Empiezo a sospechar que lo que he escrito sobre el tema fiscal durante las últimas tres décadas ha sido olímpicamente ignorado por casi dos generaciones de tecnoburócratas de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y los intrascendentes legisladores federales que han sido los corresponsables del desastre hacendario en que se encuentra el país. Probablemente ni siquiera se molestaron en leerme, de lo ocupados que estuvieron reinventando varias veces a México.
Por ejemplo, el viernes 9 de septiembre de 2011 publiqué en este espacio, bajo el simple título “El IVA”, la siguiente columna, la cual espero que esta vez sí se molesten en leer nuestros muy distinguidos senadores de la república:
“Los países desarrollados o los que en verdad se están desarrollando decidieron hace tiempo gravar con un Impuesto al Valor Agregado (IVA) a todos los productos y servicios que se venden. Algunos países gravan todo lo que se vende a una sola tasa mientras que otros gravan a distintas tasas según sean los productos o servicios. Hay casos en donde existen productos exentos del pago del IVA, como en México sucede con los alimentos y medicamentos.
“Islandia es el país en donde más alta es la tasa del IVA: 25.5%. Existe una tasa de 7.0% para gastos de calefacción, materiales impresos, gastos en restaurantes, estancias en hoteles, y casi todos los alimentos. El país con la tasa más baja es Irán, con 3.0% aplicable a todos los productos y servicios, sin excepción.
“Entre estos dos extremos encontramos países con un IVA de hasta el 10%, que son: Andorra (4.5%); Japón, Taiwán y la Isla de Jersey (5.0%); Panamá, Singapur y Tailandia (7.0%); Liechtenstein (7.6%); Suiza (8.0%); y Egipto, Corea del Sur, Líbano, Malasia, Australia, Indonesia, Paraguay y Vietnam (10.0%).
“Encontramos países que cobran un IVA que va de 11.0% a 15.0%: Ecuador, Guatemala, Kazajstán, Filipinas, Sri Lanka y Venezuela (12.0%); Bolivia, El Salvador, Nepal (13.0%); India (13.5); Sudáfrica (14.0%); Palestina (14.5%); y Etiopía, Mauricio, Nueva Zelanda, Fidji, Trinidad y Tobago, Chipre y Luxemburgo (15%).
“Gravan con una IVA de 16.0% a 20.0%: Colombia Jordania, Kosovo, Perú, Guyana, Israel, Pakistán, México y República Dominicana (16.0%); Montenegro, Saint Kitts y Nevis, Bosnia y Herzegovina, y China (17.0%); Barbados (17.5%); Georgia, Rusia, Azerbaiján, Macedonia, Servia, Turquía y España (18.0%); Chile, Alemania y Holanda (19.0%); Francia (19.6%); Austria, Bulgaria, República Checa, Estonia, Italia, Eslovaquia, Eslovenia, Reino Unido, Uzbekistán, Marruecos, Albania, Armenia, Ucrania, Bielorrusia y Moldavia (20.0%).
“Encontramos un IVA de más del 20.0% en: Bélgica, Lituania, Irlanda y Argentina (21.0%); Letonia y Uruguay (22.0%); Croacia, Finlandia, Grecia, Polonia y Portugal (23%); Rumania (24.0%); Noruega, Suecia, Dinamarca y Hungría (25.0%).
“El promedio de todos estos porcentajes es de 16.05%.
“En algunas países hay tasas reducidas de IVA y en otros hay tasa cero para ciertos rubros.
“Por ejemplo, en los países de la Unión Europea hay tasas reducidas para determinados productos y servicios. En algunos de estos países hay reducción de la tasa en ciertas zonas geográficas (en las islas Canarias de España, por ejemplo).
“En países que no pertenecen a la Unión Europea, hay algunos que no exentan un solo producto o servicio. Entre ellos Japón, Taiwán, Panamá, Singapur, Tailandia, Corea del Sur, Egipto, Guatemala, Colombia o Chile. Algunos gravan con tasa cero a ciertos rubros.
“Hay tasas reducidas para diversos productos o servicios en varios países. Entre ellos Israel (tasa cero para frutas y verduras, servicios turísticos, diamantes, vuelos y renta de apartamentos); China (13.0% para alimentos, materiales impresos y combustibles para uso doméstico); Suiza (3.8% para servicios hoteleros y 2.5% para alimentos, libros, periódicos y medicinas).
“En resumen, en muchos países en donde existe el IVA vemos que se aplica con ciertas variaciones. Lo que sí se observa es que en los países más desarrollados existen tasas reducidas para muy pocos rubros.
“En México, se calcula que en 2012 la tasa cero que se aplica a ciertos productos y servicios ocasionará una pérdida de ingresos de 173 mil 957 millones de pesos (1.13% del PIB), mientras que la pérdida por los bienes y servicios exentos del IVA será de 46 mil 875 millones de pesos (0.31% del PIB). Es decir, que por tasa cero y exenciones, el gobierno dejará de cobrar un total de 220 mil 832 millones de pesos, que equivale a 39.6% de los 557 mil 189 millones de pesos que se espera recaudar por concepto de IVA en 2012. De eliminarse la tasa cero y las exenciones, el gobierno podría tener ingresos, por concepto del IVA en 2012, de 778 mil 21 millones de pesos. Ese monto superaría ligeramente a los 744 mil 73 millones que el gobierno estima ingresar el año entrante por concepto del impuesto sobre la renta.
“Estamos hablando de mucho dinero que el gobierno no cobra porque los legisladores de todos los partidos dicen que no quieren perjudicar a los pobres del país, olvidando que los afectan más al proporcionarles servicios mediocres cuya calidad mejoraría de tenerse más recursos y aplicarse éstos de manera inteligente y honesta.
“Urge aplicar un IVA generalizado a todos los bienes y productos. También reducir la tasa del ISR y eliminar el IETU.”
Senadores: ahí les dejo esto de tarea. Si es que se molestan en leerme…
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Leído en http://criteriohidalgo.com/notas.asp?id=199309
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