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| Francisco Ramírez Acuña |
Gómez Morín y González Luna impulsaron un proyecto que nos dio principios de doctrina con base en valores universales, por tanto, no se inicia de cero, hay un entramado que los responsables de esta revisión tienen como punto de inicio; pues hoy no cuentan las falsas lealtades, es tiempo de pensar en grande, de analizar descarnadamente nuestro actuar como partido y panistas.
Hoy debemos darle una respuesta a los ciudadanos, aceptar con humildad que dejamos de dirigirnos a todos los mexicanos con nuestras acciones y propuestas, que nos concentramos tanto en gobernar que dejamos de lado la cercanía con la población; pero también tendremos que admitir que dejamos pasar la ambición de quienes medraron sin medida a costillas de la mayoría de panistas; porque tampoco es verdad que nos hundimos en la corrupción que otras fuerzas políticas han tratado de adjudicarnos; falso, con el PAN en el gobierno llegó a México transparencia y rendición de cuentas; ojalá se mantenga con los gobiernos por venir.
La revisión tendrá que hacerse pensando en todas las fuerzas que concurren en el PAN: ciudadanos de todos los estratos, dar entrada a toda la militancia, activos y adherentes; a los ciudadanos que no militan pero que simpatizan con el ser y quehacer del PAN. De ninguna manera se puede hacer una revisión pensando en agradar o quedar bien con personas o grupos. No, el PAN es un partido de ciudadanos, abierto, es un partido humanista, lejos de cofradías o de ideas retrógradas; en el PAN caben todas las ideas y las personas a condición de que actuemos con respeto al pensar y actuar del otro.
La renovación del PAN debe ser de tal magnitud que dé margen para la catarsis, que termine con vicios adoptados como el uso del padrón para fines personales o de grupo; tenemos que cambiar la forma de elegir nuestros candidatos para dar paso a nuestras mejores mujeres y hombres; abrir espacio para los ciudadanos que puedan enriquecer nuestra propuesta y representar todas las capas de la sociedad.
Pero también tenemos que decirle a los mexicanos que hemos hecho buenos gobiernos, que en los municipios, estados y el ejecutivo federal hicimos más que el PRI en más de 70 años. No debemos entregar el gobierno sin hacer un corte de caja de lo mucho que le estamos entregando al entrante en: salud, vivienda, seguridad, transparencia, libertades individuales y sin lugar a dudas, en las condiciones económicas que hoy goza México y por las que los principales organismos internacionales lo presentan como uno de los países con mejores perspectivas de futuro.
Hoy el PAN tiene la gran oportunidad de transformase para ser mejor y lo vamos a lograr si todos, pero todos, respondemos con responsabilidad y lealtad a México, principio y fin de los anhelos del panismo.
Francisco Ramírez Acuña
Leído en: http://www.vanguardia.com.mx/ylalealtaddelospanistas-1350209-columna.html
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