Salvador Camarena |
México tiene un problema de dinero. No de falta de dinero, sino de demasiado dinero. Por lo menos nuestra conducta pública hace posible esa conclusión.
Los innumerables diagnósticos oficiales e independientes que exponen todo lo que podría estar mejor para el país —o mejor dicho, que alertan sobre todo lo que debería estar mejor— no sirven de nada porque nadie tiene una sensación de urgencia. A nadie le quema la certeza de que si no corregimos nos hundimos. Vivimos bajo la máxima aquella que decían las abuelas:
“Encomiéndate a la providencia, mijito”. La “providencia” nacional a veces son los recursos petroleros, otras las remesas de los paisanos, o el empeoramiento de otras economías, o el mejoramiento de nuestra manufactura frente a otras naciones, o todas las anteriores, pero el caso es que al final, como en tantos hogares mexicanos, quién sabe cómo pero salen los recursos para librarla. Bueno, eso hablando del medio México que no está en la miseria.
La escena sería divertida si no fuera patética. Sube un senador del principal partido de izquierda a la tribuna a pedir un “Fobaproa” para rescatar a los gobiernos estatales y municipales. La izquierda pidiendo privilegios. Su dicho merece ser reproducido: “Se exhorta al titular del Ejecutivo federal para que instruya al Secretario de Hacienda, a que con cargo al Presupuesto se subrogue la deuda pública financiera y no financiera registrada hasta la fecha por estados y municipios, con la finalidad de proceder en lo inmediato a su protección, rescate y saneamiento financiero”. Chulada.
¿En qué año estamos? ¿En 1979 o en 2012? El senador es Raúl Morón, del PRD. Para más señas es michoacano. Exacto: el legislador que pide volver al pasado es del mismo partido y del mismo estado que Leonel Godoy, el ex gobernador de Michoacán que se dio unas vacaciones pagadas en el Senado luego de dejar a su entidad sumida en multimillonaria deuda (en su último año contrató más de 9 mil millones de pesos en empréstitos). Un dato más: antes de su actual cargo, don Raúl, hoy dueño de un escaño, fue diputado local. Es decir, sube a la tribuna a llorar como senador lo que no pudo defender en el Congreso michoacano. Chulada 2.
Pero el problema está, por mucho, lejos de ser exclusivo de Michoacán, o de Coahuila, donde los Moreira pasarán a la historia como los grandes responsables de un hoyo financiero descomunal. Ayer Reforma, que destacó desde el miércoles el tema del Fobaproa solicitado por el PRD, dio cuenta de problemas de deuda de los municipios. Destaco dos: Guadalajara debe más de 2,680 millones de pesos, mientras Monterrey debe más de 2,146 millones. ¿Por qué subrayar esos dos? Porque antes que ser cuestionados, ya no digamos castigados, los dos ex alcaldes de esas poblaciones fueron premiados: Aristóteles Sandoval (PRI) será gobernador de Jalisco y Fernando Larrazábal (PAN) llegó al Congreso de la Unión. Chulada 3.
La propuesta del PRD sonaría descabellada en un país que supiera que perdonar el desorden hipoteca el futuro. Pero no es nuestro caso. Aquí los gobernantes siempre logran el siguiente puesto, ya sea en el gobierno o en el partido. Y si ellos la van librando, a los demás nos queda la providencia.
salvador.camarena@razon.mx
Twitter:@salcamarena
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