Durante el sexenio de Felipe Calderón, la deuda ampliada de México, medida a través del Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP), alcanzó una cifra nunca antes vista, como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB).
De acuerdo con los datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el SHRFSP sumó 5.9 billones de pesos al cierre de 2012, lo que representó 36.1 por ciento del PIB y un incremento de 88 por ciento desde los 3.1 billones de pesos en que finalizó el sexenio de Vicente Fox.
Sin embargo, desde el inicio de las presidencias panistas, el alza fue de 187 por ciento al pasar de los 2.05 billones al cierre del 2000 a 5.9 billones al finalizar el 2012.
Desde 2010, el SHRFSP agrupa la deuda neta del sector público presupuestario y las obligaciones netas del IPAB, el Fonadin, los asociados a Pidiregas, a programas de apoyo a deudores, así como la pérdida esperada de la banca de desarrollo y fondos de fomento.
En la reforma petrolera del 2008 se acordó que el saldo de los Pidiregas que se registraba como deuda de las paraestatales mencionadas se contabilizaría en el futuro como deuda pública.
Por ello, en el cuarto trimestre del 2008, la también llamada deuda ampliada se elevó en 22 por ciento; sin embargo, el ritmo de crecimiento que hasta ese momento se mantenía, se disparó, en medio de un contexto de crisis, a finales del 2008, y de la contingencia sanitaria registrada durante el 2009.
En la administración de Vicente Fox, se originó una elevada deuda,por lo que su sexenio cubrió 1.4 billones de pesos sólo por amortizaciones e intereses; en tanto, en el mandato de Felipe Calderón el monto fue de 1.5 billones de pesos.
En el último año del sexenio calderonista la deuda pasó de poco más de 3 billones de pesos a 5.9 billones.
El monto fue superior a los recursos excedentes que obtuvo el país en los últimos 10 años, y que alcanzaron un billón 939 millones de pesos o, bien, dos terceras partes del Presupuesto de Egresos de la Federación para 2013.
Por lo mismo, la medición más amplia de la deuda del gobierno también conocida como Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público,se ubicó en 36.1 por ciento como porcentaje del Producto Interno Bruto (PIB).
La administración de Felipe Calderón ha sido en donde más se ha endeudado el país en los últimos sexenios.
La deuda creció más de un billón de pesos durante el gobierno de Vicente Fox Quesada, con Ernesto Zedillo aumentó cerca de 700 mil millones.
El presidente Enrique Peña Nieto recibió un país mucho más endeudado y en los primeros seis meses de su administración alcanzó los 6.1 billones de pesos y, lo que representa 38.4por ciento del PIB, por arriba de 37 por ciento que se estiman en los Criterios Generales de Política Económica 2014, para el cierre del presente año.
En esta inercia, se prevé que el SHRFSP continúe creciendo, ya que conforme a lo aprobado por el Congreso de la Unión, para este año el endeudamiento neto del Gobierno Federal previsto es de 415 mil 882 millones de pesos, cifra que representa 2.5 por ciento del PIB.
Tanto la Secretaría de Hacienda como analistas del sector privado aseguran que la escala de endeudamiento que tiene el país no pone en riesgo la estabilidad de las finanzas públicas, pues aseguran que está respaldado por las reservas del Banco de México (Banxico), además de que los vencimientos están programados a mediano largo plazo, de manera que. afirman, es manejable.
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