Derribe de la muralla de Veracruz.

Recomendación de Ramn.
        

14 de julio de 1880, inicia el derribe de la muralla de Veracruz.

14 jul 2012

Por: Ricardo Cañas

La muralla que circundó la ciudad de Veracruz fue comenzada a construir después del ataque del pirata Lorencillo, en 1683, este proceso de fortificación tardó más de cien años en poderse concluir. La muralla fue terminada aproximadamente en 1790; tan sólo trece años después Alexander Von Humboldt mencionaba que ésta debía de ser destruida. El título de “muralla” en verdad le queda muy grande, pues en realidad era una barda grandota, desde su base media tres metros y medio de altura, y 83.6 cms. de ancho y en ocasiones la arena se le amontonaba y la cubría totalmente. Finalmente la muralla como tal no duró en pie ni cien años.

Para el último tercio del siglo XIX algunos periódicos de la capital de la república mencionaban ya la necesidad de ampliar la ciudad de Veracruz, rodeada por una anacrónica muralla que según las ideas de ese tiempo no dejaba circular el aire por el interior de la misma, Domingo Bureau Vázquez, había tomado posesión como alcalde en enero de 1880, para febrero un trágico accidente marco el inicio del derribe de la muralla, en la antigua “Puerta de la Merced” (Independencia y Rayón), se encontraba abarrotada por vendedores provocando la concentración de personas en la misma, una mañana una carreta entró a la ciudad y por un lamentable descuido atropelló y dio muerte a una niña, como se entenderá, para esa época esto fue una gran tragedia, tomando esto como motivo el Sr. Bureau solicitó el permiso correspondiente a el organismo titular de la muralla que era la Secretaria de Guerra y Marina para ensanchar la mencionada puerta, y el permiso fue otorgado, logrando así que tuviera la amplitud de la avenida misma. Si bien es cierto unos años antes la entrada del ferrocarril al recinto amurallado había provocado una apertura en la muralla, pero esto no basto para que se pensara en derribarla. Meses más tarde una comitiva formada por el alcalde Bureau, los regidores José González Pagés, Salvador Carrau, Francisco Canal partieron a la ciudad de México para hablar con el Presidente de la República el Gral. Porfirio Díaz quien estaba en el último año de su primer periodo de gobierno, a fin de solicitar el derrumbe completo de la muralla y con ello sanear la ciudad, unir los barrios de extramuros como el de la “Huaca”, “La Noria”, “San Sebastián”, y “Las Californias” con la parte intramuros de la ciudad, el permiso previo análisis por parte de la “Secretaría de Guerra y Marina” , tal solicitud fue atendida y el permiso otorgado.

Comienza el Derribe de la Muralla

el 14 de Julio de 1880 a las 4 de la tarde partió del Palacio Municipal el Cabildo completo acompañado de la banda de música, ciudadanía en general y unos “rallados” (presos de San Juan de Ulúa) para los trabajos de demolición, por la calle de María Andrea (Zamora) hasta llegar a la Puerta Acuña donde tras breve discurso del Alcalde y alegoría por parte de los ciudadanos se dio el primer barretazo para el inicio de su total derribe el cual también duro un cierto tiempo, dejando en pie solo los cuarteles militares, el Baluarte de Santiago y el Baluarte de la Concepción, pero éste último desaparecería en los próximos 15 años con la ampliación del ferrocarril en la caleta y las obras del Puerto. Domingo Bureau era nieto de franceses, su influencia estaba marcada ya que recordando un poco su trayectoria había trabajado para el gobierno imperial de Maximiliano, por lo tanto la fecha del derribe de la muralla -14 de julio- seria parte de esta influencia, tomaría este día que era el de la Revolución Francesa, una revolución libertaria para liberar a la ciudad de Veracruz de esa muralla que la encerraba.

Imagen del puerto a finales del siglo XIX.

La ciudadanía colabora con el derribe de la muralla

Los trabajos del derribe avanzaron lentos al principio debido a la debilidad de los presos de San Juan de Ulúa, al mismo tiempo se elaboraba un plan de desarrollo urbano municipal que consistía en la continuación en línea recta al exterior de las calles de intramuros, esto afectaría a quienes vivían a las afueras de la ciudad, ya que los barrios extramurales no estaban ordenados, las casitas de madera estaban situadas sin calles y esto implicaría el derribe de muchas de ellas debido a la próxima conformación de manzanas y lotes ordenados, pero era tal la inteligencia del Alcalde Bureau y sobre todo sus ganas de apoyar a la gente que lanzó una propuesta: que las personas que vivían a extramuros apoyaran acudiendo a ayudar en el derribe de la muralla y a cambio se les regalaría el material de la misma y cal, para que con eso construyeran sus nuevas casas. Esto tuvo un efecto muy positivo pues la gente se volcó a ello dando todo su apoyo, por tal motivo no quedó ni un pedazo de ese muralla ni de los demás baluartes, que la misma población detestaba. La muralla en sí, representaba en plena época independiente una imagen del colonialismo español, una barda que no tenía ya fin alguno, sus portones ya no se cerraban, ya no cumplían sus horarios y jamás sirvió verdaderamente para defender la ciudad pues durante los bombardeos se le abrían tramos hasta de veinte metros.

Domingo Bureau Vázquez

Así mismo Domingo Bureau crea la “Sociedad de Artesanos” a quienes apoya económicamente para que salgan adelante y a su vez estos enseñen un oficio a otras personas, crea los parques “Infantil”, y “Ciriaco Vázquez”; da los primeros pasos para la modernización del puerto colocando la primera piedra en 1882 con el empresario Agustín Cerdán el cual no logra llevarlo a término, hace dos primarias la “Josefa Ortiz de Domínguez” y la “Manuela Herrera” entre muchas obras más; años antes siendo regidor logra el embellecimiento de la Alameda, la introducción de las aguas del río Jamapa, la creación del Cuerpo de Bomberos y en época de Maximiliano es nombrado Prefecto de los Departamentos de Tuxpan, Veracruz y Tehuantepec, en los años que fue regidor y alcalde no se tenía sueldo alguno por ello y su honestidad no se puso en tela de juicio y cuando falleció en 1903 estaba en la total pobreza y el Ayuntamiento pagó los funerales a este hombre que en su mente solo estaba un sueño que llevó a la realidad: un Veracruz mejor.