Los padres de los estudiantes ofrecieron una conferencia de prensa que siguió al mensaje del fiscal general y a unas breves palabras que el presidente Enrique Peña Nieto dedicó al anuncio en un evento con industriales. Por la mañana, el fiscal Murillo se había reunido con los padres en Iguala para informarles lo que después anunció a todo el país en directo.
“Están tratando de cerrar el caso de manera descarada”, dijo Felipe de la Cruz, padre de uno de los estudiantes que sobrevivieron a la violenta noche del 26 de septiembre. “El hecho de que el procurador diga que las bolsas encontradas en Cocula tienden a ser de los jóvenes sin pruebas es una forma de torturarnos que no vamos a permitir”, dijo esta tarde acompañado de otros padres en la escuela normal rural Raúl Isidro Burgos.
De la Cruz ha servido como el vocero del descontento de los padres. En un vídeo que comenzó a circular por las redes sociales el jueves por la noche se le puede ver en la reunión que sostuvieron con el presidente Peña Nieto el pasado 29 de octubre. “Son más de 30 días sin resultados… nosotros hemos llegado al límite de la tolerancia y la paciencia”, le increpaba Francisco al mandatario. Al final de su intervención le exigió presentar a los jóvenes con vida y pidió que pensara en renunciar si no podía resolver el caso.
Este viernes, tras la información detallada por Murillo Karam, los padres insistieron en esa idea, que ha cobrado fuerza en algunos sectores que han salido a la calle a manifestarse por la desaparición forzada de los jóvenes. “Basta de hipótesis… Nos han dicho que los encuentran destazados o en cenizas. Ya basta de tanta ineptitud y tanto dolor. Es justo que digan si no pueden, que se vayan”, ha dicho este viernes otro de los padres.
Algunos especialistas han alertado de la radicalización de los discursos. “Hay grupos que se están aprovechando de la situación”, señala José Antonio Crespo, un historiador del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE). “Se está exigiendo a las autoridades que los jóvenes aparezcan con vida, algo que es difícil que ocurra. Y con eso se tiene un pretexto permanente de movilización y confrontación”, asegura.
Los padres han exigido a las autoridades que sea el equipo de peritos argentinos el que aporte la última palabra en la investigación a partir de pruebas concluyentes en lugar de los resultados oficiales presentados por la Procuraduría General de la República. “La verdad tiene que llegar a través de un estudio científico que reconozca los cuerpos. No puede ser solamente el testimonio de tres detenidos. Sería irresponsable por parte de la fiscalía”, ha dicho uno de los padres.
Vidulfo Rosales, abogado de Tlachinollan -- una ONG de referencia en el estado de Guerrero—que ha brindado consejo legal a los padres subrayó que el Gobierno no ha cumplido con los compromisos que adquirió el pasado 29 de octubre. “Pedimos que el presidente firme un convenio para que dos expertos de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos acudan a auxiliar en las investigaciones”, dijo y advirtió que si los expertos argentinos no tienen las facilidades para acceder a las pruebas que se han presentado esta tarde las conclusiones del caso “no serán aceptadas”.
La relación entre los padres y el Gobierno encuentra un nuevo pretexto para el encono. El presidente Peña comienza este fin de semana una gira internacional que lo llevará a Australia y China desde el 9 hasta el 15 de noviembre. “El presidente quiere irse de viaje para informar al mundo que ha resuelto el caso de los estudiantes. Esto nos llena de ira y de coraje”, anunció De la Cruz. Minutos antes, el propio presiente informó a un grupo de empresarios que el Estado detendrá “a todos los que participaron en estos crímenes abominables” y que su Administración “no cejará hasta que se haga justicia”.
http://internacional.elpais.com/internacional/2014/11/08/actualidad/1415407463_176526.html
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