viernes, 7 de febrero de 2014

F. Bartolomé - Templo Mayor

YA EMPEZÓ el carrusel de cambios en las dependencias federales. El primer turno será para la SEP, donde Emilio Chuayffet nombrará nuevo Oficial Mayor.

NO SE lo cuenten a nadie, pero de esa posición sale Nicolás Kubli y llega Marco Abaid, quien fuera contralor del gobierno de Enrique Peña Nieto en el Estado de México, por lo que es del equipo cercano del Presidente.

SE TRATA de un puesto clave para el reordenamiento de la nómina del magisterio este año y, sobre todo, para la negociación sobre las plazas que pagará la Federación a partir de 2015 tras desaparecer el FAEB. ¡Menuda bronca!





POR CIERTO que vestido y alborotado se quedó Natividad González Parás, ex gobernador de Nuevo León.

SU NOMBRE era de los que sonaba para entrar al quite en la Procuraduría Federal del Consumidor, en lugar de Alfredo Castillo, que se fue como comisionado para Michoacán.

SIN EMBARGO, la veladorcita que mantenía encendida el regiomontano para salir de la ReNaTa (Reserva Nacional de Talentos) la apagó ayer Ildefonso Guajardo.

EL SECRETARIO de Economía dio a conocer que Lorena Martínez, ex alcaldesa de Aguascalientes, será la nueva titular de la Profeco.

NOMÁS FALTÓ decirle a González Parás: ¡Láaastima, Maaargarito!


QUÉ INTERESANTE es cuando los expertos chocan con la realidad.
LA CALIFICADORA Moody’s otorgó la ansiada nota “A3” a los bonos emitidos por el gobierno mexicano, por primera vez en su historia.

AL MISMO TIEMPO el INEGI salió a decir que, en el mes de enero, la confianza del consumidor tuvo su peor caída: 6.20 por ciento de diciembre a enero.
ES DECIR, mientras que en el extranjero los analistas apuestan a la recuperación de la economía mexicana, las familias mexicanas ven con pesimismo los días por venir, por lo que redujeron su gasto.

CON ESTO queda claro que, mientras las supuestas “bondades” de las reformas no se vean reflejadas en el bolsillo de las amas de casa, seguiremos siendo candil de la calle en los mercados internacionales de deuda... y oscuridad en los nacionales.


PRESIONADO por sus compañeros de la bancada del PAN, el senador Jorge Luis Preciado tuvo que salir a pedir perdón. Menos mal que no pidió otra ronda.
AL DISCULPARSE públicamente, el panista prometió que no volverá a usar las instalaciones del Senado como su salón de fiestas particular.

SIN EMBARGO, hay quienes consideran que las disculpas no bastan, por lo que piden que deje la coordinación del grupo parlamentario blanquiazul y, en una de ésas, también su escaño.

SEGURAMENTE eso no le inquieta a Preciado, pues sabe que muy rápido conseguiría chamba, por ejemplo como wedding planner.

TAMBIÉN podría hacerse cargo del festejo por los 100 años de Octavio Paz, o de la inauguración del Mundial. Y dada su experiencia en vinos, puros y buena música, está que ni pintado para mánager... ¡de Justin Bieber!


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