Y son tan claras las señales de que Peña Nieto reivindicará las promesas de Andrés Manuel López Obrador y de Josefina Vázquez Mota que, a pocas horas de que asumiera el cargo, el diario alemán Die Welt lo calificó como un Presidente de izquierda moderna y seria, en tanto que el propio jefe del PAN, Gustavo Madero, dijo que la mayor parte de las propuestas de reforma que contiene el llamado "Pacto por México", son del partido azul.
Sin embargo, entre las primeras acciones de gobierno emprendidas por Peña Nieto en la primera semana de su gestión –a 12 días de que asumió el cargo--, destacan algunas de las banderas emblema que, en su momento, prometió el derrotado candidato de las izquierdas, Andrés Manuel López Obrador: ¿Y cuáles son esas acciones?
1. La reducción salarial de la burocracia. Apenas hace horas, Peña Nieto decretó la reducción de 5 por ciento el salario de la burocracia federal, en los rangos medios y altos. Esa propuesta, con otros matices, fue una de las banderas fundamentales de campaña de AMLO, quien pregonaba que del ahorro de la burocracia sacaría dinero suficiente para empujar una revolución fiscal en el País. Claro, lo de la revolución fiscal era un cuento.
2. En su reciente visita a Nuevo León, Peña Nieto no sólo anunció inversiones económicas de mediano y largo aliento; no sólo ofreció su respaldo decidido al gobierno de Rodrigo Medina –a cuya policía puso de ejemplo, en contraste con la policía de Monterrey, operada por la Alcaldesa panista Margarita Arellanes--, sino que se comprometió a que su gobierno sería itinerante. Es decir, que el gabinete de seguridad estaría en Nuevo León, una vez al mes. Y esa fue una de las promesas fundamentales que había prometido AMLO a "los regios".
3. Otra de las banderas básicas del entonces candidato de las izquierdas, de López Obrador, fue acabar con mafias y monopolios como el del sindicato magisterial, en poder de la señora Elba Esther Gordillo, a la que imaginó como Secretaria de Educación en el eventual gobierno del PRI.
Pues resulta que Peña Nieto no sólo anunció una profunda reforma educativa, sino que en el Pacto por México se incluyó el detalle de la propuesta del PRD en esa materia. Y fue el propio jefe nacional del partido amarillo en responsable de anunciar la reforma.
4. Ante el asombro de propios y extraños, Peña Nieto hizo suya una propuesta central de AMLO que, en su momento, fue retomada por los incautos "ternuritas" del #132. Nos referimos a la llamada "democratización de los medios". Es decir, que sin saber de lo que hablaban, "la carne de cañón" de AMLO empujó la licitación de nuevas cadenas de televisión, para ofrecer una mayor competencia. Bueno, pues resulta que Peña Nieto anunció la licitación de dos cadenas nacionales más, con lo que acabará con el mal llamado "duopolio" televisivo.
5. En respuesta al reclamo de buena parte de grupos sociales vinculados con las izquierdas, Peña Nieto decretó que el Gobierno federal promulgaría la Ley de Victimas, aprobada por el Congreso y que el gobierno de Calderón había detenido y combatido mediante una controversia constitucional.
6. Además, Peña Nieto entregó el premio nacional de derechos humanos al Sacerdote Alejandro Solalinde, severo crítico del PRI y del Gobierno federal, además de estandarte de los derechos humanos de grupos de izquierda.
7. Apenas hace horas, Jesús Murillo, nuevo titular de la PGR, dijo que esa dependencia luchará por acabar con la figura del arraigo, demanda que era otra de las bandes de la izquierda.
8. Y por último, la firma del Pacto por México, su extenso contenido y la voluntad de llevar adelante las reformas que en su campaña propusieron los candidatos López Obrador y Vázquez Mota, es una muestra contundente de que Peña Nieto va por un ambicioso paquete de reformas que tomen en cuenta a la derecha, a la izquierda y, claro, al PRI.
¿Y cuál es la ganancia de todo eso?
Elemental, obtener el beneficio de la duda. O si se quiere, legitimar el regreso del PRI. Al tiempo.
En el camino
Ahora resulta que hacer política; pactar, negociar y acordar, como lo hicieron el gobierno de Peña Nieto y la profesora Gordillo, es algo así como un engaño o una traición. Bueno, eso dice Ricardo Monreal, que en toda su carrera política ha pactado negociado y acordado. Congruencia de izquierda.
Leído en http://www.noroeste.com.mx/opinion.php?id_seccion=104
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