Ante una audiencia joven y con evidente simpatía hacia el que fue dos veces, sin éxito, candidato del PRD a la presidencia, López Obrador no ahorró adjetivos ni ataques personales en su discurso. "Nada ha dañado más a México que la corrupción política, causa de la pobreza, la desigualdad y la violencia que nos agobia. Pero lo que está sucediendo ahora no tiene precedentes. El poder político y el económico se han nutrido mutuamente para el robo de los bienes de la nación", afirmó.
Para López Obrador, azote de una clase política de la que ha formado parte durante décadas, la culpa la tiene la doctrina neoliberal. "En estos aciagos tiempos de neoliberalismo, los gobernantes se han dedicado a entregar el territorio y a transferir empresas y bienes del Estado a particulares nacionales y extranjeros. La corrupción, mayor que nunca ahora, es la principal función del Estado en México. Un pequeño grupo ha conquistado todos los poderes y mantiene secuestradas las instituciones".
El que fuera Jefe del Gobierno del Distrito Federal cargó contra los presidentes del país en las últimas décadas, desde Miguel de la Madrid hasta Felipe Calderón, con quien perdió unas elecciones por la mínima en 2006. Sin embargo, su arremetida más dura fue contra Peña Nieto, quien le venció en 2012 por tres millones de votos. "Es un subordinado más de la oligarquía, alguien que está conduciendo al país a un mayor grado de deterioro". López Obrador se refirió al programa de reformas del actual mandatario mexicano : "En apenas dos años ha impuesto, siguiendo órdenes del extranjero y de las oligarquías locales, las reformas laboral, educativa, fiscal y energética, que atentan contra la soberanía, socavan la convivencia pacífica y alientan la frustración, el caos y la violencia".
"En México no hay democracia", añadió. "Lo que existe es una dictadura simulada, que se ejerce y sostiene con el control casi absoluto de los medios". El líder de Morena no olvidó la matanza de estudiantes de Iguala, que ha conmocionado a los mexicanos. "La falta de empleo y oportunidades han desatado inseguridad y violencia en todo el país. Esta macabra realidad es la consecuencia de los dictados de los centros financieros del mundo aplicados por nuestro Gobierno". AMLO llamó a "cambiar el régimen". "Mientras no haya un cambio de fondo México se seguirá hundiendo. Hay que derrocar el régimen sin violencia, con una revolución de las conciencias".
Leído en http://internacional.elpais.com/internacional/2014/10/14/actualidad/1413319249_231013.HTML
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