MÉXICO, D.F. (apro).- Gobernador bajo sospecha de corrupción y de sometimiento a la Iglesia católica por su militancia en El Yunque, en cuya organización secreta tiene el seudónimo de “Eugenio Pacceli”, Juan Manuel Oliva irrumpe en el Partido Acción Nacional (PAN) como el más fuerte prospecto para disputarle la presidencia a Gustavo Madero, un personaje también de escándalos por sus vínculos con casineros y su connivencia con Enrique Peña Nieto.
Al finalizar 2013, cuando debió haber dejado ya la presidencia –cuyo periodo cumplió el 5 de diciembre–, Madero no puede decir ya que su reelección es de trámite, como ha sido la impresión que ha tratado de generar, porque si bien ha sabido manejar a su favor los tiempos y las circunstancias, para desde el poder armar una estructura para su proyecto, también es cierto que se han agrupado en su contra los que lo detestan.