Si el golpe político contra Elba Esther Gordillo fue fulminante y tomó por sorpresa a la entonces poderosa lideresa del sindicato magisterial, el movimiento contra Carlos Romero Deschamps fue mucho más anunciado y, aunque menos letal, deja tocado al dirigente del sindicato petrolero que a pesar de su disciplina y de haberse sometido sin chistar a la reforma energética, recibió un manotazo al aprobar el PRI y el gobierno la salida de su sindicato del Consejo de Administración de Pemex.
De nada le valió al millonario senador haber aceptado todo cuanto le pidieron desde Los Pinos para dar paso al nuevo modelo petrolero que abrirá las puertas a nuevos sindicatos con las empresas privadas nacionales o trasnacionales y que defiende el derecho de libertad sindical y la figura del trabajo independiente. A diferencia de Elba, Romero no opuso resistencia ni pretendió rebelarse contra un cambio que sabía inevitable y prioritario para el presidente Enrique Peña Nieto; y si a la primera fue su rebeldía la que le costó la cabeza y terminar en prisión acusada de fraude a su sindicato, al segundo le pagaron su obediencia con un golpe de gracia.
Porque con la jugada del PAN de condicionar su voto a favor de la reforma energética a que el PRI aceptara sacar al sindicato del máximo órgano de decisión de Pemex, Carlos Romero y su gremio pierden una de las mayores fuentes de poder que les permitían hacer grandes negocios con la paraestatal, por encima incluso de su ventajoso Contrato Colectivo de Trabajo. Muchas concesiones, transferencias económicas y “regalos” que la empresa petrolera daba a su sindicato se decidían desde la posición de poder que le daba a sus dirigentes tener cinco lugares asignados en el Consejo donde se tomaban las decisiones más importantes de Pemex.
Sin esa presencia, que generó a lo largo de los años vicios y empoderamiento del sindicato petrolero, la relación del gremio con Pemex se centrará a lo estrictamente laboral. Si a eso se añade que las condiciones del sindicato necesariamente se verán impactadas por los cambios en la petrolera, que pasa en la reforma de empresa paraestatal a “empresa pública productiva” con nuevos criterios de eficiencia y competencia que la obligará a abandonar sus prácticas de monopolio, el panorama para el STPRM no es muy halagüeño y menos para su sempiterno y enriquecido dirigente.
De hecho, la permanencia de Romero Deschamps al frente del sindicato petrolero solo se entiende por la sumisión que este mostró hacia los cambios impulsados por Peña Nieto. Basta recordar que tras el encarcelamiento de Elba Esther Gordillo comenzaron a surgir en los medios datos e informaciones sobre la fortuna del líder petrolero y los gastos millonarios de sus hijos. Buena parte de esa información, junto con los rumores que hablaban de un posible relevo en la dirigencia del STPRM tuvieron como origen el propio gobierno federal que, de ese modo, preparaba el terreno para su reforma energética y ablandaba cualquier posible inconformidad de la cúpula sindical hacia los cambios que tocarían el poder del sindicato.
Ese fue el aviso de lo que venía para Romero Deschamps que a partir de ayer entró en un inevitable ocaso de su liderazgo y de su enorme influencia política. La única pregunta que queda es ¿cuánto durara la retirada del servicial dirigente petrolero?
NOTAS INDISCRETAS…En lo que algunos llamaban ayer “el milagro de Johannesburgo”, el histórico saludo de mano entre Barack Obama y Raúl Castro en los funerales de Nelson Mandela podría ser una señal de cambio en el histórico enfrentamiento entre Washington y la isla. “Somos personas civilizadas”, dijo ayer el mandatario cubano sobre la imagen que ayer le dio la vuelta al mundo y hoy será portada en varios periódicos por lo inédito del gesto. Desde que Richard Nixon, siendo vicepresidente de Estados Unidos, había saludado a Fidel Castro, entonces líder de la Revolución cubana, no había registro fotográfico de algún acercamiento entre Cuba y Estados Unidos… Más sobre el romance de moda en San Lázaro. El asunto va tan en serio que lo que empezó como un affaire legislativo es ahora una sólida relación entre el destacado legislador panista y la joven diputada del Movimiento Ciudadano. Tan en serio va el asunto que ya viven juntos y, según cuentan quienes ya los han visto en público, la feliz pareja ya hasta tiene planes de boda. Lo dicho, el amor no distingue ideologías… Se lanzan los dados. Tocó Serpiente.
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