A fines de julio pasado el CONEVAL informó que 53.3 millones de personas son pobres, que 41.8 millones de ellas están en situación de pobreza moderada y 11.5 millones en situación de pobreza extrema. Nos dijo que otros 40.7 millones están en una situación vulnerable; 33.5 millones por carencias sociales y 7.2 millones por ingresos. Finalmente, que solo 23.2 millones pueden clasificarse como no pobres y no vulnerables. Recordemos que la población total del país es de 117.2 millones. Para entender lo que cada definición significa, veamos las que nos proporciona el mismo CONEVAL:
“Pobreza: Una persona se encuentra en situación de pobreza cuando tiene al menos una carencia social (en los seis indicadores de rezago educativo, acceso a servicios de salud, acceso a la seguridad social, calidad y espacios de la vivienda, servicios básicos en la vivienda y acceso a la alimentación) y su ingreso es insuficiente para adquirir los bienes y servicios que requiere para satisfacer sus necesidades alimentarias y no alimentarias.
“Pobreza extrema: Una persona se encuentra en situación de pobreza extrema cuando tiene tres o más carencias, de seis posibles, dentro del Índice de Privación Social y que, además, se encuentra por debajo de la línea de bienestar mínimo. Las personas en esta situación disponen de un ingreso tan bajo que, aun si lo dedicase por completo a la adquisición de alimentos, no podría adquirir los nutrientes necesarios para tener una vida sana.
“Pobreza moderada: Es aquella persona que siendo pobre, no es pobre extrema. La incidencia de pobreza moderada se obtiene al calcular la diferencia entre la incidencia de la población en pobreza menos la de la población en pobreza extrema.
“Vulnerables por carencias sociales: Aquella población que presenta una o más carencias sociales, pero cuyo ingreso es superior a la línea de bienestar.
“Vulnerables por Ingresos: Aquella población que no presenta carencias sociales pero cuyo ingreso es inferior o igual a la línea de bienestar. “No pobres y no vulnerables: Aquella población cuyo ingreso es superior a la línea de bienestar y que no tiene ninguna de las carencias sociales que se utilizan en la medición de la pobreza. “Línea de bienestar: Valor monetario de una canasta de alimentos, bienes y servicios básicos.” En resumen, solo el 19.8% de la población de nuestro país tiene acceso a “los alimentos, bienes y servicios básicos” y no sufre ningún tipo de “carencia social que se utiliza en la medición de la pobreza”. Por ello, 8 de cada 10 mexicanos no pueden clasificarse como no pobres y no vulnerables. Son pobres y vulnerables y representan al 80% de la población. Lo más lamentables es que uno de cada 10 mexicanos no gana ni para comer decentemente todos los días del año. Esta es la cruda realidad que ocasiona que las empresas que operan dentro de la economía formal y quienes pertenecen a las clases socioeconómicas media y alta sean los que tienen que financiar mediante los impuestos que pagan al fisco los servicios que proporciona el gobierno y las obras que éste realiza. Es una realidad que no me gusta y debo aceptar porque no me queda de otra. Lo peor es que no veo para cuándo cambiará dicha realidad. .
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Leído en http://criteriohidalgo.com/notas.asp?id=190832
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