Francisco Martín Moreno - Avenida Miguel "El Piojo" Herrera

¿Por qué existen calles y colonias, plazas, parques y avenidas con el nombre de los grandes destructores de la sociedad, de la economía y de la nación y, sin embargo, aquellos como “El Piojo” Herrera, un hombre que motiva saludablemente a las multitudes, un mexicano apasionado y ejemplar capaz de demostrarnos a todos que sí se puede, que cuando trabajamos en equipo logramos avances impensables, aquél que logra poner de pie al país como un solo hombre, no se le reconoce con el nombre de alguna famosa avenida para recordar la importancia de ponernos de acuerdo y tomados de la mano alcanzar férreamente un objetivo común?











¿Por qué Lázaro Cárdenas el político troglodita que burocratizó el petróleo y los ferrocarriles hasta sepultarlos en la ruina total, el presidente que distribuyó –en contra de las advertencias de Álvaro Obregón- 26 millones de hectáreas hasta quebrar al campo mexicano y provocar el exilio de 10 millones de campesinos a Estados Unidos para asestarle un golpe letal a la agricultura mexicana, por qué este siniestro personaje es homenajeado en pueblos y villorios ignorando el terrible daño que le ocasionó al país? ¿Y Echeverría y su “gobernar es poblar” cuando México era arrollado por una marea humana al explotar demográficamente a tasas anuales de casi el 4 por ciento, un error, entre otros tantos, que desquició a México al crecer de 20 millones en los 40 a 120 en el 2014? ¿Acaso este otro macabro personaje no hirió de muerte al peso y a la nación con su pavorosa devaluación de 1976 similar a la que provocó López Portillo por más que jurara defender nuestra moneda como un perro? Y, sin embargo, ahí están las avenidas y parques con los nombres y estatuas de auténticos enemigos de México. La alternancia en el poder del PAN ni siquiera fue útil para cambiar la nomenclatura de las calles de la República. Ni para eso sirvieron los azules…

Estoy convencido de que México le ganará a Holanda el próximo domingo, con lo cual volverá a dejar boquiabiertos a los escépticos que habrán perdido montañas de dinero cuando apostaron a favor de Croacia. El equipo mexicano, una locomotora en marcha, está engolosinado y saborea encuentro tras encuentro, las mieles del poder y del éxito. Si vencimos a Camerún y a Croacia y empatamos con el gigante brasileño, nada menos que un “pentacampeón”, ¿quién sigue? Con la confianza, seguridad y determinación que tenemos ya estamos en posición de enfrentar al mejor jugando de “cojito”, si fuera el caso…

Ahí tenemos a “El Piojo” que tomó a un equipo desmotivado, hundido y resignado y ahora, 6 meses después, lo proyecta a las grandes ligas. ¿Mejoró la condición física de los jugadores en tan corto tiempo? ¡Falso! Lo único que aconteció es que este ilustre personaje supo tomar de las solapas y sacudir a los jugadores para convencerlos de la posibilidad de conquistar juntos las estrellas con audacia y coraje y para sorpresa de propios y extraños, a cumplir con ellos mismos. ¿Quién dijo que no se puede…?

Por todo ello propongo que la exitosa gestión de nuestro querido “Piojo” sea distinguida concediéndole el nombre de alguna famosa avenida para que cuando alguien pregunte las razones de semejante homenaje pueda satisfacer su curiosidad al leer el texto de una placa conmemorativa: fue un hombre que supo poner a México de pie…


@fmartinmoreno


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