lunes, 7 de octubre de 2013

Eduardo Ruiz-Healy - La delincuencia organizada está en todas partes

En su sitio www.unodc.org, la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito asegura que:

“El crimen organizado amenaza la paz y la seguridad humana, viola los derechos humanos y socava el desarrollo económico, social, cultural, político y civil de las sociedades alrededor del mundo.

“La delincuencia organizada transnacional se manifiesta en muchas formas, incluyendo el tráfico de drogas, armas y hasta personas. Al mismo tiempo, grupos de crimen organizado explotan la movilidad humana para contrabandear migrantes y socavar los sistemas financieros mediante el lavado de dinero. Las enormes sumas de dinero involucradas pueden afectar las economías legítimas e impactar directamente los procesos públicos mediante la ‘compra’ de las elecciones a través de la corrupción. Rinde altas ganancias para los delincuentes y significa altos riesgos para las personas que son sus víctimas.




“El crimen organizado se ha diversificado, vuelto global y alcanzado proporciones macroeconómicas: bienes ilícitos pueden originarse en un continente, traficarse a través de otro y comercializarse en un tercero. La delincuencia organizada transnacional puede permear agencias e instituciones gubernamentales, alimentando la corrupción, infiltrar los negocios y la política, obstaculizando el desarrollo económico y social. Y está minando la gobernabilidad y la democracia al empoderar a quienes operan fuera de la ley.

“El carácter transnacional del crimen organizado significa que las redes criminales forjan vínculos más allá de las fronteras y superan las diferencias culturales y lingüísticas al perpetrar sus delitos. El crimen organizado no se estanca sino que se adapta conforme emergen nuevos delitos y se flexibilizan y sofistican las relaciones entre las redes criminales que tienen cada vez mayor alcance alrededor del mundo.”

La delincuencia organizada transnacional ha creado un mercado negro o ilegal para sus productos que a nivel mundial tiene un valor de 1.79 billones de dólares, de acuerdo con Havocscope Global Black Market Information (www.havocscope.com), y emplea a 1,800 millones de personas, según el periodista estadounidense Robert Neuwirth, cuyos artículos y reportajes han aparecido en The Washington Post, Forbes, Scientifc American, The Nation y Newsday, entre otras publicaciones.

1.79 billones de dólares (1,790,000,000,000) es un monto apenas inferior al producto interno bruto (PIB) de 10 países, medido por el Fondo Monetario Internacional (FMI), que son Estados Unidos, China, India, Japón, Alemania, Rusia, Brasil, Reino Unido, Francia e Italia. Es decir, la delincuencia organizada ha creado la undécima economía más grande del mundo y para lograrlo emplea a 25.7% de la humanidad, lo que la convierte en el empleador más importante en el planeta.

Para que todos entendamos qué tan presente está la delincuencia organizada en nuestras vidas y que sus actividades no se circunscriben solo al narcotráfico, trata y explotación de personas y otras actividades que pueden sernos muy ajenas, a continuación enlistó 50 actividades ilegales que son controladas por cárteles y otras organizaciones criminales, así como el valor en dólares de cada actividad, nuevamente de acuerdo a Havocscope:

Falsificación de medicamentos (200 mil millones), prostitución (187 mil 170 millones), falsificación de productos electrónicos (mil millones), mariguana (141 mil 800 millones), apuestas ilegales (140 mil millones), cocaína (85 mil millones), tráfico de medicamentos cuya venta requiere receta médica (72 mil 500 millones), heroína (68 mil millones), piratería de programas de cómputo (63 mil millones), contrabando de cigarros (50 mil millones), falsificación de alimentos (49 mil millones), falsificación de autopartes (45 mil millones), robo de petróleo (37 mil 230 millones), falsificación de juguetes (34 mil millones), tráfico de personas (32 mil millones), tala ilegal de bosques (30 mil millones), metanfetaminas (28 mil 250 millones), pesca ilegal (23 mil 500 millones), contrabando de personas (20 mil millones), tráfico de especies animales silvestres (19 mil millones), éxtasis (16 mil 70 millones), piratería de música (12 mil 500 millones), falsificación de zapatos (12 mil millones), falsificación de ropa (12 mil millones), descarga ilegal de deshechos (11 mil millones), robo de arte (10 mil millones), piratería de cable (8 mil 500 millones), piratería de videojuegos (8 mil 100 millones), falsificación de productos deportivos (6 mil 500 millones), falsificación de pesticidas (5 mil 800 millones), contrabando de alcohol (4 mil 300 millones), piratería de entretenimiento móvil (4 mil 300 millones), falsificación de cosméticos (3 mil millones), piratería de películas (2 mil 500 millones), contrabando de metales y minerales (2 mil 300 millones), falsificación de partes para aviones (2 mil millones), falsificación de armas (1mil 800 millones), secuestro por rescate (1 mil 500 millones), adopciones internacionales (1 mil 300 millones), diplomas y títulos profesionales falsos (1 mil millones), tráfico de armas (1 mil millones), falsificación de relojes (1 mil millones), piratería de libros (600 millones), falsificación de dinero (182 millones), contrabando de material nuclear (100 millones), falsificación de tarjetas de identidad y pasaportes (100 millones), tráfico de órganos humanos (75 millones), falsificación de bolsos de dama (70 millones), falsificación de encendedores (42 millones), falsificación de baterías (23 millones).

Después de leer la lista arriba anotada es seguro que muchos recordemos la última vez que fuimos clientes voluntarios o involuntarios de alguna organización criminal.

La delincuencia organizada está en todas partes y en vista de que cada vez obtiene más ganancias económicas es evidente que no hay país que haya podido combatirla exitosamente.

Este es nuestro mundo…

Twitter: @RuizHealy
Mail: eduardoruizhealy@gmail.com
www.ruizhealy.tumblr.com

Leído en http://criteriohidalgo.com/notas.asp?id=196333

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Por favor, sean civilizados.