En su ensayo "Los hoyos negros de la estrategia contra el narco", publicado en el número de agosto de 2010 de la revista Nexos, Eduardo Guerrero muestra cómo la detención de capos criminales "genera olas de violencia que pueden durar semanas o meses, y con frecuencia culminan en la escisión del cártel descabezado, lo cual propicia el nacimiento de nuevas organizaciones".
El experto en seguridad argumenta que, al arrestar al jefe de un cártel, se produce una guerra intestina por ver quién se queda con el control de la organización, lo cual produce ciclos de violencia. En este sentido, Guerrero criticaba la estrategia de "decapitación de las bandas" que por ese entonces seguía el gobierno de Calderón.
Recordé este argumento ahora que el gobierno mexicano detuvo a Miguel Ángel Treviño Morales, alías el "Zeta 40". ¿Podemos esperar, entonces, una ola de violencia a consecuencia del arresto del líder de Los Zetas, el grupo criminal más violento de México?
De acuerdo a una nota publicada ayer por Stratfor, empresa especializada en servicios de inteligencia y espionaje, sí podría ser el caso dependiendo "de la habilidad de Los Zetas de reemplazar a su jefe mayor y de la estrategia de sus rivales. Si la detención de Treviño provoca una lucha interna por la sucesión, la violencia puede crecer en estados en donde Los Zetas tienen una presencia importante, incluyendo Tamaulipas, Nuevo León, Zacatecas, San Luis Potosí, Coahuila, Veracruz, Hidalgo y Tabasco. Los rivales de Los Zetas, como la Federación de Sinaloa, el Cártel Jalisco Nueva Generación, los Caballeros Templarios y facciones del Cártel del Golfo, probablemente verán esta transición como un momento de debilidad. Podrían atacar a Los Zetas en sus bastiones o tratar de explusarlos de sus territorios dominantes".
Ahora bien, si la violencia ha bajado en México desde 2011, es porque el gobierno se concentró en atacar precisamente a Los Zetas por ser el cártel más violento de todos. Cito otro reporte de Eduardo Guerrero al respecto:
"Durante 2011 Los Zetas se ubicaron como el principal blanco de las acciones del Gobierno Federal. Las principales detenciones en este año fueron las de Flavio Méndez Santiago "El Amarillo", fundador de Los Zetas; Jesús Enrique Rejón Aguilar "El Mamito", fundador de la organización y tercero al mando; Valdemar Quintanilla Soriano "El Adal", principal operador financiero; Carlos Oliva Castillo "La Rana" jefe de plaza en Nuevo León, Tamaulipas y Coahuila; y Raúl Lucio Hernández Lechuga "El Lucky", coordinador logístico en Hidalgo, Oaxaca, Puebla, Veracruz, Tabasco, Campeche, Querétaro, San Luis Potosí, Quintana Roo y el Estado de México.
"Por otra parte, debido a que Los Zetas operan con un esquema de franquicias (un liderazgo central cohesionado vinculado a células locales con alto grado de autonomía) la detención o abatimiento de algunos líderes y jefes de plaza no desarticula su estructura ni genera fricciones entre grupos, en la misma medida que en otras organizaciones".
Guerrero lo tenía muy claro. Lo sanguinario de los actos de Los Zetas, en eventos como los del Casino Royale en Monterrey o los 26 cadáveres abandonados en una céntrica glorieta en Guadalajara, "contribuyeron a reafirmar la desarticulación de este cártel como una prioridad del Gobierno Federal" desde el 2011. Y esta estrategia, que tuvo buenos resultados, continuó aplicándose en 2012. Hay que recordar que el año pasado, la Marina abatió al líder de Los Zetas, Heriberto Lazcano Lazcano alías "El Lazca".
Ahora con la detención del "Zeta 40", se debilita aún más a esta organización. Por tanto podría pensarse que, lejos de generarse una ola violenta, podríamos atestiguar una baja gradual de la violencia debido a la tunda que le está dando el gobierno a esta organización. No sólo para mermarla, sino para enviar un mensaje disuasivo a otros grupos del crimen organizado: "nosotros vamos a ir con toda la fuerza del Estado en contra de los criminales más violentos del país; ésa es la prioridad". Ojalá, en este sentido, la detención de Treviño sirva para seguir bajando la violencia en México.
Independientemente de esto, de ninguna manera puede menospreciarse el valor de haber arrestado a uno de los capos más violentos de la historia reciente del país. Por tanto, hay que felicitar al gobierno de Peña Nieto por la detención del "Zeta 40".
Twitter: @leozuckermann
Leído en http://www.eldiariodecoahuila.com.mx/notas/2013/7/17/viene-violencia-detencion-zeta-40-376401.asp
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