martes, 17 de septiembre de 2013

Katia D'Artigues - Gritando bajo la lluvia

Mala noche mexicana la que se vivió con motivo del Grito de Independencia, la primera ceremonia de este tipo que encabeza el presidente Enrique Peña Nieto. Fue un grito bastante aguado: de ánimo... y también por el agua.

¿Cómo festejar en medio de una histórica emergencia nacional con dos —sí, dos— fuertes eventos meteorológicos —“Ingrid” y “Manuel”— azotando el país? Pues rápido y a trabajar, esa fue la respuesta, por lo pronto, presidencial.

El Zócalo recién desalojado de maestros en un operativo exitoso pero no exento de señalamientos de todo tipo, no parecía tan lleno como en otras ocasiones y oscurecido por la presencia de ¡acarreados! Sí, histórico: mexiquenses vestidos de rojo, quienes hasta con letreros de “Tultitlán con Peña Nieto” se encargaron de gritar frente al balcón presidencial a favor y hasta porras que contrarrestaron algunas manifestaciones en contra.





No por nada el Presidente parecía que los saludaba y la primera dama, Angélica Rivera (guapísima pero ya sin silueta de estrella de televisión) mandaba besos.

Lo cierto es que ni la presencia de Juan Gabriel ni los Ángeles Azules lograron levantar los ánimos y una alta concurrencia de asistentes…

El presidente Enrique Peña Nieto fue tradicional en su grito: con voz sin demasiada proyección (raro porque tiene experiencia previa en eventos así en Toluca) gritó vivas a los héroes nacionales. El convite con los invitados especiales duró menos de lo esperando, ante la emergencia que viven varios estados de la República. De hecho, Peña Nieto sólo bajó a disculparse con sus invitados especiales y se llevó a todo su gabinete a trabajar.

Más de un millón de damnificados lo requieren.

Lo cierto es que en el país llueve sobre mojado. La emergencia por “Ingrid” y “Manuel” ya cuenta más de 20 muertes por deslaves, miles de viviendas afectadas y más de 10 ríos desbordados y otros a punto de.

Hasta el cierre de la columna Acapulco está incomunicado por vía terrestre y aérea. Tanto la Autopista del Sol como la federal que van al puerto están bloqueadas por derrumbes. Se espera abrirlas en el transcurso de la semana. Por aire, ni cómo: el aeropuerto está cerrado. Las comunicaciones son difíciles: tanto líneas fijas como móviles están comprometidas.

Ayer, Peña Nieto llegó hasta allá. Aterrizó en un aeropuerto militar y pidió un censo para saber quién está afectado y qué perdió. Ya están allá los secretarios de Comunicaciones, Gerardo Ruiz Esparza y de Desarrollo Social, Rosario Robles.

Gran parte del gabinete también está en gira por otros de los estados del país: Veracruz, Hidalgo, Colima, Oaxaca, Tamaulipas, Michoacán, Jalisco y Morelos.

¿Qué le espera? Hoy, Miguel Ángel Mancera deberá presentar su primer Informe de Gobierno ante el pleno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal. No la tendrá fácil.

Mancera deberá sortear diversos asuntos, como la bronca interna dentro de las fracciones de la izquierda; laconstante queja del PAN sobre su actuar en torno a las protestas de la CNTE en diversos puntos del Distrito Federal, y quizás del lado del PRI le echarán porras por su colaboración con el Gobierno Federal. Quizá.

Ante las inclemencias del tiempo (político y meteorológico) ¿qué secretario de Estado acudirá en representación del presidente Enrique Peña Nieto? ¿Habrá algún cambio de discurso en estos días respecto al nivel de colaboración entre el Gobierno Federal y el capitalino?

Él lo tuiteó:

—El triunfo de 

Floyd Mayweather sobre El Canelo Álvarez, ¡fue más fácil que cogerse a una borracha!: del puño y teclado de Manuel Clouthier. Ante el rechazo de la población, pidió disculpas en Twitter.

En medio de un operativo policiaco federal-ultimátum realizado el viernes pasado, los maestros de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación desalojaron el Zócalo capitalino. ¿Cuál fue el resultado? ¿Qué harán en los próximos días? Se lo comento en la edición online de esta columna.

Leído en http://www.vanguardia.com.mx/columnas-gritandobajolalluvia-1833622.html

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