Salvador García Soto - Primer choque Peña-Congreso

En medio de la vorágine y las prisas por aprobar las reformas política y energética, la Cámara de Diputados anunció la semana pasada que interpondrá una controversia constitucional en contra de la administración de Enrique Peña Nieto, por la publicación de un reglamento de la Ley Federal de Juegos y Sorteos, con el que la Secretaría de Gobernación volvió “legales”, de un plumazo, las máquinas tragamonedas y regularizó más de 32 permisos de casinos otorgados el sexenio pasado, en los que se sospecha existió corrupción.

Sería la primera vez que el Poder Legislativo lleva a la Corte una controversia contra el gobierno de Peña Nieto y con este recurso se busca que el Ejecutivo explique el extraño caso de la decisión que tomó la Secretaría de Gobernación, a cargo de Miguel Osorio Chong, en el tema de casinos, con la reciente modificación del reglamento de la citada Ley de Juegos, a través de la cual se benefició a varios particulares y grandes consorcios empresariales que operaban, de manera ilegal, máquinas tragamonedas en sus casinos.






Resulta que a finales del sexenio de Felipe Calderón se autorizaron una serie de permisos ilegales para la operación de casinos y sobre todo de las llamadas máquinas tragamonedas, que estaban fuera de la ley que data de 1947 y se consideraban ilegales. La propia Segob anunció en febrero pasado, a través del secretario Osorio Chong, que investigaba varios permisos otorgados en los últimos meses del calderonato, y para mayo, la directora de Juegos y Sorteos, Marcela González Salas, informaba al Congreso que se habían encontrado al menos 32 permisos considerados “irregulares” o bajo sospecha.

A finales del sexenio pasado, el entonces senador Manlio Fabio Beltrones impugnó, a través de una controversia constitucional, el otorgamiento de esos permisos, aduciendo que se trataba de facultades que no le daba la ley a Gobernación al autorizar el funcionamiento de las máquinas tragamonedas fuera de los reglamentos. La controversia fue avanzando en la Corte y hace unas semanas ya había un proyecto de dictamen del ministro Alberto Pérez Dayán, que consideraba inconstitucional la operación de las citadas máquinas, con lo que quedaban sin efecto todos los permisos otorgados que, de aprobarse el dictamen en la Corte, tendrían que ser cancelados de inmediato.

Pero extrañamente, la Dirección de Juegos y Sorteos, dependiente de Gobernación, ordenó un cambio de reglamento para la operación de los casinos, en el que reclasificó a las máquinas tragamonedas, a las que ahora contempla en la ley como “juegos de destreza”. Ese solo cambio automáticamente dejó sin materia la controversia constitucional iniciada por el Beltrones y es muy probable que la Corte termine por desechar el dictamen del ministro Pérez Dayán, que daría un fuerte revés a los permisionarios de casinos que operaban las ilegales máquinas tragamonedas.

La pregunta que se hicieron en San Lázaro es por qué en el gobierno de Peña Nieto, en la Segob, decidieron “tapar” con un cambio de reglamento todo el cochinero de los permisos y corrupción del sexenio calderonista ¿Qué fuertes intereses se atravesaron en el camino para bloquear el fallo de inconstitucionalidad que preparaba la Corte con el cambio de reglamento que reclasificó las adictivas máquinas tragamonedas que proliferan por todas las ciudades del país y que están siendo causa de ludopatía en clientes asiduos a los casinos, especialmente señoras de clase media?

¿Tendrá que ver con los jugadores en el millonario sector de los casinos, donde aparecen empresas tan poderosas como Televisa, a través de su filial Play City, hasta el polémico Jorge Hank Rhon y su Grupo Caliente? ¿O también tan repentino cambio del reglamento en la Segob será por casineros de dudosa reputación, como Raúl Rocha, dueño del tristemente célebre Casino Royal en Monterrey que, aún con la muerte de 52 personas, no pudo ser cerrado y a quien se vincula como financiero del grupo político del dirigente del PAN, Gustavo Madero, por aquello de cuidar el Pacto por México?

Son preguntas que seguramente saldrán a relucir en la nueva controversia constitucional que se aprobó por la Junta de Coordinación Política de la Cámara de Diputados. Veremos pues en qué termina el primer encontronazo jurídico entre Peña y los diputados y qué es lo que hay detrás del extraño cambio de posición en el gobierno peñista y la corrupción de los poderosos casineros.

NOTAS INDISCRETAS… En los pasillos de San Lázaro circula entre curules un chisme del corazón. El tórrido romance entre un encumbrado diputado de la derecha panista y una joven y guapa diputada de la izquierda perredista. Él, ilustre guanajuatense, ella belleza tapatía. Y los dos confirman que cuando se trata de amor, las ideologías no importan… Se baten los dados. Escalera. La semana promete.

Leído en http://www.24-horas.mx/serpientes-primer-choque-pena-congreso/