Noviembre llegó bravo.
“Estúpido”, le endilga el senador panista Javier Lozano al perredista Jesús Ortega.
“Intolerante”, le responde Ortega a Lozano.
La manzana de la discordia se llama reforma hacendaria. Es un juego de poderes, conveniencias y traiciones.
Frente a estas batallas políticas, los mexicanos sufrimos, azorados, cómo el bolsillo marca empty: en los gasolinazos de cada mes la aguja ya marca 12 pesos por litro. De las gasolinas más caras del mundo pagamos, en un agravio financiero injusto y cruel.
En Tamaulipas volvió a despertar: al menos 13 muertos en enfrentamientos públicos. La cifra podría ascender a veinte. Es la violencia fuera de control que azota al país con sus 15 mil 552 muertos durante el gobierno peñista (Archivos del poder. 29/X/2013).
Agregar los de Matamoros, por supuesto.
Noviembre arribó furioso.
LOZANO vs ORTEGA. La miscelánea fiscal —dejemos de llamarle “reforma” porque no lo es—, ha reventado, aún más, el vínculo entre panistas y perredistas, en una jugada que solamente beneficia al PRI. Ya comenzaron a salir navajas y cadenas.
Cabeza de la poderosa corriente de Los Chuchos (la izquierda institucional y políticamente correcta), Jesús
Ortega atacó directamente a Andrés Manuel López Obrador y al PAN. A AMLO, a quien Ortega siempre le ha tenido temor, lo acusó de ser… ¡panista! ¿Cómo así?
Ortega atacó directamente a Andrés Manuel López Obrador y al PAN. A AMLO, a quien Ortega siempre le ha tenido temor, lo acusó de ser… ¡panista! ¿Cómo así?
De la cuenta ayer en Twitter de Jesús Ortega(@jesusortegam): “Es alianza de facto. AMLO y el PAN enfrentan la reforma hacendaria. Coinciden en mantener regímenes especiales”.
El revire de Lozano a Ortega:
“La estupidez del día a cargo de @jesusortegam quien dijo que hubo alianza entre @lopezobrador_ y
@Acción Nacional contra la #reformafiscal”.
@Acción Nacional contra la #reformafiscal”.
¡Tómala! Lozano disparó directo y a la cabeza.
Ortega no se quedó callado. Tuiteó a Lozano: “¡Qué lenguaje, senador! Usted es integrante del Congreso en donde lo menos que se debe tener es capacidad de dialogar, parlamentar”.
De Lozano a Ortega:
“A mayor abundamiento informo: @jesusortegames integrante del @PactoPorMX y del grupo de Los Chuchos PRD que apoyó la #reformafiscal”.
De Ortega a Lozano:
“Ahhh, la nostalgia. Quiere senador un Congreso en donde el que piense diferente a usted o es traidor a la patria o es estúpido?”
Y más: Ortega etiquetó a Lozano de “intolerante”: “Cuando PAN-PRD coincidimos hasta la mano nos levantaba. Ahora que opinamos diferente nos insulta. Típico intolerante”.
Hasta aquí los tuits.
Resulta patética la postura de Jesús Ortega, defendiendo una miscelánea fiscal limitada al aumento de impuestos, ausente de sentido social porque le pegará a millones de pobres con el incremento de precios y, lo más lamentable, asumiéndose en vocero priista. Qué pena ver así a un izquierdista legítimo como Ortega.
La fractura entre el PAN y el PRD, ante la miscelánea fiscal, es evidente. La revancha panista podría llegar respaldando al gobierno con la aprobación de la reforma energética.
¿Y el PRI? Frotándose las manos mientras sus rivales se despedazan.
GASOLINAZOS. ¿Por qué la gasolina mexicana es de las más caras del mundo, si cuesta menos por litro? Podría parecer un contrasentido que mientras en países como Noruega el litro equivale a 33.50 pesos mexicanos, en nuestro país sea de 12 pesos. Pero no es así.
De acuerdo con el ejercicio publicado por César Augusto
Gutiérrez Fierro en el Heraldo de Chihuahua, así se explica que la gasolina mexicana se ubique entre las más caras del mundo: “Mientras en México se necesitan diez días de salario mínimo (64 pesos diarios) para llenar el tanque del auto, los noruegos llenan el tanque de 50 litros con la mitad de un día de trabajo. En Suiza (30 pesos el litro de gasolina) es suficiente con poco más de la mitad de un día laboral. Ya ni hablemos de los Emiratos Árabes (país productor de petróleo como México) que sólo requieren hora y media de trabajo para llenar tanque”.
Gutiérrez Fierro en el Heraldo de Chihuahua, así se explica que la gasolina mexicana se ubique entre las más caras del mundo: “Mientras en México se necesitan diez días de salario mínimo (64 pesos diarios) para llenar el tanque del auto, los noruegos llenan el tanque de 50 litros con la mitad de un día de trabajo. En Suiza (30 pesos el litro de gasolina) es suficiente con poco más de la mitad de un día laboral. Ya ni hablemos de los Emiratos Árabes (país productor de petróleo como México) que sólo requieren hora y media de trabajo para llenar tanque”.
Y en México hay cinco millones que ganan salario mínimo.
Metamos la mano al bolsillo y hagamos cuentas.
TAMAULIPAS. Por más que el gobierno federal se esfuerce en ignorar la violencia y al crimen organizado, la información hace erupción: en Matamoros hubo varios enfrentamientos en vía pública, los ciudadanos inermes. 13 muertos al menos. Podrían ser 20 los caídos.
En redes sociales —válvula de escape informativo cada vez más presente e influyente—, se reportan “convoyes de hasta 20 camionetas, unas con la leyenda C-900 y otras con la letra “M” de Metros, supuestas células rivales al interior del Cártel del Golfo”.
Batallas y víctimas por todos lados.
Twitter: @_martinmoreno
El agarrón entre Lozano y Ortega siguió.
Fuente: Excelsior
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