Por lo menos cuando se trata de la marihuana, la guerra contra las drogas ha terminado.
Dos estados han aprobado leyes sobre la marihuana legalización que van en contra de la política farmacéutica nacional. 
Sondeo sobre el tema muestra un rechazo de la prohibición. Las opiniones de los comandantes encargados de hacer cumplir la ley ha comenzado a cambiar.
Para algunos que quieren recortar el presupuesto, la guerra contra las drogas está buscando un buen lugar para comenzar.


Ahora, por primera vez, cuando un grupo de presión marihuana llama a un miembro del Congreso, se preguntan por dinero, no colgó el teléfono,  Allen St. Pierre, director ejecutivo de NORML  dijo a Business Insider .  Y, como St. Pierre estaba orgulloso señalar, el hombre de la Casa Blanca, personalmente inventó una nueva forma de fumar marihuana en la escuela secundaria. 
Las cosas están cambiando. 
En febrero, Obama "zar antidrogas" Gil Kerlikowski, el d irector de la Oficina de Política Nacional de Control de Drogas,  admitió varios errores por parte de la administración a la hora de la guerra contra las drogas.
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Gil Kerlikowski
"No se puede detener a su manera de salir de este problema",  le  dijo a Macleans, una revista canadiense,  " El gobierno no ha hecho un trabajo particularmente bueno, uno, hablando de la marihuana como un asunto de salud pública, y el número dos, hablando de lo que se puede hacer y dónde deberíamos estar encabezada por nuestra política de drogas ".
Kerlikowski está lejos de ser el guerrero primer medicamento para admitir la derrota.
Stephen Downing, ex jefe adjunto de la policía de Los Ángeles, fue el director de la división de narcóticos cuando Richard Nixon declaró la guerra contra las drogas, y personalmente ayudó a establecer la infraestructura de la DEA.
"En aquellos días nuestra meta - y el objetivo de hoy -. Es reducir el flujo de drogas en este país, para reducir su pureza y para reducir la adicción a las drogas  Bueno, no hemos hecho nada de eso ", dijo Downing Business Insider en una entrevista telefónica. "O ur gobierno sigue mintiendo sobre el éxito que tendrán ".
Los estados parecen estar liderando el camino hacia la legalización. En noviembre pasado, Washington y Colorado votó a favor de legalizar la marihuana en directa oposición a las actuales políticas federales de drogas.
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Allen St. Pierre, cabildero de la marihuana reforma
Desde entonces, los miembros del Congreso han introducido una legislación para legalizar la marihuana . Rhode Island despenalización de la marihuana entró en vigor a principios de abril,  y seis estados más tienen legislación pendiente legalización .  
Mucho de esto es una respuesta directa a votación extensa. El apoyo a la legalización está en su punto más alto. En el estado más grande de la nación - y un referente potencial para el futuro de la marihuana en los EE.UU. - California legalización apoyo de los votantes el 54 por ciento a 43 por ciento en contra.
Una encuesta de Pew publicado hoy encontró un sorprendente 52 por ciento de los estadounidenses dicen que la marihuana debería ser legal, con un 48 por ciento en contra. Mientras que los estadounidenses están divididos sobre esto, el impulso corresponde a los partidarios de la legalización - En la década de 1970, sólo el 12 por ciento de los estadounidenses apoya la legalización, y hace diez años lo hizo sólo un tercio de los estadounidenses. 
Lo que es más, más de la mitad de los estadounidenses de 30 a legalización de apoyo 64 y 65 por ciento de los estadounidenses 18 a 29 lo apoyo. 
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Stephen Downing, ex subjefe del LAPD, agregó un hecho otra tecla. El gobierno federal sólo ha gastado $ 1,3 billón en la guerra contra las drogas desde su creación, que es de $ 500 mil millones más que el costo actual de la guerra de Irak.
En un clima donde el Congreso está tratando de recortar el dinero tanto como sea posible del presupuesto federal, no es de extrañar que un número de fiscales orientadas a  los republicanos han apoyado la legalización de la marihuana . 
Lo que esto significa es que una tormenta perfecta se está desarrollando lo que se refiere a un posible fin de la guerra contra las drogas. Estadounidenses como la marihuana. Estados están interesados ​​en la legalización de la misma. Las fuerzas del orden se altera con el fracaso de la actual política de drogas. El gobierno federal está escuchando el vestíbulo marihuana. Los últimos tres presidentes de Estados Unidos admitió fumar marihuana.
El impulso ha cambiado, y los defensores de la legalización piensan que los referendos en noviembre fueron el punto de inflexión. Los observadores creen que es probable que varios estados a legalizar la marihuana en breve. A este ritmo, la guerra podría terminar pronto, y la prohibición de la marihuana podría dejar mucho más rápido de lo que nadie esperaba.
Actualización: Este artículo se actualizó para reflejar un reciente sondeo de Pew