para hacer su última aparición pública del 2011 y fue maltratado por un grupo de contrarios, quienes le reclamaron su desempeño como servidor público.
Esas puyas no fueron espontáneas y ubican a operadores políticos cercanos al exgobernador Diódoro Carrasco -coordinador de la campaña de Josefina- entre los autores materiales de esta agresión, la última dentro de una serie de agravios acumulados en las últimas semanas del 2011, ante los cuales la directiva panista se ha visto aminorada.
Los coroneles del ejército panista que encabeza Cordero confirmaron que un reclamo formal será presentado por el equipo corderista en la reunión que mañana sostendrá la dirigencia nacional del PAN, misma que tendrá como tema central una modificación al calendario del proceso interno, propuesta por el jefe nacional Gustavo Madero.
A las irrupciones pendencieras de los josefinistas -también a sus huestes se le atribuye la presencia de los extrabajadores de Mexicana a las afueras de la sede nacional del PAN- deben sumarse otras tácticas priístoides, materializadas en la presencia constante de acarreados en su mítines, desde el momento mismo en que inició el periodo de precampañas.
A las irrupciones pendencieras de los josefinistas -también a sus huestes se le atribuye la presencia de los extrabajadores de Mexicana a las afueras de la sede nacional del PAN- deben sumarse otras tácticas priístoides, materializadas en la presencia constante de acarreados en su mítines, desde el momento mismo en que inició el periodo de precampañas.
En su registro como precandidata, por ejemplo, quedó constancia del arribo de más de 10,000 personas a la sede nacional del PAN, en cuyas cercanías se aparcaron 350 autobuses. La renta de estas unidades y de otros utilitarios se estimó en 1.2 millones de pesos, pero ese cálculo no incluyó el pago recibido por los “simpatizantes” josefinistas.
Enfocada en los impactos mediáticos y en recaudar recursos entre la clase empresarial, con el único objetivo de convertirse en la “candidata inevitable”, Vázquez Mota apuntó la primera etapa de su estrategia en ubicarse en el primer lugar de los sondeos de preferencias, sin importar que recurriera a las apariciones en programas como El Panda Show o en las portadas de las revistas rosas.
Ese objetivo estaba cumplido antes de que la dirigencia blanquiazul publicara las reglas de la competencia interna, el 18 de octubre. Sin embargo, los josefinistas han sido omisos en la tarea de contactar a los panistas de base y a los liderazgos locales, definidores primarios dentro del PAN. Ahora van contrarreloj y buscan construir una candidatura entre la población en general, al estilo priísta, con estrategas y operadores formados en el tricolor. Su cuarto de guerra tiene como coordinador general al exsecretario de Gobernación en el sexenio zedillista; como coordinador ejecutivo al cineasta Gastón Pavlovich Rodríguez; como encuestador al director del despacho GCE, Ulises Beltrán, exasesor presidencial de Carlos Salinas y Ernesto Zedillo, y al think tanker Daniel Hernández, como figuras preponderantes.
Primero, trataron de condicionar la contienda interna, presionaron para que la elección del abanderado fuera abierta, luego buscaron que las encuestas descartaran a los de menores preferencias manifiestas y al final tratan de obligar a sus adversarios a la declinación.
Al paso de las semanas, sigue latente la apuesta: ¿cuántos puntos desciende Santiago Creel en las encuestas? Paradójicamente, en la permanencia del exsecretario de Gobernación radican las expectativas de triunfo de Josefina.
En el bando contrario, Cordero Arroyo paulatinamente ha logrado superar la imagen de ser el “candidato oficial”, mientras que el equipo calderonista ha podido amainar el impacto de la derrota de la hermana del Presidente en la elección por la gubernatura de Michoacán y la defección de algunos cercanos a la casa presidencial, como Luis H. Álvarez, Roberto Gil y Germán Martínez Cázares.
EFECTOS SECUNDARIOS
¿HOT LINE? En vísperas de la encuesta de las izquierdas para definir a su candidato a la Jefatura del Gobierno del DF, lo más burdo emerge durante la tarde del 31 de diciembre: una grabación de una pequeña que desea un feliz año a nombre del secretario de Educación, Mario Delgado Carrillo, y del precandidato presidencial, Andrés Manuel López Obrador. Al margen de las reglas, los aspirantes perredistas a la nominación ni siquiera respetaron las vacaciones decembrinas. El procurador Miguel Ángel Mancera contrató los servicios de la empresa Sondeos y Consultas para sondear qué pasaría si apareciera al lado de actores como Jorge El Coque Muñiz o Isabella Camil.
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