lunes, 23 de junio de 2014

F Bartolomé - Templo Mayor

LOS CONSEJEROS del flamante INE vestirán hoy sus mejores galas para presentarse en sociedad y anunciar lo que será su primer gran reto: elegir a los integrantes de los organismos electorales estatales.

A DIFERENCIA de las pachangas que han sido esos procesos tanto a nivel local como federal -ellos mismos surgieron de entre las tenebras de San Lázaro-, esta vez se pretende darle cierto orden al caos de tal forma que la lista se vaya reduciendo conforme avancen en las etapas.

PARA EMPEZAR, los aspirantes a ocupar alguna de las codiciadas plazas (consejero presidente por siete años, tres consejeros por seis años y otros tres por tres años), deberán aprobar un examen de conocimientos.

LUEGO presentarán un ensayo presencial, es decir, lo tendrán que escribir ahí mismo delante de los sinodales. Nada de copy-paste de Wikipedia.
 
 
 
 
 
 
 

LOS FINALISTAS serán sometidos a una entrevista personal y el resultado se conocerá, a más tardar, el 30 de septiembre.

LO ÚNICO que no queda claro en la convocatoria del INE es cómo diablos le van a hacer para amarrarle las manos a los gobernadores, a fin de que no metan su cuchara en la integración de los institutos electorales.



PARA DARSE una idea de qué tan descompuesta está la cosa en Tamaulipas, ahí está el dato de que el principal capo del cártel del Golfo estaba desde hace años en la nómina... ¡de la Alcaldía de Río Bravo!

Y ESO ocurría con todo y que las propias autoridades federales lo identificaban como uno de los objetivos prioritarios a capturar, como parte de la estrategia contra el crimen en la entidad.
LO MÁS GRAVE de este asunto es que esta es apenas la puntita del iceberg. En las tierras del gobernador Egidio Torre Cantú se asegura que el caso no es único.

DE HECHO dicen que seguramente, en la medida en que avance -si avanza, claro- la estrategia federal, saldrán a la luz otras “perlitas” de cómo la delincuencia se apoderó de ese estado.

QUE FUE durante el Gobierno de Tomás Yarrington cuando la mafia se enquistó en las nóminas municipales y llegó hasta los principales niveles del Gobierno estatal, sin que sus sucesores pudieran o quisieran resolver esa tragedia.

ASÍ QUE cuando alguien dice que Tamaulipas atraviesa un momento tan, pero tan delicado como el de Michoacán, no le falta razón.



DE ESAS VECES en que el invitado parece el niño del bautizo, algunos tricolores estaban ayer confundidos, pues ya no sabían quién estaba rindiendo protesta como nuevo dirigente del PRI del Estado de México.

Y ES QUE quien asumió el cargo fue Carlos Iriarte, pero el más ovacionado fue... ¡Arturo Montiel!

LUEGO de que dejó botada la Alcaldía de Huixquilucan y a sus habitantes, Iriarte sirvió también de tapete para darle la bienvenida al ex Gobernador en la escena pública.

AL EX MANDATARIO no dejaban de echarle porras y aplaudirle de pie, incluido el nuevo líder tricolor.

LO INTERESANTE es que la resurrección política de Montiel se aprecia también en los cambios en el Gabinete de Eruviel Ávila, quien dio posiciones relevantes a los montielistas.

TAL ES el caso de José Manzur en la Secretaría de Gobierno; de Arturo Osorio en Desarrollo Social, y Humberto Benítez -el papi de Lady Profeco- al frente de El Colegio Mexiquense.
 
 
 
 

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